Fifty-five

180 17 13
                                    

Después de una corta media hora desayunando y poniéndose al día con May, Peter y Loren salieron de casa para coger el tren.

- ¿Sabes? Presiento que hoy va a ser un día maravilloso –dijo Peter muriéndose de ganas por ver la cara de Loren cuando viera a Ariel.

- ¿Y eso por qué?

- Bueno –dijo-. Todos los días son maravillosos si estás a mi lado.

Loren rió y evitó su mirada.

- Qué cursi eres.

- No digas eso –Peter hizo un puchero y se llevó la mano al pecho-. Sabes que he dicho la verdad.

- Es broma, me encanta que digas esas cosas.

- Lo sé –sonrió-. ¿Qué más te gusta de mí?

Loren lo miró a los ojos y pensó que había tantas cosas que le gustaban de él que no sabría por dónde empezar. Él la convertía en alguien mejor. Sacaba lo más positivo de ella y le repetía lo increíble que era, con o sin poderes. Siempre la hacía sentir como la persona más afortunada del mundo, y nunca sabría cómo agradecérselo.

- Mira, ya viene el tren –dijo cambiando de tema.

Peter abrió la boca sorprendido.

- ¿Está esquivando mi pregunta, señorita Fleming?

- Después te diré todo lo que quieras, pero en el tren me da vergüenza.

- Oh... -suspiró él-. Eres tan mona.

Loren se sonrojó y Peter le cogió la mano haciéndole sentir un poquito más segura. Entraron al tren y se apoyaron en la pared, pues no había sitios libres para sentarse. Una mano de Peter agarraba la de Loren con suavidad, la otra rodeaba su cintura para evitar que se cayese con el movimiento del tren.

- Oye –susurró después-. Anoche te dormiste muy rápido. Debías de estar muy cansada. ¿Qué eran todas esas cosas que tenías que contarme?

Stark. Visión. Wanda. El traje. Sus poderes.

Eran demasiadas cosas que tenía que contarle, y ese no era el momento ni el lugar. Y tampoco es que tuviera demasiadas ganas de recordar todo eso.

- No te lo puedo contar ahora, Pete.

- ¿Por qué no?

- Porque aquí hay mucha gente.

- Espera, ¿tiene que ver con... tus... padres? –se atrevió a preguntar.

- No. Bueno, sí. Está todo conectado. Ned tampoco lo puede saber. ¿Crees que podríamos ir a dar un paseo después de clase y buscar un sitio tranquilo para hablar?

- Claro que sí, bonita –dijo él dándole un tierno beso en la frente.

Aunque Peter pensó que era probable que quisiera pasar la tarde con Ariel cuando descubriera que ahora estudiaba en el instituto Midtown. Sonrió al imaginarse la situación.

- ¿Por qué sonríes? –preguntó ella.

Peter agarró su cintura con más fuerza y sintió que el resto de las personas del tren desaparecían. Solo estaban ellos dos en el universo. Ella era lo único que componía su mundo, y no podía estar más feliz por ello.

- Porque me alegro de que estés aquí –dijo.

***

Era bonito volver al instituto. Aunque a muchas otras personas no les gustaba ir a clase, Loren disfrutaba de la vida del estudiante. De alguna manera, le hacía sentir como una persona normal, no como la hija de un extraterrestre asesino que implantó habilidades sobrehumanas en su ADN.

Euforia - Peter Parker [Completa]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora