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Capitulo 39

"Una muerte digna. Siempre en nuestra memoria II"


Tres Bethas rodearon a Gabriel como si en ese mismo momento, fueran a terminar definitivamente con su vida. Pues eso tenían planeado, aunque no fuera en publico. 

Tenían en claro quién era aquel rubio Betha. Uno de estos Bethas se quitó un arma de su chaqueta que contenía balas de plata, lo que para un hombre lobo no lo mataba pero si lo dejaba con el dolor físico mas grande que podía sentir. A menos si se trataba de balas.

—¡Acaba con él! —Reclamó uno de los Bethas a su compañero. 

La oscuridad ocupaba gran parte de esa zona, pero nada que ellos no pudieran ver. Gabriel intentaba moverse o poder defenderse pero en ese estado le era imposible. Había recibido mucho daño de parte de los hermanos Vurugahma.

El Betha que tenia su arma, le quita el seguro y en ese segundo que solamente debía apretar el gatillo se detuvo al oír un rugido proveniente de los arbustos. 

Emilia, en forma de lobo, se hizo presente amenazándolos y antes de que este pudiera apretar el gatillo para dispararle, saltó sobre el mismo y luego, contra los demás

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Emilia, en forma de lobo, se hizo presente amenazándolos y antes de que este pudiera apretar el gatillo para dispararle, saltó sobre el mismo y luego, contra los demás. A pesar de ser hombres fuertes, no podían contra la fuerza de un lobo transformado, aunque eso no quita que Emilia ha recibido golpes.

Mientras tanto, Ethan había podido lograr entrar por una puerta trasera que conducía a un largo y oscuro pasillo. Gracias al escándalo que se produjo en el instante que uno de los hermanos Vurugahma fue herido por el fuego, todos los guardias corrieron allí y esa fue la oportunidad de Emilia para escapar y de Ethan.

Le sorprendió no encontrar la puerta trabada pero se suponía que debía haber guardias en esa zona. Sin importarle y con sigilo, entro siendo cauteloso con pasos lentos. El pasillo conducía a una única puerta y si el mapa descrito por Victoria estaba en lo correcto, Leannie debía estar detrás de esa puerta.

Al fin llegó. Pero sabia que no estaría sola. 

—Esto se me va a hacer una costumbre. —Comienza a quitarse una vez mas la ropa, tirándola al suelo. Arrodillado en el suelo, comienza a agarrarse con sus manos su cabello, enredando sus dedos en este. Sus ojos al estar cerrados, se abren dejando ver unos celestinos que podrían brillar en la oscuridad.

Leannie estaba escondiendo su rostro entre sus rodillas mientras se encontraba en cuclillas. Estaba siendo vigilada por dos Bethas. Las vibraciones de que la puerta estaba siendo arañada o incluso empujada rápidamente no pasaron desapercibidas.

—¿Qué es eso? —Preguntó uno de los Bethas a su compañero.

Ni siquiera hubo una respuesta cuando la puerta fue derribada por un gran lobo de pelaje negro. Era enorme. Muy enorme a como seria el tamaño promedio normal de cualquier lobo. 

El Alpha de las tinieblas©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora