Narra Jaesoo:
— Subamos.— Dijo Taehyung al instante en que se levantaba de la silla giratoria.
Los demás se vieron unos con otros, pude sentir cierta tensión, lo que había dicho Tae antes de decirnos que subiésemos, los había inquietado, aunque no entendía porqué, ¿ya no nos habían dicho todo Seokjin y Jungkook? ¿Había más mierda?
Cuándo habíamos bajado a ese pequeño sótano, todo lo que estaba allí me abrumaba, tanta información que no tenía ni idea de porqué tenía que ver con nosotros, al menos conmigo y Yoongi, no dije nada en ningún momento, ni siquiera solté una de las tantas dudas que tenía en mi cabeza porque la frustración me haría quebrar la voz y lo más probable es que cualquiera de mis preguntas me hiciese quedar más como tonta. No era tonta, simplemente no sabía nada de nada al parecer. Nunca me tuve que preocupar por saberlo. En ningún momento, antes de éste mes, de está semana, me hubiese imaginado que corría algún peligro, más que el de morir de una rabia por las acciones de mi madre.
Tardé más que los demás en avanzar, pues después de estar viendo todo sin que algo captara totalmente mi curiosidad puesto que no conocía nada allí, una carpeta con un nombre que sí conocía sí llamó mi atención. Una carpeta amarilla como las que usaba para el colegio, con el nombre de Kim Seokjin en su portada me intrigó muchísimo, ésta no contenía muchos papeles, pero supongo que algo importante debe tener porque que yo supiera, el apellido que Seokjin llevaba era el mismo que el de Jungkook, Jeon, y no creo que se trate de otro Seokjin. La abrí mientras los demás y sobretodo Taehyung no me prestaban atención. No salía nada que yo entendiese, sólo información sobre la natalidad de Seokjin, el lugar, la fecha, la madre, cosas normales, pero la última hoja era mucho más interesante, los resultados de una prueba de ADN. En la hoja salían los nombres ahora sí, Jeon Seokjin y uno que no reconocía, Kim Songhyung, y la prueba había arrojado 100% de parentesco.
Quedé algo desconcertada por esto, no sabía que cabida tenía ésta información en todo lo que está pasando. ¿Qué importa quién sea el papá biológico de Seokjin? Toda la vida ha estado bajo la tutela de Deukook, a menos que el papá de Seokjin también tenga su participación en toda ésta mierda. Pero, ¿quién es?
— ¡Jaesoo!— Me llamaron desde arriba.
Me sobresaltó el grito, pues estaba tan sumida en mis pensamientos y sentía tanto que me estaba metiendo con algo que no me incumbía que pensé que era Taehyung reprochándome, pero no, todos estaban arriba ya. Yo volví a cerrar la carpeta y a ponerla en su lugar, y corrí hacia arriba.
Todos estaban sentados en los sofás, sólo faltaba yo para que empezaran a soltar las supuestas verdades.
Mientras me sentaba al lado de mi hermano, no pude evitar mirar a Seokjin y preguntarme si él sabía quién era su padre.
— Bien.— Interrumpió Taehyung el hilo de mis pensamientos.— Me emocionaba que éste momento llegara la verdad. Hasta practiqué varias veces cómo iba a decirles ésta información explota cerebros.— Rió, pero no del todo divertido.— Pero antes, creo que es injusto que haya personas aquí que no estén enteradas del todo de cosas de su propia vida.— Negó con la cabeza y se cruzó de brazos.
Pensé en ese momento, que entonces soltaría lo que yo acababa de leer, a lo mejor era eso lo que quería, decirle a Seokjin quién era su padre. ¿En serio su madre no le había dicho algo así?
— Seokjin, Jungkook.— Siguió hablando, éstos lo miraron con más intensidad de la que ya lo hacían, sobretodo el primero.— Ustedes son hermanos, y no se tienen secretos, ¿cierto?— Ellos lo miraron ahora con extrañeza en sus caras, ambos se miraron y luego negaron al mismo tiempo.— Eso es bueno, es de buenos hermanos.— Aplaudió. Ninguno de nosotros estaba entendiendo la actitud de Taehyung, y a Yoongi ya empezaba a exasperarle, lo notaba.— ¿Te consideras un buen hermano Yoongi?— Preguntó a mi hermano con cierto tono socarrón.
