Capítulo 72

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Narra Ángel.

-Ángel son las 12,y aunque no vayamos a trabajar hoy,debemos ir a llevar unos informes- Insiste Martina y suelto un suspiró.

Yo siempre he sido muy responsable con la empresa. Pero últimamente estoy algo flojo,y más hoy con lo que nos paso ayer con Rafa.

Creo que necesito unas vacaciones,y no tardaré en tomármelas junto a Martina.

-Cariño,creo que nos vamos a tomar unas pequeñas vacaciones- Musitó levantandome de la cama. -Entre el orfanato,y lo que vivimos ayer,estoy muy agotado,así que he pensado que nos podríamos ir unos días a la playa- Le explico. -¿Te parece bien?- Le pregunto al ver que no dice nada.

Me quedo observando como se maquilla un poco.

Martina no suele maquillarse mucho, y con el poco maquillaje que se pone, esta preciosa,aunque ella esta preciosa hasta sin maquillar.

Jamás había visto a una mujer así. Bella por dentro y por fuera.

Y soy afortunado de tenerla a mi lado,y tengo que preocurar no perderla, porque eso no me lo perdonaría jamás.

-Claro que me parece bien- Responde mirándome. -Pero primero debemos solucionar algo- Suspiro y me meto en el vestidor. -Ángel no huyas- Me sigue. -Debemos enfrentarnos a ello-

Por alguna razón me da miedo decirle a mi hermano que Martina y yo somos pareja.

Me da exactamente igual que el no me hable,a pesar de ser mi mellizo, nuestra relación nunca ha sido muy buena.

Temo que en el momento que se lo vayamos a decir,Martina lo vea sufrir, y se de cuenta que lo quiere.

Es cierto que seria absurdo,porque Pablo le pidió matrimonio y ella le dijo que no,pero no puedo evitar tener miedo de perderla.

-Esa situación me da dolor de cabeza- Susurro. -Se que voy a discutir con el,y no me apetece nada- Me acercó ha que me haga el nudo de la corbata.

Yo se perfectamente hacerme el nudo.

Pero desde que Martina esta en mi vida,me encanta que ella me lo haga. Y se que a ella también.

-Ángel a mi tampoco me apetece hablar con Pablo de esto,y menos sabiendo que lo va a pasar mal- Admite. -Pero debemos hacerlo,no podemos vivir siempre escondidos- Termina el nudo,y sonríe.

-Yo no te escondo- Susurro y le besó la nariz.

-Lo se,pero si queremos ser felices debemos dejar las mentiras atrás- Asiento.

-Esta bien- Cedo. -Llama a mi hermano y dile que debes hablar con el- Sonríe. -Pero te advierto que como se ponga muy nervioso,no me estaré quieto- Rueda lo ojos. -A mi que me haga lo que quiera, pero a ti que no te toque- Me sonrie. -Venga anda,vamos a la empresa,y hoy mismo busco un destino para nuestras vacaciones-

-¿No me vas a dejar elegir?- Niego. -A pues muy bonito- Bromea y suelto una carcajada.

Ay Martina. ¿Que me has hecho? Jamás pensé que sería tan feliz.

Vamos saliendo de casa,y justo en la entrada nos encontramos a la persona menos indicada.

-¿Que haces aquí?- Le pregunto borde.

-He venido a comprobar si lo que sospechaba era cierto- Contesta sin más. -Y si,si lo es- Susurra mirando a Martina.

-Papa,te advierto que no me toques los cojones,y menos en mi propia casa-

Martina me coge la mano tratando que me tranquilice.

-¿Cuando le piensas decir a tu hermano que le has quitado a la novia?- Lo miró mal y suelto un suspiró.

Eres El Único Mal Que Me Hace BienDonde viven las historias. Descúbrelo ahora