Más que una atracción. ~HARRY STYLES Y TÚ~

Capitulo Cincuenta y tres. - Un secreto oculto.

- ¿¡Cómo que quieres casarte?! – exclamó mi madre dejando caer bruscamente la revista en la mesa.
- Así es mamá – sonrió Liam entrelazando su mano son la de Danielle. Yo no podía dejar de sonreír.
- Pero eres muy joven, hijo – comentó mi padre.
- Lo sé… pero – Liam miró a Danielle. – Ella es el amor de mi vida… no puedo vivir sin ella –
- No estoy de acuerdo con esto – dijo mi madre levantándose de la silla y caminando a la sala. Todos la seguimos, solo Zayn subió a su habitación.
- ¿Por qué no mamá? – preguntó Liam muy confundido.
- ¡Porque no, Liam!, eres muy chico, apenas cumplirás los Diecinueve y… ¿Qué edad tiene esta chica? – preguntó refiriéndose a Danielle mientras mi madre servía wiski en su copa.
- Veintitrés – respondió Liam.
- ¡¿Qué!? – la copa que mi madre tenia en sus manos, cayó al piso. – con más razón me opongo, ¡no dejaré que te cases con alguien mayor que tú! 
- Mamá… -
- Hijo, tu madre tiene razón. Además tú tienes muchas cosas que vivir más adelante… ¿Para que atarte al matrimonio a esta edad? – decía mi padre más tranquilo.
- Por eso mismo, todas esas cosas que tengo por vivir, las quiero vivir junto a Danielle – dijo besando la cabeza de la chica.
- ¡No!, y no me harán cambiar de opinión –
- Pero… -
- ¡Mamá! – interrumpí a Liam. - ¿Por qué no quieres que ellos se casen?, en fin, mi hermano ya es mayor de edad… no tiene que pedirte permiso para casarse, y… ¿Qué acaso no te agrada Danielle?, tienes que permitirte conocerla, ella es una gran chica, y no tienes idea de lo feliz que hace a Liam – dije molesta por la actitud de mi madre.
- ¡Tú no te metas!, y mejor vete a tu habitación. No es de tu incumbencia este tema. –
- ¡Claro que lo es!, Liam es mi hermano y Danielle es una gran chica y mi amiga. –
- Hija, obedece a tu madre, sube a tu habitación, nosotros hablaremos con Liam – pidió mi padre.
- No me iré de aquí hasta que se arregle esto –
- Creo que es mejor que lo hablemos otro día, y con más calma, es tarde y mañana tienen que estudiar – dijo mi padre. Al parecer era el único calmado en la sala. Danielle permanecía callada y con la mirada perdida.
- Su padre tiene razón, hablamos luego – dijo mi madre caminando hacia la escalera y subió desapareciendo por los pasillos.
Suspiré frustrada. Mi padre también subió pero antes se disculpó con Danielle por la actitud que tuvo mi madre.
- No puedo creerlo. Mi madre si que no entiende… - me dejé caer en el sofá.
- Le dije a Liam que aun no dijera nada… primero me tenían que conocer –
- Lo sé… lo siento, amor – le dijo mi hermano y besó la cabeza de Danielle abrazándola por los hombros.
- Y por qué no me dijeron nada a mí, ¿eh? – los miré con los ojos entrecerrados.
- Lo siento… - susurró Liam con una sonrisa tímida.
- Bueno, será mejor que me lleves a casa – pidió Danielle a Liam.
- Yo los dejo, buenas noches. – besé la mejilla de Danielle, despidiéndome de ella y despeiné el cabello de Liam con mi mano.
Subí las escaleras y me topé en el pasillo con Zayn. Nos quedamos mirando unos segundos y yo seguí mi camino a mi habitación. Entré y cerré la puerta con seguro.

La luz del sol caló un poco en mi rostro y luego sonó el despertador. Quité la sábana que estaba sobre mi cuerpo y me dirigí al baño para ducharme.
Cuando ya vestía con el uniforme de la escuela me maquillé un poco y dejé caer el cabello sobre mis hombros. Tomé una bufanda, ya que estaba haciendo un poco de frio y me molestaba en el pecho. Mi celular sonó en mi cama con un tono de mensaje. 

“Buenos días pequeña, espero que ya estés lista, en 10 minutos paso por ti. Te quiero x” – sonreí.

“Ya estoy lista, solo estoy esperándote. –Teclee – También te quiero, tonto. Xx” – envié.

Bajé las escaleras después de tomar mi libro, no había estudiado en todo el día de ayer. Diablos. ¿Cómo le haré para aprobar el examen?
Salí de la casa, al parecer Liam ya se había ido, y Zayn tal vez estaba en su habitación. No lo sé en verdad y no quería pensar en él ahora. Me senté en una de las bancas que estaban en el jardín, para esperar a Harry y mientras el llegara me dediqué a darle una leída rápida a las paginas del libro, para el examen.
Después de aproximadamente diez minutos, él ya estaba enfrente de mi casa, dentro de su auto. Me sonrió y caminé hasta él. Subí a su auto y besé su mejilla.
- Hola – saludé.
- ¿Cómo amaneciste? – pregunté sonriéndome.
- Bien, pero… algo nerviosa. No estudié para el examen de hoy. Lo olvidé – confesé.
- ¡Ja! ¿Enserio? – me miró y comenzó a conducir su auto.
- Si… no puedo creer que lo haya olvidado. – dije clavando mi mirada en el libro. Miles de letras que formaban palabras… que tormento.
Harry solo rio por lo bajo y me dejó seguir estudiando sin decir nada en todo el camino.
Llegamos al colegio y nos fuimos directo al salón de clases, pues ya era un poco tarde y el examen sería a la primera hora. Cuando por fin logré concentrarme en el examen, faltaban veinte minutos para que la hora terminara y yo solo tenía contestadas tres preguntas de diez.
Sentí que algo ligero golpeaba mi brazo. Voltee y era un pedacito de papel echo volita. Lo junté y pude darme cuenta que era de Harry.
Desdoblé el papelito y pude ver que eran la mayoría de las respuestas del examen. Miré a Harry disimuladamente, para que la maestra no se diera cuenta. Y le dije “Gracias” moviendo los labios. Él solo sonrió y me guiñó un ojo.