Lazos del destino; Kakashi's daughter Gaara y Tú

14.

-¡Vamos Kamari! Tu puedes con esto.-Me anime un poco y seguí el camino si seguía parando así no llegaría nunca pero sentí que alguien me seguía. Diferencie el Chakra.-Déjame sola. No necesito tu ayuda.

-No llegaras más lejos si no descansas un poco.-Seguí yendo y se puso en frente mío-¿le constaste a Sasuke?

-Yo no traiciono a mis amigos. No espero que lo entiendas. Además se muy bien que estabas al pendiente de todo. Sentí que estabas ahí muchas gracias por llevarme al hospital o llamar ayuda.

-Claro, le hubiera quedado de perlas a Konoha saber que un Akatsuki y desertor había ingresado a la aldea ¿no?-Bufé siguiendo mi camino pero no me dejó avanzar.

-Ya basta Itachi, déjame.

-Intente curarte ayer, pero no podía sacar el veneno, no se que jutsu es ese pero yo no se nada sobre medicina.

-ese jutsu lo hice yo, y la única forma de que el veneno salga es que desaparezca naturalmente. Tengo que seguir. No dejare que tu hermano se vaya.

-No podrás hacerlo razonar solo deja que siga su camino.

-Ya déjame-Tome mi cabeza frustrada-No te entiendo. Quieres proteger a tu hermano pero fuiste a la aldea lo atacaste y casi lo matas. ¿Luego atacas a mi padre? ¿Que te sucede? Esto es ridiculo.

-Tengo que mantener apariencias no olvides con quien estoy trabajando.

-Si lo sé ahora déjame por favor. Necesito seguir.

-Dejó muy claro sus intenciones al devolverte ese ataque, no creo que la segunda vez te deje con vida.

-Ayer estaba distraída, ahora se lo que tengo que hacer.

-No podrás-Me di vuelta y golpee su pecho con fuerza.

-¡Por que ninguno tiene fe en mi!-Apoye mi cabeza en su pecho mientras sentía la garganta quemarme.-¡ninguno de ustedes confía en que puedo lograr lo que sea que me proponga! Ni mi padre, ni tú y hasta hace poco ni Tsunade.

-Nos preocupas, eso es todo. La mayoría de las veces la mejor forma para hacerlo es romper tu esperanzas.-De repente algo conecto en mi cabeza.

-Es lo que querías con Sasuke.-El asintió.-Déjame intentar, quiero ser útil. No quiero sentarme a pedir las cosas. ¡Quiero actuar!-Itachi me sonrió y puso dos dedos a mi frente.

-Cuídate mucho. ¿Ves? Logre que descansaras aún que sea un poco. Siento mucho lo que pasó con tu padre. No esperaba que el se atravesara en mi camino, estaba con kisame no podía hacer la vista gorda de el.

-No lo entiendo. Y no estoy segura de querer pero lo que hiciste fue muy tonto, sigo molesta.-Me levante y troné los huesos de mi espalda y brazos.-Ahora a lo que vine. Cuídate también.-Itachi asintió y seguí con mi camino. Descansar ese poco me ayudó a seguir, el chakra de Sasuke se sentía a la distancia casi nulo solo seguí mi camino pero escuché unos quejidos. Seguro era algún miembro del equipo que fue enviado. Perdón Sasuke, terminare con esto e iré por ti. A pesar de que seas un tonto. Mire el campo y vi un chico que... tenía no muy buenos gustos... dio una patada hacia un tipo que lo detuvo con... ¿eso eran sus costillas? Que asco. Corri hasta ellos y lo tiré hacia mi con hilos de chakra y decían que Kankurō era inútil para enseñar. Lo puse atrás mío y me miró sorprendido.

-¿Tú... tú quien eres?.-Levantó sus gruesas cejas, tenía miedo también de que sea otra enemiga, me baje la máscara y le sonreí.

-Tranquilo, soy una amiga de Konoha. Por que no descansas un poco...

-Lee.

-Lee, mientras yo me encargo de esto-me miró embobado y algo sonrojado mire al frente un hombre rarísimo con cabello plata y ojos extraños.