Capítulo 23: Avión

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Lila y Chloé parecían personalmente ofendidas cuando se enteraron de que Félix y Marinette estaban saliendo, parecían considerar que el muchacho era demasiado para "Una panadera" como lo era Marinette.

Ambos hacían oídos sordos de esas dos chicas, Chloé con sus comentarios hirientes y de mal gusto comenzaba a hartar a toda la clase... por otra parte Lila... ¡Lila era la más insoportable! Al menos para Marinette y Félix que sabían cómo era la chica realmente, para los demás no podía haber nadie más agradable y desinteresado que Lila.

Cada vez que Lila lanzaba uno de sus comentarios con indirectas contra Marinette, Félix sentía ganas de abrirle la garganta con la daga que siempre llevaba... pero se detenía, no dejaría las cosas así, pero no podía permitirse actuar impulsivamente... solo una vez lo había hecho y no había resultado en nada bueno.

Félix pasaba todo el tiempo que le era posible con su novia, quizá no confiara en ella pero... realmente disfrutaba de la compañía de la chica.

Una mañana se sentaron en un extremo del patio de la escuela y aunque hablaban muy poco se sentían muy cómodos.

Félix le acaricio la mejilla a su novia y rozo levemente con la punta de los dedos uno de los aretes que llevaba siempre.

-¿Te gustan mucho estos aretes? – pregunto Félix.

-Me encantan – dijo la chica, Félix sonrió sin intenciones de continuar hablando sobre esas dos joyas, reconocería esos aretes y el anillo donde fuera, el anillo lo había visto de lejos, pero los aretes... había cuidado de ellos por algun tiempo.

-¿Lila no te ha estado molestando?

-Siempre, pero intento ignorarla – dijo Marinette -. Espero que no cause ningún problema serio.

-Si hace algo que te lastime yo mismo me encargare de ella.

-Esperemos que no haga nada.

Félix comenzaba a adaptarse al nuevo mundo que le rodeaba, cada que aparecía algún avance tecnológico sorprendente evitaba hacer preguntas que resultaran extrañas.

La primera vez que vio un avión fue poco después de llegar.

-¿Qué pájaro es ese? – pregunto, por suerte el único que estaba junto a él para escuchar sus comentarios estaños era Luka quien se rió.

-Uno enorme, más grande que mi barco y que está lleno de personas – le comento en broma Luka, Félix arqueo ligeramente una de sus cejas -. ¿Siempre eres tan expresivo? Es un avión, un medio de trasporte que se desplaza por el aire.

-¿Por el aire? ¿Estás seguro? – le pregunto Félix.

-Completamente – dijo Luka -. ¿Tan difícil es comprender la tecnología?

-Si, ponte en mi lugar... una noche me fui a dormir pensando que la maquina a vapor era lo más revolucionario del mundo y al día siguiente me despertó la alarma de mi reloj digital y luego la de mi celular...

-¿Eso fue lo que sucedió?

-No exactamente, estaba despierto pero de un momento al otro estaba despertándome de nuevo en la casa de los Agreste... en realidad no tengo muy claro que pudo haber pasado.

En los estudios le estaba yendo bastante bien; química se parecía mucho a alquimia así que no eran conceptos nuevos... quizá había alguno que otro elemento que no se había descubierto en su tiempo, en física había tenido que estudiar bastante para ponerse al corriente de los nuevos descubrimientos, literatura... era su materia favorita ¿Qué problema podría tener?, en Ingles dominaba el idioma bastante bien, estuvo algún tiempo en Londres y también lo necesito cuando fue a la China, en historia... era la materia que más atención le prestaba, mientras que para sus compañeros eran datos aburridos del pasado, para él eran aquellos eventos que se perdió.

Secretos y omisionesDonde viven las historias. Descúbrelo ahora