Eres El Único Mal Que Me Hace Bien

Capitulo 123

  Narra Ángel. 

Suelto un suspiro,apoyo ambos codos en la mesa y le doy un sorbo al café.

-¿Ya se han ido?- Le pregunto a Rosa mi empleada del hogar y asiente.

Desde ayer no hablo con Martina.

Cuando llegue a casa ella estaba encerrada en nuestra habitación,y se negaba a hablar conmigo. Y por el bien de su embarazo,no quise ponerla demasiado nerviosa.

Esta mañana más de lo mismo,se ha duchado, vestido, y se ha marchado a desayunar con Tini.

Joder soy un completo imbécil.

Voy a perder a la mujer de mi vida por unos celos completamente estupidos.

Y es que no son ni celos,simplemente no quiero que Pablo le haga daño a Daniela,porque el es nefasto para las relaciones.

-Ángel no sé lo que ha pasado entre vosotros y tampoco es de mi incumbencia,pero sea lo que sea seguro que tiene arreglo- Asiento. -Se aman,hacía años que no veía a una pareja tan enamorada el uno del otro,habéis podido con miles de cosas, podréis con esto,y más esperando un bebe- Me ánima.

-La he vuelto a cagar Rosa,como siempre alejó a todo lo que me hace feliz- Agachó la cabeza. -Soy un auténtico imbecil- Me golpeó a mí mismo.

-Deje dé martirizarse,así no va a arreglar nada, vístase y vaya ha hablar con ella- La miró.

Aún dudándolo,le hago caso y me preparo para ir a la empresa.

No quiero discutir con ella,es algo que siempre he odiado,y encima tampoco quiero alterarla en su estado.

Compro un ramo de rosas blancas y un peluche para nuestra hija,y Ramon me lleva a la sede.

En cuanto entro,me encuentro a Tini y Valentina hablando,las cuales al verme sonríen.

Estas dos últimamente pasan mucho tiempo juntas, y más desde que Tini trabaja aquí, pero de eso me interesaré más tarde.

-Buenos días señor Zamora- Me saluda Valentía y le saludó con la cabeza.

-Está en su despacho,no sé siente muy bien,así que no la alteres por favor- Me dice mi hermana y asiento.

Joder,ni cuándo le pedí matrimonio estaba tan nervioso.

Doy varios toques en la puerta,y cuándo oigo que me da permiso,entro.

Cuándo abro,lo primero que hago es mostrar el ramo y él peluche.

La oigo suspirar,y entro por completo.

Se le ve triste,joder odio provocarle eso,yo sólo quiero hacerla feliz.

Estoy seguro que su cabeza ha creado infinitas historias que no son ciertas,su inseguridad es así de grande.

-Hola- Le saludo y me acerco para darle los regalos.

Agarra el ramo,y lo huele con los ojos cerrados,se que es un olor que le recuerda a su abuela.