Capitulo 28
"Una verdadera amenaza"
—¿Qué quiere que haga, señora Morgan? —Ofrece Gabriel dispuesto a cumplir las ordenes mientras se infiltra en esa mansión.
Se hallaban mas Omegas de lo normal en esa casa, todos participaban en los quehaceres del hogar para mantenerlo limpio.
Gabriel tenia una barba falsa sobre su rostro para tapar un poco sus rasgos ya que él había sido acompañante de Ethan cuando fue invitado en la fiesta de los Allem, y para evitar alguna sospecha decidió vestirse cómo tal y por supuesto, colocarse sus lentillas de contacto.
—¡Necesito que lleve esto al rehén! —Ordena mientras le entrega una bandeja con alimentos, una migaja de pan con un pedazo de pollo con una salsa. —¡Ten la llave y retira a mi hijo!
—¡Cómo ordene! —Este acepta la bandeja con la comida y se va en dirección a una puerta que se ocultaba cerca de la cocina, pero estaba tapada con una tela, para que no sea vista.
Al abrir la puerta, nota una escalera que va hacia abajo, así que con cuidado, baja lentamente pisando cada escalón. La oscuridad y el polvo emanaban cada vez en cantidad, hasta que llegó a su destino.
Se encontró con una prisión, tan similar a la cárcel y le aborreció encontrar un lugar así en una mansión que dice ser tan decente. Continuó su camino hasta acercarse mas con la esperanza de ver a Leannie a través de esos barrotes oxidados y adornados con telas de araña pero su sorpresa, fue distinta.
A través de la oscuridad alumbrada por una sola bombilla de luz casi apagada, vio un Omega malherido con asombro. Este traía un ropaje descuidado y demacrado, él misterioso aparentaba ser un hombre maduro con barba blanca, sus ojos celestes lo delataban.
—¿Qué... hace aquí? —Pregunta Gabriel a aquel Omega.
—¿Acaso no es obvio? —Responde tristemente aquel hombre. —¡Es mi castigo!
—¿Por qué? ¿Cómo te llamas?
—Mi nombre es Osvaldo. Debo estar aquí hace mucho tiempo... tal vez, no lo recuerdo. Hace días que mis ojos no ven la luz del sol. —Se acerca hasta Gabriel. —Los Morgan me otorgaron estar aquí.
—Está bien, Osvaldo. Un gusto, mi nombre es Gabriel. —Le ofrece la comida que traía para este rehén. Asintió ante la respuesta de aquel hombre.
—¡Eres muy extraño para ser un Omega! —Pronunció dudoso mientras mira la comida deseoso. —¿Por qué estas aquí, Betha?
—¿Cómo sabe...?
—No eres un Omega, es muy evidente, eres muy educado. —Comiendo un bocado de pan untado con aquella salsa. —Lamentablemente si te enviaron aquí dudo que veas a aquella muchachita.
—¿Sabes dónde esta Leannie?
—Ella está en otra parte de la casa, no sé dónde. Espero que la encuentres cuanto antes, sus sollozos los puedo escuchar, no debe estar lejos.
—Gracias, yo ya debo irme. —Anuncia Gabriel mientras le dedica una minúscula sonrisa. Aquel extraño le simpatizaba y así mismo le daba lástima.

ESTÁS LEYENDO
El Alpha de las tinieblas©
LobisomemESTA HISTORIA ESTÁ EN PROCESO DE EDICIÓN (CONTIENE FALTAS DE ORTOGRAFÍA Y COSAS INCOHERENTES A MI PARECER). Leannie, es una Omega que trabaja como servidumbre para la familia Allem; una familia que dispone de muchos bienes y tierras. Su poco tiemp...