Mi hermano le dirigió una mirada asesina, no dijo nada, pero con su expresión denotaba todo, estaba por lanzarcele encima.
— Claro que es un buen hermano.— Dije yo con obviedad.— ¿Qué intentas Taehyung? No tenemos tiempo para juegos.— Soné tan seria como estaba, ya me fastidiaba al extremo todo esto de los secretos, de no saber nada.
— Intento que sepas de una vez la verdad.— Respondió con simpleza y Yoongi resopló.
— ¿Cuál verdad?— Bramó mi hermano.— Ella sabe lo que debe saber.
— Ella sabe lo que te conviene.— Le corrigió Taehyung.
— ¿Qué coño es? ¡¿Qué maldita verdad es?!— Grité con desesperación, el dolor de cabeza volvía a mí más fuerte, y todo esto me estaba sacando de quicio por completo.
— ¿Se lo dices tú o se lo digo yo?— Le dijo a mi hermano con calma ignorando mi ataque.
Yoongi le dirigió otra mirada amarga, seguro si a mi hermano le salieran rayos láser por los ojos, Taehyung ya se hubiese achicharrado bajo su mirada.
— ¡No hay nada que decir!— Soltó con agresividad.
Seokjin y Jungkook miraban la escena atentos, Jungkook con la confusión marcada en su rostro y Seokjin con algo de diversión en su expresión, ambos totalmente en silencio nada más que viéndonos.
— Bien, se lo digo yo.— Torció los ojos Taehyung.— Jaesoo.— Me llamó y yo lo miré atenta, pero un tanto desconfiada.— ¿Quieres saber porqué no puedes recordar mucho de tu niñez? ¿Por qué no nos recuerdas a Jungkook y a mí en ella? ¿Por qué se te escapan tantos detalles de todo e incluso ya grande te es difícil retener por mucho tiempo algún recuerdo?— Su mirada sobre mí era algo extraña, no sé que transmitía, si empatía o qué, pero las preguntas que me hizo me tenían más desconcertada.
¿Había una razón específica? ¿Yoongi la sabía? Miré hacia él y supe que su impotencia crecía cada segundo más.
— ¡Callate! ¡Callate!— Gritó Yoongi.— Tú no sabes porqué... no sabes nada, ¡callate!— Mi hermano trató de irse contra Taehyung pero Jungkook lo detuvo.
— ¿Hay razones específicas?— Preguntó Jungkook a Taehyung asintió hacia él.
Por un momento me desconecte de todo mientras silenciaba el barullo que causaban los gritos de mi hermano contra los de Taehyung, no entendía nada de lo que decían, mi mente no conectaba bien con mis oídos, pues por todos lados de mi cabeza sólo resonaba una cosa: “me había mentido, Yoongi me había mentido”. Y me importa poco que mi reacción parezca exagerada, pero estaba tan herida y molesta. Se supone que es la persona en la que más confío, nos cuidamos mutuamente, somos hermanos que se aman, que confían el uno en el otro, que se lo cuentan todo, bueno cada uno puede tener sus cosas personales, pero si es algo que afecta o concierne al otro, nos contamos todo. Me había tenido engañada por mucho tiempo, me había hecho ver cosas que no eran, ¿con qué propósito? Miré a Jungkook que intentaba evitar que esos dos se fuesen a los puños y me sentí tan mal, lo había hecho a un lado, era su amiga y lo había dejado solo en el infierno que vivía, y para colmo había sido una imbécil con él.
— ¡Se callan todos!— Grité al salir de mi ensimismamiento.
Mi hermano volteó a verme y había pena en su ojos, traté de ignorarlo, de no discutir con él en ese momento, no me importa si era de la boca de Taehyung o de quién fuese, quería saber la razón de mi pérdida de recuerdos.
— Quiero saber el porqué.— Me dirigí hacia Taehyung.
Él relajó su expresión y su cuerpo, haciendo así que Seokjin lo soltara, apenas notaba que lo sostenía. Miró a Yoongi, esperando que fuese él quién lo dijese, pero al no oír la voz de mi hermano, me dirigió su mirada a mí.
— Sufriste de amnesia.— Soltó.
Mi cara de confusión me imagino que fue un poema.