Capitulo 32

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Llevo rato platicando con Dylan, en una clase me tocó hacer equipo con él y entre conversaciones pude conocerlo más. Es algo fresa, pero no una mala persona.

-Entonces en dónde lo haremos bonita, tú casa o la mía y cuándo.

-¡Disculpa! - Nicolás preguntó sorprendido con el ceño fruncido parándose a su lado.

-No es lo que te imagines - negué riendo, Dylan soltó una carcajada y Ana un risita - Hablamos de nuestro proyecto.

-Ah, pues hablen bien.

-Nada, eres un guarro. Luego, luego a imaginarte cosas que no - agarre mis cosas levantándome del pasto - Mañana saliendo vemos a cuál, adiós Dylan.

Los chicos caminaron de tras de mí, deteniéndonos frente al aula donde tenemos clase.

-¿Por qué tardaron tanto? - Ana se puso nerviosa.

Nico la miró de reojo - No sé - me miró dándome una ensalada y jugo de naranja.

-Gracias, por favor continúa.

-En lo que yo compraba ella fue al baño, termine y ella no regresaba así que la fui a buscar. Unas chicas salieron muy sonrientes y detrás de ellas venía Ana y cuando la llame se asustó - fruncí el ceño mirando fijamente a la chica - Le pregunte si estaba bien, pero no dijo nada.

-Ana, ¿ocurrió algo?, sabes que puedes confiar en nosotros.

-Luego platicamos, ¿sí? - sonrió medianamente.

Los demás estudiantes comenzaron a entrar seguidos del profesor.

-Tomen asiento.

Su actitud de la chica es muy extraña, es claro que algo pasó y lo voy averiguar.

A la salida Nico me acompañó con Kyle y después se marchó. No tardamos en llegar a la clínica.

-Relájate Kyle - dijo Liz riéndose de él. Se supone que la nerviosa debía ser yo y el manojo de nervios es mi hermano, dando vueltas por la sala de espera.

-No puedo, muero de nervios. Es la primera vez que vienes desde que te enteraste y te dirán cómo esta - sonreí tiernamente levantándome de lugar.

-Kyle, el bebé está bien - puse mi mano obre su hombro deteniéndolo - Relájate o solo conseguirás estresarme - asintió y mejor tomó asiento.

Una enfermera se acercó indicando que podía pasar - Liz, ¿entras conmigo?

-¿En verdad quieres que entre contigo? - Asentí sonriéndole - ¡SI! - se levantó de un brinco caminando emocionada tras nosotras.

Tocamos antes de entrar al consultorio - Buenas tardes - saludamos al unísono a la doctora.

-Hola Alexandra - saludo alegre - Siéntense por favor - indico haciendo un ademán con la mano - Tiene un rato que no venías a revisión y ahora vienes a consulta porque estas embarazada - dijo sorprendida sin borrar su sonrisa, incomoda le devolví la sonrisa - Ve a cambiarte y recuéstate en la camilla.

Prendió una máquina (ecógrafo)

-Esto será vergonzoso - pensé en mis adentros mientras me recostaba con las piernas abiertas y ella introducía un transductor en mi vagina.

Liz estaba a mi lado mirando hacia el monitor para no incomodarme.

-Puede resultarte incómodo y vergonzoso, pero como el bebé apenas es un embrión, tan solo mide un par de milímetros, por ello es necesario hacer la ecografía por vía transvaginal. Con esta ecografía podremos confirmar el diagnóstico de tu embarazo, la ubicación del embrión, edad gestacional exacta o tipo de embarazo y número de embriones.

El reyDonde viven las historias. Descúbrelo ahora