Más que una atracción. ~HARRY STYLES Y TÚ~

Los dos días mas incómodos de mi vida.

—Te trato así por que odias a la chica que amo, por que siempre estás hablando mal de ella cuando estás frente a mí.

Sentí más su desprecio cuando se alejó de mí y caminó al mar dándome la espalda.

—¿Cómo puedes amar a Caroline, después de como te trata…? —lo seguí con mi mirada, confundida.

—Mira no me vengas con eso, no quiero escucharte.

—No quieres escucharme, ¿Por qué?, ¿Por qué sabes que tengo la razón?

—Tú no tienes la razón de nada, Alison Payne. Y ya déjame en paz. No debí haber hecho caso a los chicos de buscarte —dijo arrepentido.

—¿Los chicos te lo pidieron? —mi voz se escuchó apagada.

—Sí… bueno Louis, él te aprecia mucho y no le gusta que sea así contigo, pero… no lo puedo evitar —se sentó en la arena mirando a un punto inexistente.

Me paré enfrente de él—. Mira, Harry, si no querías hacer esto de venir a buscarme y hablar, no lo hubieras hecho. Yo sé que no te agrado ni un poquito, y no me gusta tener gente hipócrita a mi alrededor —dije tranquila.

Y levantó su mirada y me miró como confundido.

Al notar que él no iba decirme nada, me alejé de allí deseando tal vez que me detuviera y que dijera algo. Pero es Harry Styles. Él nunca se disculparía con alguien y menos conmigo.

Martes por la tarde después de la escuela. Los chicos quedaron en que nos reuniríamos en su casa para seguir con la elaboración de la fiesta de Zayn. Pero yo no quise pues no quería ver a Harry. Él no había ido a la escuela hoy y no entendí por qué ya que Louis no me quiso decir nada.

En fin, quedamos en vernos en mi casa y los chicos llegaron.

—Hola hermosa —dijo Louis y beso mi mejilla, pasó a la casa, atrás venia Niall y también besó mi mejilla, y detrás venia…

—Styles —dije cortantemente.

—Payne —imitó mi voz cortante. Me aparté de la puerta y él pasó.

—Louis, podrías venir un momento por favor.

Lou se acercó a mí—. ¿Qué pasa, cariño? —me sonrió simpáticamente.

—Creo que te di a tender muy bien que no quería ver a Styles, ¿o no? —arquee una ceja.

—Lo siento, pequeña, es que no pude decirle que no… —hizo cara de perrito regañado y me hizo sonreír.

—Bueno, tendré que soportarlo.

Lou rió—. Pareces una zanahoria ¿Sabes? —dijo sonriendo.

—¿Por qué? —reí.

—Por esa ropa anaranjada que traes —dijo mirando mi blusa. Yo solté un par de carcajadas y los chicos voltearon.

Miércoles por la tarde. Después de la escuela. Este si que era un día largo. Caroline y yo tuvimos una discusión que me puso de mal humor en todo el día. Nadie me soportaba ni Emma ni Louis.

Era el ultimo día para preparar la Fiesta de Zayn y todo me salía mal.

—Bueno ya tranquilízate, Alison —me ordenó Liam desesperado por mi actitud.

—Si me dices que me tranquilice sabes bien que no funcionara, Liam Payne —dije subiendo a una escalera de esas que se recargan en la pared. Colgué algunos globos y letras que decían. "Feliz Cumpleaños 19 Zayn". Era estresante ver a los chicos echados en el sofá sin importar que yo estuviera haciendo todo el trabajo. 

Bajé de la escalera pero antes de llegar a los 3 ultimos escalones pisé mal mi tobillo se lastimó provocando que cayera al piso. Me golpeé horrible el trasero.

Los chicos se levantaron rápido. Hasta Harry, el cual me sorprendió.

—¿Estás bien? —dijo Niall ayudándome a levantar.

—Si… sólo el tobillo me duele —me quejé levemente.

Niall y Louis me llevaron al sofá mas grande y me acostaron ahí. Harry estaba del lado de mis pies y lo movió descuidado.

—¡Ahhh! ¡Idiota!, ¿Qué no viste que me lo torcí! —lo pateé con mi pie que no estaba lastimado.

—¡Bueno tranquila!, ahora eres tú la que me insulta —trató de hacerse el ofendido.

—Claro que no, solo que me duele horrible y tu como si nada moviéndolo… como tu no sientes el dolor verdad —lo fulminé con la mirada.

—Ya chicos, no discutan —dijo Lou tranquilizándonos.

—Ya llamé para pedir la comida y llega mañana en la tarde… —dijo Liam entrando con una caja en sus manos, la cual la soltó al verme en el sofá y a los chicos alrededor de mí—. ¿Qué pasó? —dijo mirándome preocupado.

—Nada grave… solo me torcí el tobillo —dijo tranquilamente.

—¿Nada grave dices?, tú siempre dices eso y las cosas que te pasan a ti son graves, Ali —dijo Liam exagerando.

—No exageres hermanito, estoy bien solo duele un poco.

—No, déjame ver —dijo terco.

—Que no es nada grave ya te dije —le repetí mientras lo chicos reían, vi la cara de Styles y apretaba la boca para que no le saliera una carcajada y Liam se molestara.

El comportamiento de Liam era como un padre, pero el exageraba.

—¿Y que es "nada grave" para ti… te peleaste con Caroline en la escuela y dijiste, "no fue grave" —me fulminó con la mirada.

—¿Qué?, ella me provocó y tú me has enseñado a defenderme, además esa hueca paranoica me arruinó el día —crucé los brazos en mi estomago. Recordé lo que me había dicho Harry. Que siempre insultaba y decía cosas desagradables de Caroline enfrente de él.

—Harry… —dije al ver la cara que puso cuando dije eso de Caroline.

Iba a disculparme pero recordé que estos días estaba molesta con Harry después de lo de la cafetería, así que el que tenía que disculparse era él no yo.

—No digas nada —dijo molesto y fue a la cocina.

Llegó la noche y los chicos se habían ido. Liam estaba dormido en el sofá y ni como levantarlo de ahí. No despertaría hasta mañana.

Sonó el timbre de la puerta.

—¿Quién será a estas horas? —me pregunté en voz alta.

Miré a Liam para ver si se había despertado pero no. Tiene el sueño pesado al igual que yo. Reí por lo bajo.

Caminé lentamente a la puerta. Se me hizo largo el recorrido ya que tenía aun dolor en mi tobillo derecho y no podía llegar rápido.

El timbre seguía sonando. Llegué ala puerta y me asomé por el ollito que tiene para ver quien esta del otro lado.

Me sorprendí al ver aquella persona de tras de la puerta…

—Waooh… —dije para mí. Abrí la puerta lentamente y miré su cara. Una sonrisa tímida y hermosa salió de sus labios y me abrazó.