Finally Free «Niall Horan» #1

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Niall.

¿Por qué me preocupaba de todos modos? Me aleje de la ventana, convenciéndome de que ella era simplemente mi vecina. Observé su vestido arrugado en la esquina recordando lo de anoche, qué noche.

Con sueño me recosté entre mis sábanas y estiré mi brazo hacia el velador para tomar mi teléfono, el brillo de la pantalla siempre era tan irritante, se lo bajé rápidamente, mientras colocaba música para ver algún mensaje de Will, Snake se tiró a la cama al lado mío.  

Creo que iba a dormir un poco más, me dolía la espalda y mi nariz estaba congelada. 

No había nada sobre Will, iba a bloquear mi teléfono pero vi la aplicación de twitter. Mordí mis labios y la tentación fue más grande. 

Entré y noté la cantidad de notificaciones que tenía, más de lo normal. La mayoría eran de fans lamentándose, otras tantas de verificados diciendo que me extrañaban. Salí de twitter para ver que en mis mensajes de WhatsApp había uno nuevo, aspiré una bocanada de aire y apreté en la aplicación. Era de mamá.

"Greg pidió una licencia en su trabajo y vino a acompañarme con Theo, él dice que es para acompañarme, pero sé que también es porque siente que está contigo cuando entra a tu pieza y toca tu guitarra" 02:15 

En otros tiempos habría mensajeado a Greg y le habría dicho "Deja de tocar mis cosas", pero sabría que él de todos modos lo haría imponiendo su autoridad de hermano mayor ignorándome por completo, tal como lo hacía cuando vivíamos juntos, tal como los viejos tiempos.

"¿Niall?" Mierda. Me había mensajeado en ese mismo instante, aquí eran las 11:30 de la mañana, lo que quería decir que en Irlanda eran las 16:30, ¿habría visto que había leído el mensaje? Eso era imposible, había eliminado toda opción de "dejar visto", además de la "última conexión", dejando sólamente mi foto visible.

"¿Niall, eres tú?" Mierda, mierda, mierda, siempre solía decir que mi mamá era una especie de bruja porque sabía cuándo hacía maldades, pero esta vez era en serio y me estaba asustando. Debía apagar el celular y hacerlo pedazos, pero la curiosidad me vencía en saber qué más colocaba.

"¿Quién eres y por qué tienes el celular de mi hijo?" Quería tanto llamar a Greg y decirle que nuestras sospechas sobre mamá conectándose con el más allá eran ciertas, ¡bruja!, ¡psíquica!, ¡pitonisa!, ¡hechicera!, ¿me había quedado dormido mientras veía el celular y estaba en un nuevo capítulo de "Charmed"? Por favor que Alyssa Milano cruzara esa puerta para decirme que todo era un sueño.

"Por favor, veo que dice <<en línea>>" Ah, así que eso era. Aún así no descartaba la posibilidad de la bruja, a lo mejor era cosa de mujeres y por eso se había saltado mi generación. A lo mejor era como "Abracadabra" y sus poderes iban a despertar cuando un virgen prendiera la vela en Halloween... De todos modos, ¿cómo era eso posible? Había quitado la opción de la última conexión, ¿no aplicaba eso para ver si estoy en línea? Maldita tecnología.

Como si el celular estuviera infectado lo bloquee y tiré en la cama, prácticamente se resbaló de mis manos de lo sudorosas que estaban, luego lo oculté debajo de un celular como si mi mamá me pudiese ver a través de la cámara con sus poderes, ¿qué había hecho?, bueno, de cualquier manera, mi mamá parecía creer que era otra persona quién tenía mi celular y que le estaba jugando una broma. Según el último mensaje de Will mi mamá se encontraba tan bien como podía estarlo, ya estaba informado de que Greg se iría a vivir con ella por un tiempo, pero aunque me dijera eso yo sabía que ella era una de las personas que sufría en silencio. Lo que me asustaba.

Casi podía escucharla decir "¡Niall James Horan! ¿¡Fingiste tu propia muerte para poder escapar!?"

Por más que quisiese quedarme todo el día en cama repitiéndome lo estúpido que era tenía esta fecha agendada desde que Meryem había arruinado mis planes de hacerme una casa, hoy día era el día en que iría a ver unos terrenos junto a la playa que un corredor de bienes raíces tenía para mostrarme.

Con toda la pereza del mundo me levanté de la cama y dirigí a la ducha para luego alistarme. Recordaba haber visto un café por aquí cerca la última vez que fui al supermercado, así que pasaría por ahí antes de ir a ver los terrenos. Primero coloqué a mi fiel amigo su correa, él me ayudaría a elegir un buen lugar, luego salí.

Una vez bien alimentado con un capucchino y pretzel tuve las fuerzas necesarias para ver mi futuro hogar. Valerie era la corredora de bienes raíces que una agencia me había recomendado, quien se encontraba esperándome con una sonrisa en el lugar acordado.

El primer terreno se encontraba junto a un hotel y a la vuelta de un catedral. De frente encontrabas las arenas blancas que Guyana ofrecía, tenía  una vista espectacular, sin duda, pero no me agradaba la idea de vivir al lado de un hotel donde llegaban turistas, personas entrando y saliendo en todo momento, lo descarté en cuanto lo vi.

El segundo lugar estaba más alejado y al igual que el otro estaba frente a la playa, pero esta arena en vez de estar blanca estaba café debido a toda la basura acumulada que los adolescentes graciosos usaban como lugar de sus fiestas, era increíble lo que la basura le podía hacer a la naturaleza. También lo descarté.

El tercero tenía palmeras alrededor y un sereno ambiente, a una cuadra se encontraba la embajada de Estados Unidos, parecía ser la mejor de todas.

-¿Qué tienes ahí Snake?

Mi amigo peludo, quién en cada lugar que visitábamos corría libre y oliendo como si estuviese investigando, había regresado con un calcetín en la boca.

-¿De dónde sacaste eso? Damelo- tironee de la prenda con Snake forcejeando hasta que lo soltó provocando que cayera de espalda sobre la arena.

-¡Ese perro!, ¡perro maldito ven acá!

Una señora que creía tenía unos setenta años caminaba demasiado rápido para la edad que tenía en dirección nuestra, había descubierto de dónde venía el calcetín.

-Dame eso, ¡controla a tu perro!- dijo la señora antes quitarme el calcetín de las manos. Señora que si elegía este lugar sería mi vecina. Nada como arruinar un perfecto terreno que una vieja cascarrabias odia perros. Descartado.

Costaba pensar que sería otro lugar que no fuese Londres donde me haría viejo, donde viviría por el resto de mi vida hasta que termine caminando con un bastón. Recordaba a mi mamá y el incidente de la mañana en cada sitio, tampoco le habría gustado ninguno de ellos, habría visto hasta el último detalle imaginándose la casa y todo aspecto posible.

Confiaba en que ella pensaba que todo era un error, pero el dolor oprimido en el pecho no me dejaba de decir el mal hijo que era por hacerla sufrir así.

Con la cabeza doliéndome decidí que eran suficientes terrenos por hoy día, así que agendamos otra cita para el fin de semana que seguía con Valeria, esto iba a ser más difícil de lo que creí y todo por la abraza árboles.

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Capítulo editado y co-creado por SmileWithHoran❤

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