La siguiente carta había sido escrita el 24 de octubre de 1840 y era más corta que las que había leído hasta ese momento.
Félix.
Hace pocos días me he despedido de mis benefactores, ¿Volveré a verlos alguna vez más en mi vida? No lo sé, quizá no, no tengo idea ni pistas a donde ir, he decidido comenzar mi investigación en el lugar desde donde se dirigió todo, Londres, quizá logre entrar en el palacio y conseguir hablar unas cuantas cosas con la reina... no estoy seguro de lograrlo.
Mi brazo esta supuestamente curado del todo, pero todavía me causa problemas.
¿Recuerdas cuando viajamos a China? Desde entonces no me había subido a un barco y en este momento escribo esto desde uno, durante toda la travesía del viaje a China te dedicaste a leer ¿En algún momento regresaste la vista al maravilloso mar que se extendía junto a ti?
Esos días me parecen ahora tan lejanos, recuerdo que me dedique a correr por el barco y me permití imaginarme como sería el mundo si pudiera quedarme en ese lugar.
China... hoy he leído una noticia sobre ella, la guerra del opio continua, me he llenado de consternación al leer ese reportaje, condenaba a los chinos por intentar erradicar el contrabando de su país. Creo que le he tomado aprecio a China, o quizá la siento más cercana ya que por proteger el templo oculto deje que Allegra muriera.
Durante nuestra estadía en la Ciudad Perdida tú te sentabas junto Lin y charlaban sobre la cultura, la mitología y las leyendas, yo solo escuche uno que otro de sus relatos... ¿Qué crees que hubiera pasado si ella nos hubiera retenido más tiempo? A ella parecía agradarle y entretenerle mucho sentarse junto a nosotros a charlar, más específicamente junto a ti, que lugar tan calmado era la Ciudad Perdida, con esos jardines y su ambiente tan tradicionalmente chino.
Lin nos contó miles de historias, aunque solo recuerdo haber escuchado menos de la mitad. He pensado en eso y ella menciono tres emperadores; Fuxi, Shennong y el Emperador Amarillo Huang, que se dice vivieron hace más de 5000 años, en clases mencionaron que los miraculous eran quizá tan viejos como eso, me pregunto si algunas leyendas tendrán relación directa con esos miraculous, la leyenda de Sun Wukong tal vez podría ser causada por un miraculous ¿Decía algo sobre eso en el libro del templo? No me acerque a verlo así que lo desconozco por completo.
Estos últimos meses he tenido tanto tiempo para pensar, estar restringido a una cama sin mucho que hacer, te obliga a pensar en un montón de cosas que quizás no querrías.
Adiós Félix.
Cuando estuvieron en China, Félix tomo costumbre de escuchar las historias de Lin, en parte para distraer su mente de la muerte de Bridgette, recordarlo ahora le hacia sentir más culpable, Bridgette le quiso tanto y él en aquel viaje había intentado olvidarse de ella.
Por las tardes cuando el sol se escondía, Félix tenía la costumbre de recostar su cabeza sobre el regazo de Lin y dejar que esta le contara las leyendas de China mientras jugaba con su cabello.
Apartando de su mente esos recuerdos tomo la siguiente carta que tenía la fecha del 13 de agosto de 1849, Félix frunció el ceño al notar la diferencia de años en las fechas, era compresible que Claude no le escribiera con regularidad, después de todo él creía que esas cartas nunca llegarían a manos de Félix, pero quizá por curiosidad decidió levantarse a revisar si había más cartas en los demás cajones, en efecto, había bastantes, en realidad los cajones estaban llenos a rebosar de cartas, sacándolas todas y organizandolas en orden cronológico sobre su cama, Félix se pregunto cuantas páginas tendría un libro si pusiera todas esas cartas en ese formato.
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Secretos y omisiones
FanfictionFélix es su hermano mayor... lo dicen las fotos y todas las personas que lo rodean, pero Adrien es incapaz de recordar nada sobre aquel chico, está seguro que la noche anterior cuando se fue a dormir era hijo único. ¿Por qué no puede recordar a su h...