Bajo tu dominio

Capítulo 27

Junto a las maleta, recostada en la pared cerca a la puerta, espere a Demian quien llegó 20 minutos después, tomo las maletas y salió de la habitación, como de costumbre lo seguí hasta el taxi que nos llevaría al aeropuerto de Lamezia en Italia. Como dijo el vuelo salió a las 9:30am, un viaje que duró alrededor de 5 horas, cinco horas en las que Demian no me dirigió ni media palabra, ni siquiera cuando bajamos del avión y tomamos el otro taxi rumbo a la casa. En el taxi le había dicho que tenía que decirle algo pero el solo contestó que en otro momento porque estaba cansado.

Tenía pensado esa misma noche hacer una cena junto a la alberca, ahí le entregaría una pequeña caja blanca que había alcanzado a hacer en la hora que no estuvo Demian en la habitación, la cual en el interior introduje un pequeñito mameluco color azul con manchas blancas en las extremidades y que en el centro decía ''Hola papá'' era tan bonito.

- Quédese con el cambio – volví a tierra cuando escuche la voz de Demian hablando con el conductor del taxi.

Baje del auto y espere que bajaran las maletas, mi esposo las tomo y entro con ellas a la casa... mi esposo, llevaría un tiempo acostumbrarme a decirle de esa manera, pero me gustaba.

-Mady, Demian, por fin llegan – hablo Matt desde el umbral de la casa

Espere a Lily que corriera hacia nosotros y darnos un fuerte abrazo, pero eso no sucedió, por el contrario se veía un poco cabizbaja pero no como la otra vez, si no como cansada.

-Lily ¿cómo estás? – me acerque a saludarla, me respondió con alegría, pero no con toda su natural energía que siempre demandaba.

- Bien, bienvenida Maddy, que bueno que estés ya en casa – hablo algo entusiasmada

- Bueno, nosotros solo veníamos a saludarnos y despedirnos – hablo Matt

- ¿despedirse? – dijo Demian

- sí, con Lily iremos de viaje para desestresarnos un poco

- A dónde irán? – pregunte intrigada

- En Alemania tenemos unas amistades, así que iremos de visita y luego a visitar algunos lugares – dijo Matt

- Espero les vaya bien y que disfruten- dije alegremente

- Bueno, ya nos vamos. Bienvenidos, nos vemos pronto – dijeron los hermanos para luego marcharse.

Vi a Demian preguntar en susurros a Matt y luego contestar el celular apartándose un poco del lugar. Observe a los hermanos subirse a su auto y luego salir de prisa del lugar, me gire para encontrarme con Demian pero me detuve al ver la mirada que me regalaba, era la misma mirada malévola que había desaparecido de su rostro hacía ya un tiempo.

- Ssu..suce..- alcance a decir cuando oí chirriar las llantas de un auto haciéndome girar de prisa para verlo entrar al recinto, reconocía ese auto y los que venían detrás. Sentí como mi corazón empezó a palpitar más de prisa y con más fuerza de la normal, mis manos sujetadas con fuerza en las manijas de mi bolso en mis hombros y mi rostro sudaban mientras veía el auto detenerse, me gire para ver de nuevo a Demian.

- Demian ¿qué está pasando?- no contesto - ¿Amor? – no respondía, solo me observaba con una sonrisa de lado

Volteé hacia donde estaba en auto y vi abrirse la puerta, de este bajo quien no quería volver a ver jamás en mi vida, pero ahí estaba el, Aron de traje negro y sentí todo mi mundo desmoronarse en cuestión de segundos, se posiciono frente al auto y sacó del bolsillo interior de su chaqueta un sobre de manila, empecé a retroceder hasta topar con mis zapatos el borde de la primera escalera cerca de donde estaban las maletas, Demian dio unos cuantos pasos aproximándose a donde Aron y este hizo lo mismo.

- Walker, por fin nos volvemos a ver- dijo Aron con sorna estrechando la mano con Demian- aquí está lo acordado – le entregó el sobre de manila a Demian, él lo abrió y sacó un gajo de billetes, los observo y vi que hizo una cuenta rápida del dinero.

- Está completo-dijo Demian serio introduciendo el dinero en el sobre

No podía estar pasando esto. No ahora, porque si estábamos bien, él no podía venderme a Aron ¿por qué me sucedía esto a mí? ¿Qué cosa tan mala pude haber hecho para que demian, mi esposo me odiara tanto? ¿Por qué se casó conmigo entonces? ¿Por qué? Justo ahora que tendríamos un hijo.

- Entonces, entrégamela – sentenció Aron y Demian asintió

Demian se dirigió con paso decidido hacia donde yo estaba, y yo empecé a retroceder subiendo de espaldas las escaleras mientras Demian se acercaba.

- No Amor ¡ por favor, no me hagas esto! ¡ por favor! – dije con lágrimas en mis ojos y mi corazón a punto de salir volando por mis costillas

- Cállate- me agarro del brazo para empezar a bajarme de las escaleras

- Demian ¡por favor, hablemos primero, debo decirte algo! Por favor no me hagas esto... Demian ...Demian – tiro fuerte de su agarre

Me tire a suelo en un intento por detener el camino hacia Aron, me agarre de las piernas de Demian y mientras lloraba gritaba

-¡te lo suplico, véndeme a otro cliente pero no a él! ¡A EL NO POR FAVOR! ¡A EL NO! – Gritaba mientras sentía mi garganta desgarrarse por dentro - ¡DEMIAN, POR FAVOR!

Me agarre más duro a sus piernas pero desgraciadamente dos de los guardaespaldas de Aron me tomaron de los brazos haciendo que soltara mi agarre de el y que mi bolso callera al suelo. Sentí mi cuerpo levantarse y ver el rostro de Demian con el ceño fruncido. Yo solo lloraba mientras veía su rostro y mis cosas esparcidas por el piso. Los guardaespaldas me llevaron junto a Aron a pesar de la resistencia que yo hacía.

- Que gusto volver a verte sobrina – dijo el asqueroso de Aron, tomando mi mentón para que alzara mi rostro y verlo.

- Ha cambiado tu olor pequeña - Aron acercó su rostro al mío y respiro mi aroma

En ese momento solo quería desaparecer del mundo, odiaba mi vida, mi suerte, odiaba todo, menos a mi hijo, sería por lo único que me aferraría a la vida... solo por mi hijo.