Narra Kendall:
Deje a ____ en su departamento y me dirigí a casa, estoy seguro que mamá estaría algo preocupada porque la noche anterior no dormí en casa.
-¡LLEGUE!- Grite al entrar y dejar las llaves de la casa en una mesa.
-¿Dónde estabas? Estuve toda la noche muy preocupada.- Dijo acercándose a abrazarme como si no me viera hace años.
-Tranquila, estuve en el departamento de ____.- Dije intentando tranquilizarla, aunque después de unos segundos me arrepentí ya que sabía que cosas pasaban por su cabeza.
-¿Y qué hicieron? Digo, si se puede saber.- Dijo sonriendo, ella es la madre que se preocupa por su hijo, pero le gusta saber que hago y con quien, y al final lo acepta porque según ella como soy un chico es normal.
-Hablamos, vimos televisión y luego dormimos.- Dijo sincero.
-¿Solo eso?- Dijo en toco “pícaro”.
-Solo eso.- Dije riéndome.
-¿Ya retiraste tu certificado?- Dijo cambiando de tema.
-Sí, aquí esta.- Dije enseñándoselo para luego abrazarnos en señal de festejo, haber terminado el instituto era un gran logro, ahora debía saber que estudiaría y a que universidad asistiría, pero eso lo decidiría cuando este en Nueva York junto a ____.- Tenemos que hablar.- Dije luego algo serio.
-¿Qué sucede?- Dijo en tono preocupado.
-Me mudare de la casa.- Dijo soltándolo de golpe.
-¿Qué?
-Quiero salir de la misma rutina de siempre, quiero ir a vivir a Nueva York y estudiar en una universidad de allá.- Dije explicándole.
-¿Cuándo te irás?- Dijo aguantando soltar algunas lágrimas.
-Mañana.- Dije para luego suspirar, me quería ir de casa y vivir con ____ en Nueva York, pero no quería dejar a mamá.- ¿No dirás nada?- Pregunte preocupado por no saber si lloraría, me ayudaría… O simplemente se desmayaría.
-¿Qué quieres que te diga? Soy tu madre y debo apoyarte en tus decisiones, quiero que seas feliz y si tú eres feliz viviendo en Nueva York te ayudare.- Dijo dejando salir unas cuantas lágrimas que intentaba no dejar salir.
-Gracias.- Dije abrazándola.- Gracias por todo.
-Bueno, solo nos queda comenzar a empacar.- Dijo llorando más.
Subimos las escaleras y buscamos algo de ropa, empacamos casi todo lo que había en el armario. También guardamos algunas fotos, posters de bandas que me gustan, guarde unos cuadernos que quizás me harían falta en el futuro.
Terminamos exhaustos y tirados en mi cama.
-Te prometo que todo estará bien, yo y ____ podemos arreglárnosla solos.- Dije.
-Y yo te prometo que los iré a visitar siempre que pueda.- Dijo sonriendo, esa sonrisa de mi madre que tanto amo.
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