El Alpha de las tinieblas©

42

Capitulo 42

"Bienvenida, Samantha"

—¿Enserio quieres que te baje? —Susurró Ethan en el oído de Leannie haciendo que su piel se erizara como cada uno de sus vellos. 

—Tus hábitos de ser un completo pervertido veo que no han cambiado. —Respondió Leannie intentando zafarse del agarre de Ethan.

—¿Quieres caminar un rato? —Mientras la soltaba y daba unos pasos caminando hacia delante, dándole la espalda a la pelinegra.

Narra Leannie

¿Por qué mi corazón late tan rápido? Siento cómo mis piernas me tiemblan al ritmo de las aceleradas palpitaciones que da mi corazón. Y no significa que me vaya a caer como se dice en esos libros de novela juvenil, no. Pero si puedo asegurar que me tiemblan y... me pone nerviosa.

—¿Vienes? —Pronunció el robusto captando su atención, ya estaba cinco pasos más adelantado que ella.

¡Vamos Leannie, cálmate!

—S..Si. —Respondió al instante que se adelanto acortando la distancia entre ambos. —Perdón, estaba un.. un poco pensativa.

—¿En qué pensabas? 

—En todo lo que sucedió, supongo.

Juntos, caminaron por las orillas del lugar en silencio. Ethan era un hombre de pocas palabras y siempre acotaba lo que debía sin hablar de más. No quería que ella recordara los hechos en la mansión de Morgan.

Al fin... un momento tan tranquilo después de aquella tormenta que he vivido. Extrañaba tanto caminar con Ethan, solamente nosotros. 

Ojala este momento fuera eterno, y sea lo que sienta por Ethan creo que no se lo confesare hasta no tener más en claro mis sentimientos. Sí, sí me atrae y me gusta, creo que estaba enamorándome pero... ¿y él? 

Capaz él solo me ve como una pequeña hermana. Ademas, si solamente somos nosotros dos... 

¿Qué pasará de malo? 

—Extrañaba caminar contigo. —Murmuró Leannie mientras miraba la distancia, la lejanía. 

—¿Entonces si me extrañaste? —Preguntó este mirándola por lo bajo con su típica sonrisa picarona. 

—¿Qué..? —Miró sorprendida a Ethan y luego se sorprendió de sus propias palabras dichas anteriormente. —Bueno, si.. te extrañe a ti como extrañe a Emi, a Gabriel y a todos. 

Ethan se detiene y se posiciona delante de ella tomándola de las manos. —¿Enserio me has extrañado? —Preguntó nuevamente.

—S..Si. —Respondió con una tonalidad nerviosa. 

—¿Estás segura? —En ese instante, este la levanto y la estampó contra la arena subiéndose encima de ella y despeinándola por completo, como le gustaba hacerlo. 

—¡Ethan detente! —Intentaba cubrirse el rostro y su exagerada risa ya que quitarlo a él de encima, era imposible. —¡Ethan, por favor basta! 

Jugaron bastante hasta que Ethan estaba cerca del rostro de Leannie, y por un momento, los recuerdos de aquella vez que habían vivido una situación similar en el bosque cuando Gabriel los interrumpió, vinieron a la memoria de la pelinegra haciendo que su cara se tornara roja de la vergüenza. 

A su vez, también recordó cuando estaban sobre aquel sillón, pero ese momento se vio interrumpido por Emilia.

Puedo sentir la respiración de Ethan, siento como nuestras respiraciones se juntan. ¿Por qué en estos momentos nunca puedo verlo a los ojos?