"No yo no soy
el pa... si, si soy"Aiden.
Morgan se desmayó, logré sostenerla sin hacer ruido y a cómo pude la saque el salón.
Para mi suerte los niños seguían dormidos.
Justo iba pasando Grenda cuando salí con Morgan en mis manos.
—¡Santo cielo! ¿Qué le pasó?
—Se desmayo. No sé qué sucedió.
—Pronto, llévala a un hospital.—Ordenó.
—P-Pero los niños...— Grenda me miró ceñuda.
—¡Yo te cubro! Ahora llévala...
Ni siquiera quise discutir con ella. Sería perder el tiempo tratando de hablar con la pared. Corrí al estacionamiento tratando de no caer al suelo junto con Morgan.
Visualice mi auto y de inmediato desactive la alarma. En mi primer intento de meter a Morgan en el asiento, falle. Fui tan torpe que solo logré golpear la puerta con el hombro de Morgan.
—Lo siento.— Masculle aún sabiendo que nadie me oía.
Una vez dentro el coche, conduje lo más rápido posible. Trate de esquivar el tránsito y para mi suerte lo logré.
Baje del coche con Morgan en mis manos, esta vez tuve más cuidado al entrar al lugar.
Unos enfermeros me miraron y corriendo a ayudarme, dejé a Morgan en una camilla y se la llevaron lejos de mi vista.
—Tranquilo su novia está en buenas manos.— Hablo el enfermero antes de correr donde los demás.
—Ella no es mi... olvidado.— dije más para mi que para el. Me mantuve en la sala de espera mirando hacia todos lados. Nadie me había dicho nada y no tenía ni idea de qué hacer.
Los minutos se convirtieron en una hora, aún no tenía información de Morgan. Solo había logrado hablar con Grenda, cuando la guardería cierre vendrá de inmediato.
Mientras tanto estaré aquí... solo. Claramente no pensaba marcharme pero eso no quitaba la sensación de incomodidad.
Hace apenas unas horas que la conozco... suspire inflando mis mejillas y mirando hacia arriba, luego a la derecha, a la izquierda, mire mis pies, mire mis manos y deje escapar el aire de mi boca.
Aún que sonara cruel... Estaba aburrido.
Comencé a jugar Candy Crush en mi celular mientras esperaba. Tenía la impresión de que sería para largo.
—¿Familiares de la señorita Evans?
Me puse de pie como resorte y di con un señor de edad madura quien vestía una bata blanca, este acomodó sus gafas y me miró de arriba hacia abajo.
—Imagino que usted es el padre.
—¿El padre de Morgan? ¿De que edad me veo?— Dije divertido, aún qué tal parece que a él no le agrado.
—Me refiero al bebé Señor...
—Aiden James.— El médico me mira algo molesto.
No, señor. No es broma, ese es mi nombre... Esperen ¿acaso dijo bebé?
—Hablo del bebé de su novia. ¿Usted es el padre no?
Ni siquiera la conozco bien...
—No yo no soy el pa...— ¿Morgan está embarazada?—Si, si soy.
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Quiero ser el padre.
Romance¿Alguna ves has pensado en la posibilidad de quedar embarazada de un desconocido? ¿En las consecuencias que esto conlleva? Morgan Evans cometió ese error. No lo pensó. Quedó embarazada de un desconocido, sin apoyo de parte del "donador de esperma"...