Capitulo 73

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[Lucy]

Juro que ella se bebió toda la botella y no se desmayó o vomitó y estoy impresionada. Yo bebo toda esa botella de vodka y de seguro terminaría en el hospital intoxicada por tanto alcohol.

Emily habla bastante, la mayoría del tiempo se quejó sobre chicos y habló sobre el vodka y otros tragos. Ella usa bastante maquillaje, mucho delineador y sombra y todo ese negro opaca sus ojos azules. Su cabello es largo y rubio y está desordenado pero se ve bien. Creo que todo su look es muy ‘gótico’ pero no sabría exactamente como definirla.

“Necesito un trago,” ella murmura antes de levantarse. “¿Estás adentro o no?”

Ciertamente tengo que regresar y buscar a Cassie o sólo matar el tiempo. Sostengo al cachorro entre mis brazos y me uno a Emily. Ella es alta, mucho más alta que yo y sus piernas son delgadas y bonitas. Está usando una falda negra corta y un top blanco con tirantes.

Limpio mis lentes con la manga de mi chaqueta mientras el cachorro desliza su lengua por mi barbilla. Los ojos de Emily escanean rápidamente mi cuerpo, esboza una pequeña sonrisa pero no dice nada.

“Vámonos Lucinda.”

“¿Vas a dejar a tus amigas?”  Pregunto mientras la sigo pero ella nunca responde a mi respuesta.

Acaricio el pelaje de la mascota y mis ojos están pegados a sus piernas, son muy delgadas, largas, bronceadas y no hay rastro de alguna imperfección. Mis piernas apenas son la mitad que las de ellas, me desagradan mis muslos y tengo algunas marcas por cosas que hice cuando era pequeña.

“¿Qué pasa mamacita?”  Un chico intercepta a Emily y detiene su caminata. “¿Quieres bailar?” Le pregunta y apoya su mano sobre su cintura.

“Sí, seguro idiota,” ella responde.

Su siguiente movimiento me deja desorientada, empuja al muchacho suavemente antes de que su codo colisione en la nariz del chico. El muchacho suelta algunos insultos mientras sus dedos presionan su nariz. Escuchamos unos silbidos y protesta por lo que ella hizo pero no parece importarle en lo más mínimo.

“Púdrete,” la escucho decir antes de seguir caminando.

Estoy completamente paralizada, ¿acaso no podía decir simplemente que ‘no’ y eso era todo? Jesús, creo que ella tiene un serio problema de ira.

“¿Podrías distraerlos?”Emily pregunta con sus ojos sobre mí.

“¿Qué? ¿A quién y por qué?”

“Ese grupo de chicos, háblales, necesito robar una botella.”

“¿Por qué simplemente no les pides un poco?”

“Oh vamos, sea una chica mala, es sólo una botella ni siquiera se darán cuenta.”

Hablar con desconocidos significa tener personalidad y suficiente confianza en sí mismo para ser capaz de generar una conversación espontanea y al azar. Debo dejar mi lado antisocial y tímido o al menos tratar.

“Está bien, lo haré,” acepto su propuesta y no puedo creer que esté haciendo esto por una extraña.

Es sólo una botella ¿qué es lo peor que podría suceder? Si algo sale mal sólo debemos pagar por ella lo cual en verdad no es tan horrible.

El grupo de chicos están charlando sentados alrededor de la mesa.  Hay unas botellas en el suelo, algunas están vacías y otras aún no las han abierto.

Tomo una gran bocanada de aire antes de caminar hacia ellos. 

“Um hola,” trato de hablar fuerte y los chicos se giran hacia mí. “Acabo de encontrar esta mascota y no sé quién es su dueño.”

Opposite worlds  »h.sDonde viven las historias. Descúbrelo ahora