Thing Of Two || BNHA

S i e t e

> Duelo <

— Pasaron.

Todoroki Enji no cabía de la emoción. Su hijo había entrado en la UA con una de las mejores calificaciones e Inoru igual, siendo solo un poco más alta al bicolor pero sin tomarle verdadera importancia.

Y eso los tenía peleados... otra vez.

Desde aquellos besos en el bosque, Inoru creyó ilusamente que se llevarían mejor, que tal vez iniciarían una relación o que irían lento siendo que no se conocían lo suficiente y ella quería ir a lo seguro, pero nada de eso pasó. A pesar de que la rubia volvió ese mismo día con Shouto a la casa, él le ignoró apenas pusieron un pie dentro, sin lucir enojado o apenado, simplemente era el mismo de antes, la misma rutina de todos los días. Y eso la tenía furiosa.

— Lo hice por mí, no por ti, viejo.

Ha, sumando el hecho que había estado de un pésimo humor. Realmente no lo toleraba.

No intentó ocultar su suspiro, mirando con cansancio al chico a su lado y después a los resultados que seguían en la gran pantalla dentro de la academia. Habían varios chicos más que también veían sus resultados, todos habían pasado y poco le interesaba saber si había algún decertor, solo quería irse a casa y encerrarse en su habitación.

Odiaba haberle hecho caso a Shouto en regresar ese día, de no ser por él ahora mismo estaría más calmada... y había sido todo lo contrario.

— Enji-san. —el hombre siquiera le miró, pero por costumbre sabía que le estaba prestando atención. — Quiero irme. —no recibió respuesta a cambio, haciendo que su ansiedad comenzara a subir y sus ojos miraran para todos lados. Ya estaba empezando, esas ganas de correr como loca, de buscar algo, de sacar toda la energía que tenía guardada, y su tutor no la estaba ayudando. — Por favor...

Inoru nunca rogaba, por eso fue suficiente razón para que ambos Todoroki le miraran con extrañesa. Pero oh sorpresa, ella ya no estaba donde la habían visto hasta hace unos segundos.

De hecho... estaba desmayada unos pasos alejados de ellos.

Respiraba de manera acelerada, con las mejillas teñidas de rojo y su cuerpo bañado en sudor frío. Tenía espasmos y luchaba por moverse, susurrando incoherencias e intentando arrastrarse fuera del lugar.

Una pequeña enfermera se acercó a revisarla, extrañandose al ver que, aunque aparentara estar muy mal, no presentaba temperatura o malestares generales. Era como si su cuerpo se estuviera obligando a verse mal, y eso era peligroso porque las personas como Inoru terminaban por perder el control de su quirk y se movían en automático, como si tuvieran que sobrevivir a algo o escapar de alguien.

Shouto veía como intervenían, sin dar señales de querer acercarse, igual a su padre. Mas bien, él creía que estaba armando un berrinche, actuando para llamar la atención. Su atención. Sonaba cruel pero no se sometería a nadie, ni siquiera por la chica que le gusta. Que hiciera todo lo que quisiera, no actuaría como alguien débil, menos frente a ella.

— Estará bien, Endeavor-san, lo mejor será que respire aire puro. Su quirk lo necesita. —la rubia descansaba en los asientos traseros de la pequeña limusina que usaba para ir a la agencia, ya respiraba mejor, le habían inyectado un calmante que hizo su trabajo rápidamente. — Es una chica muy especial...