Secretos y omisiones

Capítulo 10: Investigación sobre Félix

El fin de semana Adrien y Marinette se reunieron en una heladería.

-Adrien ¿No crees que es excesivo? – pregunto la chica haciendo una mueca ¿Adrien siempre había sido así y no se dio cuenta?

-Claro que no, no queremos que Félix descubra que sospechamos, cualquier precaución es poca, hay que asegurarse de pasar desapercibidos.

-¿No te parece que pasamos más desapercibidos vestidos con ropa normal? vamos Adrien quítate ya esas gafas y la gabardina que llamas mucho la atención ¿Además no es de tu padre?

-¿Por qué lo preguntas?

-Porque es demasiado grande para ti.

-Es de Félix, yo no tengo ropa tan misteriosa como él.

-¿Tomaste la gabardina de tu hermano? ¿Y las gafas de donde las sacaste? No me digas que también son de Félix.

-Bueno si... son de él ¡Espera que haces, te reconocerán!

-No sé porque accedí a usar esta ropa – dijo Marinette sacándose la chompa y colocándola en el respaldo de la silla -. Adrien el verano apenas se está terminando, resaltas mucho vestido así.

-¿Puedo al menos quedarme con las gafas? – pregunto el muchacho dando un suspiro.

-Si

-¿Has descubierto algo? – pregunto Adrien luego de sacarse la gabardina de su hermano.

-Muy poco, en realidad casi nada a Félix le gusta el café, parece que es amigo de Luka, es realmente amble y muy caballeroso, cuando fuimos a estudiar a la biblioteca tuvo el detalle de retirar la silla para que me sentara.

-¿Llenaste la bitácora que te di?

-No... es que... llene una parte – dijo la chica extendiéndole el cuaderno.

Fecha: Jueves 13.

Nos reunimos con Félix a las diez para que me ayudara con los deberes, estuve muy nerviosa y no sabía exactamente que pedirle que me explique. Él comenzó a hablarme sobre Homero, Eurípides, Sófocles y sus obras. Luego le pregunte sobre el poeta romano Virgilio que aparecía más adelante en mi libro de texto he incluso me recito una parte de la Eneida en Latín.

Luego se dio cuenta de que no sabía que pedirle que me explique, hiso a un lado los libros y me pregunto directamente porque le había pedido ayuda para estudiar si aún no comenzaba a ver esos temas.

Me puse nerviosa y creo que le dije de algo sobre que a Adrien le preocupaba que pasara tanto tiempo solo y cuando me lo dijo quise ser su amiga.

Por suerte se lo tomo a bien y me dijo que no tenía que inventar escusas para hablar con él.

-¿Eso fue todo lo que observaste? – pregunto Adrien cuando termino de leer.

-Si – dijo la chica.

-¿Nada más? Algún comportamiento extraño.

-Quieres algo raro, que tal ¿Por qué Félix habla latín?

-Si es raro pero pudo haberse memorizado ese tozo sin saber lo que dice, o haber dicho cualquier otra cosa para tomarte el pelo, no puedes asegurar que en serio sea latín ¿O sí?

-No... ya no recuerdo que palabras eran – dijo Marinette -. ¿Y tú que has obtenido?

-Mira – dijo Adrien pasándole su libreta.

Viernes 14.

7.00 am: Desayuno.

7.30 am: Subimos en el coche.

7.35 am: Mira la ventana distraído como de costumbre.

7.46 am: llegamos al colegio.

7.49 am: Vamos a nuestras respectivas aulas.

10.00 am: Félix salió de su curso y Luka se acercó a él, conversaron un rato y luego Luka se marchó con sus amigos, Félix fue a la biblioteca.

10.15 am: Marinette se despidió de nosotros y fue a buscar a Félix.

13.30 pm:Salimos de la escuela

13.46 pm: llegamos a casa.

No he podido ver a Félix porque estuve muy ocupado en una sesión de fotos.

-Tampoco dice mucho – dijo Marinette -. ¿Y si estamos siendo paranoicos? ¿Qué pasa si el problema son nuestros recuerdo y no Félix?

-Creo que es muy pronto para bajar la guardia – dijo Adrien.

Marinette fue más tarde a casa del maestro Fu, se reunían siempre para que el maestro le enseñe sobre los miraculous.

-Buenos días – dijo Marinette -. ¿Cómo se encuentra Maestro?

-Bien Marinette, el que está actuando raro es Wayzz.

-¿Te sucede algo Wayzz? – pregunto la chica acercándose al pequeño Kwami de la tortuga.

-Nada Marinette solo es que vi a una persona que me recodo mucho a alguien... pero es imposible que sea quien creo.

-¿Por qué es imposible?

-Porque es imposible que siga con vida – dijo Wayzz.

-Comencemos ya ¿Te memorizaste los símbolos que te di la última vez?

-Si maestro.

-Bien ¿Puedes leer esto? – dijo el anciano y le tendió un tozo de papel con una frase escrita en una lengua desconocida.

La clase fue con normalidad y al finalizar le dio a Marinette una lista de hierbas de las que debía aprender sus efectos.

-Maestro ¿Cómo era París cuando usted llego? – pregunto la chica.

-Muy hostil – dijo el Maestro recodando lo asustado que estuvo la primera vez que piso París, era la ciudad más grande que había visto hasta el momento -. Estuve perdido y tuve que trabajar de lo se presentara.

-¿No conocía a nadie aquí?

-Personalmente no, pero mi maestro me dijo que buscara a un par de chicos que habían ido a china hace mucho tiempo... antes incluso de que yo naciera, pertenecían a la hermandad que custodia la caja de Sri Yantra, pero cuando llegue a París habían proclamado la república y la monarquía había sido destruida, la hermandad era financiada por los nobles por lo que al llegar la revolución desaparecieron, desconozco si terminaron en la guillotina o solo huyeron pero cuando llegue ya no existía la hermandad.

-Si tenían una caja de prodigios y estaban con la corona ¿Por qué no los usaron? – pregunto Marinette, pues no recordaba que alguna vez le hubieran mencionado que hubo algún superhéroe durante la revolución.

-Lo desconozco, yo jamás he hablado con ellos quizá Tikki y Plagg sepan algo

-No maestro – dijo el Kwami -. Nosotros nunca vimos a ninguno de los guardianes de la hermandad de Sri Yantra, solo conocí a La Coccinelle.