Euforia - Peter Parker [Completa]

Thirty-seven

Las mejillas de Peter se habían teñido de un color rosa pálido. Sus ojos estaban fijos en los de Loren. No podía dejar de mirarla, nervioso por lo que pensaría de él, y ella no podía dejar de mirarlo, admirada por lo bien que se sentía al saber que Peter era Spider-Man.

- No sabes cuánto me alegra que seas tú, Peter.

Peter abrió mucho los ojos y miró para otro lado. Se tapó la cara con las manos y se dio la vuelta para que no le viera.

- ¿D-de verdad...?

- Claro que sí, creía que empezaba a volverme loca –dijo ella-. No te escondas, Pete. Quiero verte.

Peter se giró lentamente y la miró atónito.

- ¿No estás... decepcionada?

- Por supuesto que no, ¿por qué iba a estarlo? –preguntó ella con el ceño fruncido.

Él volvió a esquivar su mirada y comenzó a jugar con un hilo suelto de la sábana de la cama del hospital.

- Bueno... Es que... Yo creía que te decepcionarías si supieses que soy... yo. Spider-Man es genial, puede hacer un montón de cosas geniales y salvar a muchas personas. Pero yo soy... solo yo.

Loren cerró los ojos con fuerza y empezó a negar enérgicamente con la cabeza.

- Peter, no –susurró-. Tú eres Spider-Man –dijo despacio-. ¿Sabes lo alucinante que es eso? ¿Puedes siquiera imaginar lo feliz que soy de saber que eres tú? Nadie podría hacerlo mejor.

- ¿Estás... feliz? ¿Te hace feliz saber que soy Spider-Man?

- Por una vez en mi vida, Peter, me siento completamente feliz. Ven aquí –Loren cogió su mano suavemente y lo acercó hasta ella-. El traje te queda genial. Me encanta verte sin la máscara –dijo emocionada.

Peter se acercó a ella, más asombrado que nunca. La chica de sus sueños le estaba diciendo que sabía que él era Spider-Man y, además, no estaba decepcionada. Al contrario. Le hacía feliz. Él la hacía feliz.

- Loren, yo...

- No quiero decir que cuando tienes la máscara puesta no me gustes. Es decir... esto... Claro que me gustas. Me gustas como Peter y como Spider-Man. Pero v-verte con la máscara siempre me generaba miles de preguntas y... y ahora que sé que eres tú, es... es muy emocionante pensar en todo lo que hemos pasado y en que siempre eras tú, ¿sabes? Eras tú en el callejón, en mi ventana, cuando dormías conmigo, en la base secreta, en las azoteas... -decía emocionada-. Siempre has sido tú –Loren no paraba de hablar. Estaba terriblemente nerviosa por lo que acababa de descubrir y no quería que Peter se sintiera inferior. No quería que pensara que ella se habría decepcionado al saberlo-. Y ahora me alegro tanto de saberlo por fin... -hizo una pausa e intentó coger aire-. No puedo respirar.

Peter se separó al instante y la miró preocupado.

- ¿Quieres que abra la ventana?

- Tranquilo, solo es la emoción. Se me pasará en... un par de horas.

Él soltó una risita y la miró con un brillo en los ojos.

- Eres increíble, ¿lo sabes? –le susurró.

- Dijo Spider-Man –sonrió ella irónica.

- Hablo en serio. Nunca pensé que me aceptarías si llegaras a saber mi secreto. Siento mucho no habértelo contado. Pero... temía por tu seguridad. Prefiero que nadie lo sepa. Cuanta menos gente conozca mi identidad, mejor. Es más... -dijo pensativo-. Eres la única persona que lo sabe.