Maddy
Mi ángel, en eso se había convertido Tito para mi. Hasta tener su chaqueta encima de mi cuerpo me proporcionaba ese calor que él emanaba y daba paz. Introduje una mano en uno de sus bolsillos y note un cordonsito que más se sentía como caucho, lo saqué del bolsillo y lo admire. Eran dos tiras de un tipo de caucho negro suave y delgado,me recordó a alguna clase que tuve en mi carrera de diseño, donde con cualquier material debíamos crear una estructura y recordando esa clase se me ocurrió que en agradecimiento podía hacerle una manilla a Tito.
Empece a medir una tira sobre mi muñeca tomando la medida, deje un poco de espacio ya que era evidente que Tito tenia mas masa muscular que yo, corte la medida que me pareció adecuada con mis dientes y le hice un nudo con las puntas. Con la otra tira que me quedaba, la desarme y vi los alambres cubiertos del delgado caucho, los saque y tomé el color rojo envolviendo el aro que había hecho antes alrededor de 4 cm corte y deje un espacio, luego volví a hacer lo mismo con el alambre de color rojo y en el espacio que deje envolví el alambre del color azul.
A lo mejor si no podíamos salir juntos del lugar, se llevaría esto como recuerdo. No podía tener mucha creatividad, pero por lo menos esto aparentaba una manilla.
- Quiero que te lo comas todo, no quiero ver ni una sola migaja en el plato - su voz sugerente como un padre me hizo reir.
- se ve delicioso, gracias - empece a decorar todo cuanto había en la bandeja,arroz papas y demás.
-Debo irme. Quiere que vaya a seguir a tu hermano . Aprovechare para lo que ya sabes - apunto Tito quien se había puesto otro atuendo.
- Esta bien ¿ cuando volverás? - seguía comiendo de mi bandeja. Mi estomago lo recibía ansioso.
- En dos días...Quiero que te cuides ¿ esta bien?- se sentó a mi lado y acaricio de nuevo mi cabello.
- ¿ sucede algo? ¿ Por que lo dices así? - trague bocado mientras me ponia de pie en frente suyo
-¿así como?- fruncio el seño
- No se, te sentí raro. No me hagas caso - tome su rostro entre mis manos. - ¡tengo algo para ti!
Tome la manilla y se la entregue - pontela, no tengo como agradecerte por lo que haces por mi. No tengo algo mas con que agradecertelo.
- No tienes porque agradecer. Desde el día que te vi en ese cuarto,supe que quería protegerte y eso hago, eso haré - se levantó y me abrazo - ¿ una manilla? - pregunto curioso luego de prestarle atención a mi improvisado regalo.
- si ¿ te gusta?- pregunté mientras él trataba de encajar en su muñeca la manilla - no es mucho, pero así estoy cerca de ti - hice un mimo encogiendo mis hombros
- si con ella es como tenerte cerca, no solo me gusta, me fasina - alzo mi cuerpo y dio giros sobre sus pies - ahora tengo que irme - puso mi cuerpo sobre el piso - Te veré en dos días, te quiero, lo sabes ¿ verdad? - pronuncie un si en susurros, beso mi frente y se marchó.
No quería que se fuera, tenía un mal presentimiento. Pero aun así confiaba en la capacidad de Tito y prefería que fuera él quien siguiera a mi hermano. Pues no sabía si después de salir de este lugar volvería a verlo pronto. Me gustó saber que le ha ido bien y me preguntaba que había ido a hacer a la casa de él, de Demian. También me preguntaba si a él volvería a verlo, lo cierto era que no tenia muchas ganas de hacerlo. Demian había sido algo así como el demonio que maquino mi presente vida. En realidad no podía decir que lo odiaba pero siempre me quedaría la duda del ¿por qué quería destruirme hasta este punto? O ¿ por qué se había casado conmigo para luego enviarme a este infierno? A lo mejor nunca me Amó y estar al lado de Aron había refutado esa idea. No lo podía culpar de enviarme precisamente con Aron, porque el no tenia porque saber mi parentesco con él, pero si de venderme como cualquier prostituta. Si de por si ya me había dado la oportunidad de empezar con él de nuevo y casarme, no dude en perdonarle lo que viví antes de eso. Pero no entendía por que él después de la luna de miel volvió a venderme. No lo odiaba, debía de hacerlo pero no, Tito había ayudado a desvanecer ese sentimiento y concentrarme en sobrevivir así como Josh una vez me ayudo y apague todo lo que sentía con lo que paso con Aron cuando chicha, esta vez no me iba a intimidar por Aron y aún más si tenía la compañía de Tito.
