Continuación.

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- Aly… - 

Alcé la cabeza y eran Louis y Harry. 

- No quiero hablar con ninguno de los dos ahora – dije mirando asía otro lado.

- Eso no me importa, es tarde y tienes que regresar a casa – dijo Louis fríamente. Ok, no le importaba que yo estuviera molesta con él.

- Gracias por tomarme importancia, Tomlinson – dije irónicamente levantándome y sacudí mi short ya que estaba lleno de arena.

- Tú tienes la culpa por meterte en cosas que no te importa – dijo caminando dándome la espalda.

- Claro que me importan por que Emma es mi amiga – lo seguí

- No la menciones… se suponía que quedaría entre ella y yo – subió las escaleras para llegar al estacionamiento.

- Era obvio que ella tenía que desahogarse, no lo iba estar ocultando siempre, Louis – me detuve ya que el hizo lo mismo, Harry llegó a mi lado.

- Mira no quiero hablar de eso – suspiró frustrado. – no te metas en mi vida, que seamos amigos no te da permiso a que me digas lo que debo de hacer –

- Lo sé, los amigos se dan consejos, pero al parecer a ti ni eso te importa ahora – caminé en busca de un taxi y Harry corrió de tras de mi, alcanzándome, mientras Louis se iba en su auto junto con su rubia que lo esperaba dentro.

- ¡Aly, Espera! – se detuvo agitando cuando llegó a mi lado

- ¿Que quieres?, es tarde y tengo que llegar a casa ya que Liam me dejó aquí – dije molesta y temblando de frio, ya que solo traía la parte de arriba del bikini y el short.

- Yo te llevaré a tu casa – dijo sin preguntar

- ¿Qué?, no gracias, prefiero irme en un taxi – dije alzando para que un taxi que iba pasando se parara pero para mi mala suerte iba ocupado.

- No encontraras un taxi libre, es tarde… vamos te llevo – dijo apartándose para que me adelantara.

Lo miré dudando, y ya que no me quedaba de otra acepté que me llevara a casa. Comencé a caminar delante de el mientras el apuraba su paso para caminar a mi lado. Llegamos a donde su auto estaba estacionado y abrió la puerta del copiloto para que yo subiera. Subí y el cerro la puerta, rodeo el auto para subir del lado del volante, me sonrió y encendió el auto. Él seguía siendo caballeroso con migo y eso me agradaba.

En el camino los dos estábamos en presencia de un silencio incomodo… después de todo ahora no sabia de que tema hablar con él. Tenía tantas ganas de conversar con él así como lo hacíamos antes, con bromas estúpidas y peleas que solo duraban tres minutos para volver con nuestro humor normal.

Pero me sentía rara. Extrañaba estar a su lado de esa forma.

Subí los pies al asiento ya que estaba descalza y abracé mis piernas con mis brazos, sentía que me congelaba gracias al aire acondicionado del auto de Styles. El auto se detuvo gracias a la luz roja del semáforo. De reojo me di cuenta que Styles giró su cabeza para mirarme fijamente.

- ¿Tienes frio? – preguntó tiernamente.

- ¿Acaso lo notaste por que me estoy congelando? – pregunté ironica.

Él frunció el ceño y apretó la boca.

- Si fueras más amable le bajaría al aire – dijo él y volvió a conducir cuando la luz del semáforo cambió a verde.

- ¿Y si no lo soy permitirás que me congele por tu culpa? – arquee una ceja, él me miró y rio traviesamente.

- No soy tan malo, Aly – me guiñó el ojo.

Más que una atracción. ~HARRY STYLES Y TÚ~Donde viven las historias. Descúbrelo ahora