06 de Febrero de 2014

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Hoy Erick tiene revisión, pero el médico será el que vendrá, primero para confirmar que ya se puede levantar sin problemas y para que así no cometamos un error tratando de levantarlo. Así que dejaremos que el venga y nos diga su diagnóstico.

—No creo que sea necesario que te quedes más en cama Erick —él sonrió—, no alto, no te estoy diciendo que ya puedes ir a subirte a un caballo o ir a correr, pero sí que puedes ir a trabajar y comer ya en el comedor. No debes de cargar mucho peso y cuidado con las actividades que requieran esfuerzo.

—¿Cómo el sexo?

—¡¡Erick!! —grité yo al instante—. ¿Por qué preguntas algo así?

El médico sonrió y yo me puse roja, no podía creer que lo haya dicho en voz alta.

—Lo siento pequeña, pero tenía que preguntárselo.

El médico lo siguió revisando y dando algunas instrucciones, yo tomé nota mental y corroboré que anotara todo en la receta, por si Erick pensaba no hacer lo recomendado. Algunas indicaciones conforme al pago y las facturas que sus honorarios conllevarían, y fue todo, no había mucho que hacer su hombro estaba reaccionado de buena manera. Acompañé al médico a la puerta, me despedí y agradecí por venir a casa y por todo en los latimos días. Cerré la puerta y me regresé con Erick, que para mi sorpresa ya se estaba arreglando.

—¿Erick? ¿Qué estás haciendo? El médico te dijo que no puedes hacer actividades que requieran esfuerzo.

—Si escuché Nicole, y si mal no recuerdo dijo que puedo ir a trabajar y por este momento es lo que necesito, llevo 13 días siendo incapaz de ir a hacer mis funciones como tienen que ser y estoy harto que Michel lo lleve, así que iré a arreglar todo el desastre.

—Erick, no por favor —dije interrumpiéndolo.

—Pequeña no me quedan muchas opciones, cumpliré con lo que pide el médico, pero no puedo quedarme más en esa cama, estoy harto, agradezco que me hayas bañado y alimentado estos días, pero el diagnóstico es positivo y no me impide hacer mi trabajo, sé que tengo que cuidar mi hombro hasta que lo sienta completamente recuperado, no tengo intenciones que por algún descuido tenga que volver a reposarlo, pero por ahora nada me impide salir.

Esto último lo dijo tomando la corbata y saliendo de la habitación, yo lo seguí hasta la puerta intentando decirle lo que había sucedido con mi visita a la Universidad, que requería ir con él, tener estos momentos, que si él se desesperó por 13 días que no pudo salir y trabajar, yo por más de 6 meses ya estaba eufórica, pero no me escuchaba, estaba desesperado por salir de esta casa.

—Erick yo...

Él se volteó y me interrumpió con un beso.

—A eso voy pequeña, a eso voy.

Y sin más se retiró a la entrada, quiero pensar que Efrén ya lo estaba esperando porque una vez salió por la puerta de la propiedad, ya no supe en que vehículo se fue.

Cerré la puerta enojada, ¿por qué tenía tanta prisa? Es casi medio día, la mitad de las cosas las puede solucionar desde aquí y regresar tranquilamente mañana. Pero mis teorías con Erick nunca funcionan, no sé si habló con alguien mientras acompañaba al doctor, no sé si tiene algo que hacer, realmente no sé nada.

—Señora, si gusta comienzo a preparar la comida.

—Si Clara, está bien y muchas gracias.

Ella me sonrió y se retiró a la cocina, era no sé si la octava o novena persona que veía en esta casa desde que Erick me dijo que alguien me iba a estar apoyando con las labores domésticas. Escucharlo en mi cabeza suena tan mal, estas no son mis tareas, esta no es mi casa aunque últimamente me cueste menos estar aquí, es cierto que este no es mi hogar, yo necesito regresar a mi casa, al hermoso lugar en el que estuve hace 2 días y que hizo sentirme completamente bien y feliz. Si toda esta estadía, todo esto con Erick era para que nos uniéramos puedo aceptarlo, al final todo ya quedo en el pasado, ponerme a llorar por lo sucedido no tendría caso, pero no voy a permitir que me siga encerrando en esta casa, no puedo permitirlo.

Atrapada ||Completa||Donde viven las historias. Descúbrelo ahora