Bebé Grey: Parte I

Capitulo 17. Una Casualidad

CAPITULO 17

-Ana, buenos días.- me saluda Hannah con entusiasmo al verme llegar.

-Hola Hannah, ¿Qué pendientes hay para hoy?- quiero involucrarme de inmediato en el trabajo y olvidar lo que paso hace unos momentos ahí abajo.

-Bueno, tu libreta con asuntos urgentes ya se encuentra en tu escritorio, los marcados con rojo, como ya sabes. – me responde Hannah eficientemente.

-Claro, gracias.- le digo y me meto en mi oficina.

Reviso toda la libreta, viendo los pendientes marcados con rojo, pero me es imposible concentrarme, no puedo borrar de mi cabeza la imagen de Christian y Melany, pareciera como si ya se hubieran conocido, pero Christian no la recuerda. Pero, ¿y Melany?, tal vez deba preguntárselo.

A mi mente vienen miles de cosas, como esa mirada, parecida a la de Leila, quien amaba a Christian y como sumisa haría cualquier cosa por él, y la forma en que ella le contesto, diciendo que era su culpa cuando en verdad no lo fue.

¿Y si Melany es una de sus ex sumisas? Me quedo conmocionada ante mis pensamientos. ¿Por qué demonios pienso eso? Eso sería imposible, quiero decir Christian nunca dejaría que una de sus ex sumisas trabajara conmigo, que digo ni que estuviera a 1 metro de mí, eso es simplemente imposible.

Christian tendría que recordarla, no creo que olvidara su nombre o el cómo luce, aun mas porque ella es una chica guapa, además no se ve como las chicas que el solía elegir, ella es totalmente lo opuesto.

Esto es absurdo, debo de dejar de pensar en estupideces, estoy creando toda una historia por un hecho casual, fue un accidente, solo fue una casualidad, nada más.

Me levanto de mi escritorio, necesito un poco de aire fresco, así que decido salir, pero antes tengo que llamar a don protector y avisarle.

Saco la blackberry de mi bolso y marco su número.

-Nena, ¿Qué pasa? ¿Todo está bien? ¿Tú y el bebé? – me abruma con tantas preguntas. Al menos ya se le paso el enojo, ahora suena preocupado.

-Estamos bien Christian, tranquilo.- escucho que suelta el aire que estaba conteniendo y se relaja.

-Solo te llamaba para saber, si puedo salir a tomar un poco de aire, hay un café a unos  cuantos metros de aquí y me gustaría poder ir, por supuesto que no iré sola, Sawyer estará conmigo.

-Ana, sabes que no puedes salir de GP, entiéndelo.

-Pero Christian, necesito salir un poco, son solo unos metros.

-No, Ana, no saldrás.

-Por favor, blip quiere café – espero y utilizar a blip ayude en algo.

-Pídele a Sawyer que te lo traiga, no es necesario que salgas.

-¿Por favor? – le suplico al teléfono –Y te amaremos aun mas.

Escucho que suelta un gran suspiro al teléfono.

-Está bien señora Grey, al menos deja que le dé instrucciones a Sawyer.

-Si, muchas gracias señor Grey, blip te manda un beso.

-Ana, Ana, Ana, ¿Qué voy a hacer contigo?

-Ya sabes que puedes hacer conmigo lo que quieras, soy toda tuya. – puedo sentir que tiene una enorme sonrisa en sus labios.

-No me tiente señora Grey. Anda ve por tú café, solo veinte minutos, ni uno más.

-Muy bien- le respondo con una sonrisa aunque no pueda verme.