Sombras tristes y oscuras. *Completa*

Cap.56 Cuando no sale el sol

Christian bajó como un rayo por las escaleras, necesitaba correr, huir, no podía creer lo que estaba pasando, no quería creerlo, Habían terminado?, Ana le había dicho que ya no tenían nada?, mientras cavilaba estos pensamientos llegó al lobby y salió a la calle, la camioneta estaba enfrente, se tiró al asiento de atrás y le rugió a Taylor que fueran a casa.

Que había sucedido?, cuando Taylor le llamó a informarle que Anastasia no quiso que la lleve a su casa, se imagino que algo debió pasar, terminó con Flynn y salió en su búsqueda, conforme la llamaba y el celular le daba apagado y el teléfono de la casa sonaba sin respuesta, la rabia crecía más, podía ser ella mas irresponsable al desaparecer así?

Sacó su celular para llamarla pero se quedó mirando la pantalla, ¿Qué paso? Como llegaron al momento en que terminaban?, sí, él la había dejado sola pero tenía sus motivos, ella le había dicho te amo, ¿se lo dijo realmente o él se imagino que lo dijo? Jamás lo mencionó mientras discutían, pero realmente le había dicho te amo o a él le pareció escuchar eso? Y que le diría ahora? Siguió mirando su pantalla hasta que el carraspeo de Taylor lo interrumpió.

-Llegamos Sr. Grey

Sin decir nada bajó de la camioneta y subió al ascensor, en ese pequeño espacio parecía un animal enjaulado, iba y venía por los cuatro rincones sin parar.

¿Qué mierda había pasado?, en ese instante el ascensor se abrió revelando su entrada, cruzo la puerta y allí, en lo vasto de su departamento vacio, y tan lleno de ella, todo le cayó como un baldazo de agua fría, Ana había roto con él.

Miró a su alrededor y se dio cuenta de que ese lugar era un desperdicio de espacio sin ella, que había pasado?, Ana había roto lo que tenían, Ana, la Ana que anoche había estado en sus brazos mientras hacían el amor y a la que no quería soltar nunca, Ana la que se había acurrucado en su regazo dejando que él la confortara, Ana la que le había regalado la sonrisa más pura cuando descubrió que él había ganado el premio, Ana la que le había dicho te amo.

-URGGGHHHHH – un grito de rabia surgió de su pecho y su teléfono terminó estrellado por la pared, una mesa que estaba en su camino terminó en medio del salón y a partir de allí, todo se desató, tiró todo lo que encontró a su paso, cuando se escucho el estruendo Taylor y la Sra. Jones acudieron a la sala y vieron a su jefe rompiendo todo a su paso

-Sr. Grey - dijo la Sra. Jones sobre el ruido tapándose la boca con ambas manos, Christian paró un segundo y los observó.

-Largo – dijo con furia, para luego arremeter con todo – FUERA, LARGO, VAYANSE ,DEJENME SOLO!

Taylor estiró a Gail hacia sus habitaciones, con reticencia ella se fue.

-Jasón por favor, que pasó?

-No tengo idea, solo sé que se peleo con la Srta. Steel

-Oh, Dios – dijo Gail tocándose el rostro – está destrozando la casa, que hacemos?

-Dejémoslo así, que se quite lo que tiene adentro, si no pasa en un rato, veré de llamar a alguien.

Y se fueron dejando a Christian destrozar todo lo que tenía a su paso, cuando terminó miró a su alrededor, todo estaba patas para arriba.

Fue hasta su habitación pero al cruzar la puerta el aroma lo hizo tambalear, allí en su habitación todavía se podía oler su perfume, miró la cama y vio que estaba hecha y tenía sabanas nuevas, se acerco hasta donde ella había dormido la noche anterior, acaricio el espacio con los dedos y tomó su almohada, la acercó a sí y aspiro con la esperanza de encontrar su aroma, y allí estaba todavía, se sentó en la cama con la almohada en mano y miró hacia afuera, se veía la lluvia caer, y la tarde gris, se suponía que este fin de semana debían de haberlo pasado juntos, recuperar el tiempo perdido, no entendía como en menos de 24 horas todo había cambiado tan drásticamente.