NOVELA EN EDICIÓN.
Soy Nicole Soza, una graduada hace 1 año de Doctorado, tengo 30 años y mi nuevo jefe me tiene prisionera, y yo, solo tengo una opción, seguirle el juego, es mi única arma de defensa si quiero salir de aquí, comportarme de acuerdo...
Estoy en el sótano, regresé como Erick lo dijo, esta vez no del todo "por mi comportamiento" sino porque él se va, va a trabajar y para que, según sus palabras, yo no imagine lo que está haciendo, estoy aquí, desnuda, esperando a que se vaya, hace menos de 10 minutos me violó de nuevo, no puedo llamarlo de otra manera, porque eso es lo que hace conmigo.
Estoy esposada a la cabecera porque hace dos días puse un poco de resistencia y no quiso que sucediera, primero me dio una cachetada y después me ató, las primeras veces me costó , pero a la séptima vez, solo acepté. Erick parece disfrutarlo, por todo lo que presiento que le otorga, poder, satisfacción, control, creo que hasta mi propio dolor le gusta. Quisiera que de una maldita vez me embarace, que todo esté sexo que me está obligando a tener con él sea efectivo y el bebé sea una realidad. Él no usa protección, y hasta donde conozco, yo tampoco, se que ha llegado al orgasmo, eso me queda más que claro, y la mayoría de las ocasiones es dentro de mi, pero sigo sin bebé y lo peor de todo es que ni siquiera estoy del todo segura si deseo un bebé de él, no sé si quiero que una persona indefensa lo tenga a él como padre... No lo sé, no sé lo merece, pero él lo desea, y ahora tengo mi presentimiento de la razón de ser papás.
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Ya estoy sola, tengo el baño abierto gracias a que él no se encuentra, lo único que necesitaba era entrar en aquella tina, tengo tantos moretones que me cuesta reconocer mi piel, mi propio cuerpo, es desagradable ver como me tiene. Es terrible pensar que esto le gusta, que esto le excita, es desastroso.
Quiero no pensar aunque sea por este momento, no lo quiero, aprovecharé sus dos días de ausencia, de saber que está en mi querida Universidad no es de ayuda, al contrario, hace que me sienta peor, yo amaba estar ahí, había días que pensaba que podía estar haciendo algo diferente, como me faceta en una empresa, pensaba que con mis ahorros y siguiendo a tiempo parcial en la Universidad podía ejercer mi carrera de una manera diferente, que podía marcar más la diferencia, pero ahora que veo para atrás, veo que mis alumnos son importantes que cambiaron mis perspectiva, y la transformaron para mejor, creo que parte de mis fuerzas radican de mis padres y de mis propias ilusiones de regresar a la docencia... regresar próximamente, espero pueda suceder.
