Quiero ser el padre.

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Nota de la sensual autora:
Espero hacer este capítulo súper triste... Acá no:v
Al menos un poco triste:v
Eso era todo sigan con lo suyo 💛
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"Corre chico
corre"

Aiden

El día cada vez se ve más triste. Morgan no ha respondido ninguna de mis llamadas y cuando lo hizo fue Lauren quien hablo.

—Creo que ya sabes que hiciste. Eres mi amigo pero eres un idiota y lamentó ser yo quien te diga que Morgan no quiere hablar contigo por lo menos hasta el lunes.— Y me colgó.

Al hablar con Blake, el simplemente me digo que no había llegado y que estaría hasta tarde con Lauren.

Camino por las calles con los pies arrastrando. Veo a las personas pasear por las calles con tranquilidad.

El cielo cada ves se obscurece más y es más evidente que lloverá en cualquier momento.

Me detengo junto a la parada del autobús y entro a Facebook para matar el tiempo.

Mi dedo índice sube y baja las muchas publicaciones, veo de reojo a una señora mayor junto a mi quien también me mira.

Sigo con la vista en mi celular y me detengo al ver una foto de Lauren con Morgan.

Estaban en su casa. Por dentro la emoción y el nerviosismo me estaban matando lentamente.

Yo era un "E S T Ú P I D O"  en toda la extensión de la palabra.

Pase tantas cosas en un solo día para lograr pedirle a Morgan una cita... todo para terminar olvidándolo.

Los autobuses no pasan y los nervios me carcomen por la espera. En cuanto vea al primero me subiré y me iré directo a la casa de Lauren.

La batería de mi celular marca 5% esta próximo a apagarse y yo solo espero que Morgan no llame o no podré contestar.

Morgan.

34 llamadas perdidas.

La insistencia de Aiden me hace sentir mal. Es decir si lo que hizo hubiera sido adrede no estaría insistiendo tanto.

Lauren me entrega una taza de té para que charlemos y me tranquilice.

—Gracias.— Posó mis labios sobre la delgada y caliente taza, doy un sorbo y la dejo sobre la la mesa.

—Hay que charlar ¿te parece?— Asiento.— ¿Como te sientes?— Pregunta con cautela.

—Yo... creo que... me emocione con la idea de tener una cita.— Hable en voz baja, de nuevo le di un sorbo al té.

—Lo lamentó mucho linda.— Lauren tomó mi mano y con su pulgar la acarició.— No estoy defendiendo a Aiden pero es mi amigo y lo conozco, cuando está nervioso olvida las cosas, suele ser muy despistado.