Así que me concentre en vivir lo poco que podía, a hacer todo lo que pedía Aron para que sus golpizas fueran en el menor grado posible, todo para no tener de nuevo una muñeca dislocada o los tobillos tronchados, o esas golpizas donde me faltaba el aire y pensaba que moriría. Ahora le tocaba a él, esperaba que lo que había planeado Tito resultara a nuestro favor y así seria libre y me iría, lejos de este lugar, lejos de Alexander y lejos de Demian. Quería empezar de nuevo y eso haría.
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Tito
Odiaba dejar a Maddy sola ese lugar, saber que el imbécil de Aron la golpeaba cada oportunidad que tenía, que abusaba de ella, era frustrante. claro que frente a Aron no podía demostrar esa repulsión que yo guardaba hacia él, no solo por Maddy si no por lo que había hecho con mi novia hacía mucho tiempo. la diferencia entre las dos era que él era su tío, en cambio mi mi chica solo fue otra inocente que cayó en sus manos, pero del resto compartían el abuso de Aron.
Maddy me recordaba a ella, con su espontaneidad, su risa y su forma de hablar. Había aprendido a controlar mis emociones y no dejarme amedrentar por ellas desde el día que Aron disparó directamente a la cabeza de Diana frente a mis ojos, imagen que se que quedaría grabada en mi mente y reproducida día tras día, con el tiempo no habian lagrimas tar ese recuerpo, despues solo aparecia el odio y luego nada, solo existía el ansia de acabar con Aron de cualquier manera, pero para ello se debía ser sutil.
Aron había extendido su confianza conmigo desde ese mismo día. Desafortunadamente Diana tuvo que contar al otro clan enemigo de Aron sus movimientos para salvar su vida, pero no contaba con que encontraría la muerte en manos de Arón y no solo eso sino que él la violó como una venganza... frente a mí, después le disparó. yo me encontraba entre la espada y la pared, si hacia algun movimiento mi madre o alguno de mis hermanos estarían como ella y aunque siempre pense que daria mi vida por ella, sabía que si hacia algo en su contra en ese momento, no me mataría a mi si no a mi madre y mis hermanos de la misma manera que a Diana frente a mi y me dejaría vivo para que viviera con eso y no conforme tendría que trabajar para él y yo no podría vivir con eso, si por años la muerte de Diana no me había dejado dormir tranquilo, cargar con la muerte de mi familia me volvería loco. Así fue como llegué a trabajar a su lado,necesitábamos mucho dinero y él apareció, no era bobo sabía a qué se dedicaba, pero tenía que hacer lo que fuera por ese dinero, pensé que solo haría un pequeño trabajo para él pero después no tuve salida y me convertí prácticamente como en su mano derecha. de esa manera, podría cobrar la vida de Diana.
Conocía todos su movimientos, todo cuanto hacía, por eso este era el momento perfecto para que sus enemigos atacaran y yo tomar ventaja. por otro lado estaba Maddy quien correría un gran peligro, pero sabía la fuerza que ella cargaba y aunque fuera a pedazos la sacaría de ese lugar, después de eso su hermano al que justo en este momento observaba entrar a su edificio, debería de encargarse por lo menos por un tiempo de ella. La chica me importaba lo suficiente y a como dé lugar le daría la libertad que ella tanto deseaba aunque para eso debiera volver al lado de su esposo.
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Bajo tu dominio
RomantizmMaddy, una chica inocente, amada por su hermano, odiada por su padre y apetecída por su tío. Cansada de su pasado y de tanto rechazo, decide hacer un trato con su padre; "el pagaría toda su carrera de diseño a cambio de que ella no le jodiera la vid...