❝Kelsey❞ S.M

0.34 ¡Maratón!

Despedí a mi familia viendo como ellos se alejaban para volver a su hogar mientras yo esperaba que Andrew me recogiera en el aeropuerto de Toronto. Habían terminado nuestras vacaciones familiares, estaba a dos días de cumplir 20 años y lo único que quería hacer era acostarme en mi cama mientras Kelsey me acariciaba. Este mes de agosto iba a ser totalmente loco, tenía festivales por doquier y no sabía como iba estar la agenda de Kelsey para que la pudiese llevar conmigo al menos a Ámsterdam para comenzar mi cumpleaños conmigo. Porque si, iba a pasar un gran cumpleaños en una de las ciudades más locas de todo el mundo y yo no se como reaccionar ante ello. Ya estaba todo pago y todo organizado, mis amigos iban a venir conmigo y aunque sólo Brian se quedaría conmigo el resto del pequeño tour por lo menos pasaría un gran día con mi grupo de amigos.

Vi a lo lejos a mi mánager y me pare de mi asiento donde lo estaba esperando, tomé mi valija y comencé a caminar hacia el, quien me esperaba con los brazos abiertos. Solté mis cosas y lo abrace

— Hey man — palmee su espalda y nos separamos
—¿Cómo has estado?¿que tal el viaje? — me pregunto mientras empezábamos a caminar a la salida del aeropuerto
—Cansado y agotador, el viaje me sacó todas las energias — el se rió. Los viajes en avión aunque no pareciera cansan demasiado
—Por suerte tienes dos días libres para después volver a irte — yo asentó y Andrew abrió su coche, abrí el baúl (maletero, como le quieran decir) y puse mis pertenencias, lo cerré y abrí la puerta del acompañante, entre al auto y cerré la puerta. — ¿hablaste con Kelsey en estos días? — yo asenti. Hablé con Kelsey todas las horas que podía y mi corazón no paraba de extrañarla — yo almorcé con ella el otro dia — mis cejas mostraron una cara confundida y el rio  — por tu cumpleaños, no puedo decirte nada si no ella me matará — yo asenti más tranquilo. Confiaba en los dos y sabía que nunca harían nada para lastimarme pero me sentía confundido al saber que tenían una relación cercana. Cerré mis ojos tratando de sacar esos malos pensamientos en mi cabeza y que mi malhumor no empezará a crecer, ya bastante tenía con el cansancio. Andrew prendió la radio y mi mejor amiga Camila Cabello empezó a sonar en el auto.

Una hora más tarde me despedí de Andrew y entre al edificio bajo las miradas de las nuevas secretarías, según me habían informado la antigua secretaria se había tomado licencia de maternidad haciendo que la reemplazaran. Les sonreí y entre en el ascensor, apreté el piso y esperé. Hubiese ido por las escaleras porque odio estos aparatos pero mis piernas en cualquier momento iban a dejar de funcionar, desbloquee mi celular y contesté los mensajes de mi familia, no había rastros de Kelsey y eso me ponía mal ¿sabía que llegaba hoy? Las puertas del elevador se abrieron y yo salí, iba a ir directo a mi puerta cuando mi vecina, Cindy, se apareció por mi camino.

—Vooolviste — grito mientras me sonreí, hice una mueca y le sonreí falsamente. No me agradaba, no me agradaba porque sabía cuáles eran sus intenciones, no me agradaba porque sabía como quería interferir en mi relación con Kelsey, no me agradaba porque sabía como era ella.
—Si — le contesté cortante mientras me daba la vuelta para ir a la puerta de mi casa
—¿Cómo te fue? — escuché como seguía mis pasos y suspire. Me pare en la puerta de mi casa y coloque la llave para poder abrir.
—Bien gracias, ahora si no te importa sólo quiero descansar, nos vemos — fue lo último que salió de mi boca mientas abría la puerta y entraba mi maleta y mi mochila para luego pasar yo. Cerré la puerta con llave y dejé mis llaves en el estante. Fui directo a mi cuarto donde mis ojos se abrieron al ver a Kelsey parada sonriendo, sonreí al ver como caminaba hacia mi, me adelante y la agarre entre mis brazos, la había extrañado tanto. Sentí sus labios en mi cuello y me separe de ella para poder besarla, otra cosa que había extrañado fueron sus besos, sus labios, su aroma, a ella.
Sus labios se encontraban desesperados buscando los míos, finalmente los uni en un beso desesperado mientras mis torpes pies la conducian hasta la cama.