THE STORYBOOK

H2: PARTE 9 (SPANISH)

Arthit giró en la esquina del pasillo con rapidez.

"Que no me siga... por favor que no me siga", suplicó mentalmente una y otra vez mientras se encaminaba hacia el lugar donde debía entregar los dulces.

Sus pasos, amortiguados a causa de la moqueta, apenas si se oían por el pasillo. Por lo que el joven, con el corazón encogido, no sabía si ESE HOMBRE había decidido seguirle como en otras ocasiones o si, por el contrario, finalmente le había dejado a solas.

Unos minutos más tarde, cuando alcanzó la zona donde debía hacer entrega de los dulces, se volvió hacia atrás, comprobando con alivio que estaba completamente solo.

Toptap no le había seguido.

El joven suspiró y, llevándose una mano al pecho, sonrió levemente.

Por fin a salvo...

Con su mirada puesta en el vacío pasillo, apenas reparó en la puerta que se abría a su espalda.

- "Vaya, al fin llegas" - dijo una joven que, con el ceño fruncido, salía en ese momento de una de las salas de reuniones que estaba enfrente suyo - "Te estábamos esperando".

Arthit se disculpó con rapidez, tras lo cual procedió a enseñarle las bolsas con el logotipo de la tienda.

- "¿Deseas que las deje en algún sitio en específico?" - preguntó amablemente y con una leve sonrisa en los labios.

La joven se sonrojó. 

Tras lo cual  asintió levemente con la cabeza. 

- "Es por aquí..." - dijo con una voz mucho más amigable mientras le indicaba con un dedo que la siguiera.

Arthit sonrió ampliamente, mostrando sus dos hoyuelos. 

Unos segundos más tarde estaba caminando al lado de una azorada joven por el solitario pasillo y en dirección a la sala de descanso. 

Quince minutos más tarde, con un cheque en sus manos, el joven salía por la puerta principal del edificio.

"Al menos ya no llueve...", se dijo mientras levantaba la mirada hacia el cielo, "menos mal..."

Y es que, al menos, su salida con Kongpob no iba a tener que cancelarse... 

FLASHBACK...

Arthit sonrió levemente mientras observaba la expresión de Kongpob.

El joven se encontraba sentado en una de las sillas de la sala, esperando a que llegara Chanyeol. 

Sin embargo su expresión, en vez de ser de alegría ya que por fin le iban a decir cuando le iban quitar el yeso de la pierna, era de desilusión y descontento.

- "Vamos Kong... sabes que no puedo dejar sólo el negocio tanto tiempo.. y ya te he prometido que te acompañaría al cine y a cenar esta tarde.."