Narra Jaesoo:
—¿Tienen hambre? ¿Quieren comer algo?— La animada voz de Taehyung resonaba por toda la casa.
No era un lugar muy grande, pero sí tenía bastante separaciones, como el recibidor que da a la escalera que supongo que sube a las habitaciones, la sala de estar, la cocina, y otro lugar en el fondo antes de dar con la puerta del patio, que era como un sitio dónde sentarse a ver el atardecer, puesto que estaba sólo cubierto por vidrio o cristal.
Ni idea de porqué entre tanta cosa que pensar me puse a detallar la casa, las fotos en los portarretratos que estaban sobre los muebles de la sala, el color de las paredes, los bonitos sofás, la gran pantalla plana y las diferentes consolas de videojuegos que estaban conectadas a ella, hasta me puse a ojear los estuches de los juegos que estaba regados por el piso.
Yoongi por su parte, seguía mirando las fotos que estaban en el mueble al lado del televisor.
—Conozco a ésta señora.— Me dijo, señalando a alguien en el portaretrato.
Yo me puse a su lado para poner más atención a lo que señalaba.
—Era la señora que...— No terminó de decir nada, porque fue interrumpido por Tae.
—Que limpiaba en su casa y cuidaba de ustedes, sí.— Sonrió. Y se acercó a nosotros con unos emparedados en sus manos.— No me dijeron si tenían hambre, pero igual los voy a alimentar.— Nos tendió los panes rellenos.
Los tomamos, y dijimos gracias al unísono.
—Sientense, no tengan pena.— Se tiró en el sofá grande, y dio palmadas al cojín a su lado, haciendo seña para que lo siguiéramos.— Jaesoo, ¿dirías que eres una persona olvidadiza?— Me preguntó, mientras me veía atragantarme lo que me había dado.
—¿Por qué lo preguntas?— Dije luego de tragar.
—Es que... bueno, estábamos pequeños, pero, ¿por qué yo sí te recordaba cuándo nos encontramos en el colegio y tú parecías haberme olvidado? Incluso puedo decir, que ni siquiera me recuerdas antes de conocerme como el amigo de Jimin en éste momento.— Recostó su cabeza de su mano, habiendo puesto el codo sobre el respaldo del sofá.
—¿Nos conocíamos antes de eso?— Mi confusión fue evidente en mi tono.
—¡Sí!— Respondió él un poco ofendido.— ¿Cómo has podido olvidar éste hermoso rostro?— Cerró los ojos y negó fingiendo llorar. Reí, por lo exagerado de su gesto.— Yo soy el hijo de esa señora de la foto, estaba siempre en su casa, incluso jugábamos juntos a veces, y con Jungkook. ¿No lo recuerdas tú Yoongi?
—Sí, lo recuerdo, eras bastante fastidioso.— Yoongi arrugó su expresión con diversión y Taehyung rió.— Rompiste varios de mis juguetes también. Y tu papá trabajaba en el jardín. Supe que murió, lo siento mucho.
—Gracias.— La expresión de Taehyung se ensombreció inmediatamente.— Fue hace mucho.
—Lo sé.— Dijo mi hermano.— Era un hombre genial, me agradaba más que mi propio padre. Hubiese ido al funeral, pero no supe dónde era. Incluso pensé que ustedes se habían ido de la ciudad, si no hubiese visto la foto de tu madre, no te hubiese reconocido la verdad.
—Nos fuimos un tiempo, mi madre y yo. Pero hace unos dos años que volvimos... en fin.— Tae dio un sonoro suspiro.— Jungkook no me ha contado y soy muy curioso, ¿qué los trae a mi humilde hogar?
—¿Por qué yo no recuerdo nada de eso?— Interrumpí la pregunta de Tae luego de salir de mi ensimismamiento, dirigiéndome hacia mi hermano.
—Yo que sé, estabas pequeña, supongo que tu cerebro aún no se desarrollaba lo suficiente como para retener esos recuerdos.— Se encogió de hombros.
