Capítulo 36

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-¿Eres consciente de que nunca te he prohibido una amistad? -preguntó el chico con amargura.

-Sí, soy consciente de eso -respondió tranquila.

Samuel había ido a su departamento dos días después de la discusión de esa noche y ahora estaban nuevamente arreglando los errores que últimamente estaban siendo constantes en su relación.

-Caro, es él. Él nos tiene en esta situación desde que llegó sólo tenemos problemas.

-Eso es más falso que cualquier cosa, Samuel. Los problemas iniciaron desde antes y fuiste tú quien los empezó además un tiempo estuvimos muy bien y Agustín ya había vuelto.
Así que no culpes a otros de tus fallas.

-Desde que él llegó no eres la misma, ¿no te das cuenta? Ese cantante solo vino para intentar hacerte volver con él. Busca separarnos y tú lo estás dejando, te está cambiando para que terminemos -Carolina puso los ojos en blanco.

-Sí, en parte tienes razón, él me ha hecho ver algunas cosas de diferente manera ahora, pero estoy segura que ninguna persona tiene la habilidad de cambiar a otra. Cada quien tiene un criterio formado ¿no es así amante de la filosofía, ética y moral? Si hay algo que ha hecho él es ayudarme a fortalecer mi carácter. No puedo dejar que cada cosa que escuche me afecte y mucho menos permitir que decisiones de otros sean capaces de destruirme. Tengo un valor y no puedo dejar que las personas me hagan sentir que lo pierdo, por mucho que los ame.

-¿Cuál es el punto de todo esto?

-El punto es que puedo estar enamorada de ti, pero no soportaré tus malas actitudes sin sentido. Espero que lo de la última vez no se repita.

-¿Y ya? Carolina las diferencias van a seguir de todas formas.

-Y es nuestro deber enfrentarlas, Samuel. Como pareja. Juntos.


-¿Coma va todo, hermanito? -. Maxi y Agustín habían llegado al departamento de Jose a distraerse y compartir con sus otros amigos.

-Tranquilo, contento por lo que se viene -contestó el chico feliz, mientras tomaba un poco de mate.

-Maxi me comentó sobre tu futuro proyecto, seguro va a ser un éxito, ya nos invitaron para la presentación a la prensa -le dijo Agustín.

-Eso vi, será increíble tenerlos allí. La verdad este es un proyecto al que sin haber comenzado ya le tomé cariño, es un gran elenco lleno de gente talentosa.

-Si Cris forma parte, el talento es seguro. La productora principal es mexicana, ¿cierto?

-Sí, es muy buena, espero que no sea de estresarse en el set -dijo riendo.

-Contigo siendo parte del elenco lo dudo. ¿Ya te hiciste amigo de tus compañeros? Espero no nos cambies.

-Aún no los conozco a todos, solo a los jóvenes. No te lo he dicho, mi compañera con la que se supone haré pareja es muy guapa.

-¿Quién es? -preguntó riendo por el entusiasmo de su amigo.

-Carolina Kopelioff, ¿la conoces de casualidad?-soltó tranquilo riendo y notando cómo la expresión de Agustín cambiaba a confusión absoluta.

-¿Qué?

-Sí, ella. Tu antigua compañera y también exnovia será mi mano derecha de trabajo. Igual tranquilo eh, no te la voy a quitar -el joven esperó mucho tiempo para ser él mismo quien se lo dijera a Agustín y así reírse de su reacción.

-Tiene novio por si no lo sabías.

-¿Tu rival? Creo que me das más miedo tú que él, hermano -palmeó el hombro de Agustín riéndose todavía-. Lo que no entiendo es que si aún te gusta ¿por qué le terminaste?

-¿Qué te hace pensar que aún me gusta?

-Primero, justo eso, me respondes con otra pregunta y no lo niegas.
Segundo, creo que eres un poco obvio y las letras de las canciones es parte de su historia, bueno eso fue lo que leí en una cuenta de fans por ahí.
Además, Maxi me dijo la vez pasada que estabas con ella y me explicó un poco la situación y ahí fue dónde le dije que no te dijera nada -estalló en risas al decir eso -. Si me dejas darte un consejo, no reprimas lo que sientes, Agus. Tal vez la enamoras de nuevo. No conozco bien su historia pasada, pero creo que sí la quieres mucho

-No creo que volver a intentarlo sea una idea buena, ni siquiera es una opción que esté contemplando -dijo el cordobés un poco desanimado.

-¿Por qué? Tú la quieres, ella tal vez aún te quiere. ¿Por qué estaría mal?

-Ella me amó. Yo la decepcioné y eso ya no lo puedo reparar. Después de un tiempo hasta me decepcioné a mi mismo. Los cobardes no merecen tanta dicha.

Su amigo se quedó callado ante lo que él decía y le dio unas palmadas en el hombro.
Agustín volvió a su estado y le habló a su amigo.
-Bueno, mucha suerte en el proyecto, amigo y te recomiendo que te aprendas bien tus líneas siempre, a Caro le gusta mucho la responsabilidad y puntualidad.

-Gracias por el dato, lo pondré en práctica -contestó riendo.

Desde el alma [Aguslina] Donde viven las historias. Descúbrelo ahora