Siempre Estaré Ahí ❤

El cómplice buenorro

*NARRADOR OMNISCIENTE*

Mientras los chicos estaban intentando averiguar la ubicación de Mel, esta se encontraba atada como un perro a un poste. No sabía ni ella donde estaba, le costaba tener los ojos abiertos y le dolía todo el cuerpo. Alrededor de su cuello tenía una cadena que le permitía poco más que girar un poco la cabeza, esta cadena estaba atada a una columna del edificio. Era tan corta la cadena que le impedía a Mel poder sentarse, obligandola a sacar fuerzas de donde no las tenía para poder mantenerse en pie.

Miro al su alrededor en busca de algo que le pudiese decir donde estaba, pero solo veía una habitación un tanto destrozada, parece una oficina de una empresa, ya que está repleta de escritorios, con sus sillas, ordenadores y papeles, pero claro. Las sillas están tiradas por el suelo, los ordenadores rotos.

Mel buscaba una ventana y cuando la localizó le dió bajón, no podía ver que había tras la ventana, ni a que altura estaba del suelo ya que al parecer las luces de la calle estaban apagadas.

Cansada, Mel intenta apoyarse contra la columna cuando siente algo en su bolsillo del pantalón.

Su móvil. 

Oh dios mio, piensa Mel, ahora es el momento de demostrar que saber usar el movil casi sin mirar es un gran don mamá.

Mamá...No debería ni llamarla así, a esa mujer que....

Mel sacude la cabeza intentando quitarse esa idea de la cabeza mientras saca el movil de su bolsillo y se lo acerca a la cara muchísimo ya que su cuello no le permite movimiento alguno.

Busca el contacto de su hermano y le va a escribir un mensaje cuando oye un ruido fuera de la habitación.

Temerosa, lleva su movil a su espalda e intenta escribirle a su hermano algo.

Pero cuando lleva escrita la mitad de la palabra, la puerta se abre y Mel asustada de que puede ser descubierta, envía el mensaje tal cual y guarda el movil en el bolsillo.

Ante ella tiene a García que viene acompañado de un muchacho joven, el cual no tendrá más de 22.

Muy bien Mel, se recrimina a ella misma, estás secuestrada, sin saber como vas a lograr salir de esta y tu te dedicas a analizar al complice buenorro de tu secuestro.

Los pensamientos de Mel se detienen cuando García se acerca de más a ella.

-Bueno querida, como te sientes?

-Eso tendría que preguntartelo yo- le responde Mel, intentando alzar la cabeza- aún te duele? O quieres que te dé otra patada?

La cara de García se oscurece ante mis palabras y el complice suelta un risita.

Mel va a sonreír cuando García le pega una bofetada, la cual hace que Mel casi ni pueda mover el cuello por el collar, produciéndole tal daño que chilla.

Pierde las fuerzas en sus piernas y por un momento va a caer al suelo, algo que no ocurre porque el collar se lo impide haciendo que Mel empiece a ahogarse.

Recupera el equilibrio en las piernas y empieza a toser en busca de aire.

-Serás...-dice Mel mientras intenta no mover nada el cuello, ya que lo siente al rojo vivo.

-Basta de juegos niñata, dime donde está.

-Eres tan estúpido García....-continúa Mel mientras le dedica una sonrisa malévola.

García le da otra bofetada.

-Que hables te estoy diciendo.

Mel no puede pensar con claridad a causa del dolor que está sintiendo. Sus piernas no pueden más pero tiene que seguir en pie, sino, será peor para su cuello.

El complice aparece de pronto con un taburete alto. Intenta ponerselo a Mel ya que él se ha dado cuenta de que la muchacha no va a poder aguantar mucho más de pie, pero García se lo impide tirándo la silla al suelo.

-Que crees que haces?- le dice García enfadado.

-Se va a caer y se va a morir si no la sientas- dice el complice como si fuese algo obvio- muerta no te va a servir de nada.

-Me da igual, así tiene el tiempo justo para hablar. Si quiere vivir que hable, si no que muera.

Mel mira al complice y piensa que él podría ser su vía de escape.

El complice se acerca a ella, al parecer examinando sus heridas.

Es un puto bruto, piensa el misterioso joven de García.

Pero su mirada va a parar a las manos de Mel, las cuales están sobre su trasero, más bien sobre su bolsillo. El muchacho no lo duda y lleva la mano a ese bolsillo.

-Que..Que estás haciendo?-dice Mel aterrada.

-Tienes un buen culo encanto- dice el muchacho mientras se lo aprieta- pero me interesa más el porqué el inútil de mi padre no te ha registrado al entrar y no te ha quitado el movil.

Mientras dice esas palabras la cara de Mel y de García se palidecen. El muchacho tira el movil contra la pared más cercana, haciendo que se rompa en multiples pedazos.

Mel mira a los ojos del muchacho, buscándo algún rastro de sentimiento. Pero esos ojos verdes intensos solo le transmite a Mel soledad.

-Es una pena encanto- dice el muchacho mientras se aleja y se sienta en una silla de ruedas mientras pone sus pies encima de unos papeles que tiene el escritorio maltrecho.

******

Tom y los demás no pierden el tiempo y salen corriendo hacia esa calle. No saben el piso exacto, pero saben la calle y eso ya es mucho, piensa Tom.

Mientras Nate conduce hacia allí, nadie en el coche habla, todos están sumergidos en sus pensamientos o más bien todos están luchando por no imaginarse lo peor.

-Estamos hablando de Mel- dice Jerry rompiendo el silencio- ella no dejarán que le hagan nada sin enseñarles primero con quién se están metiendo.

Nadie responde a eso. Ya que todos piensan lo mismo, están hablando de Mel, la cual no mantendrá la boca cerrada aunque eso le implique algo peor hacia ella.

Al llegar a la calle todos esperan órdenes de Tom. El cual está analizando la calle.

No hay luces en la calle, todos los edificios tienen la misma altura y todos parecen abandonados. Ningún edificio tiene las luces encedidas.

-Que había dicho García que trabajaba?- dice Tom mirando a Angel.

-De económico de una pequeña empresa.

Tom se baja del coche y todos le siguen.

Avanzan un poco más por la calle hasta que los pasos de Tom se detienen y se para a mirar dos edificios, uno en frente el otro.

-Esto son dos empresas, en una de estas tiene que estar.-dice convencido de ello- Jerry, Sam y Angel, id a la de la izquierda y buscad allí. Nate tú conmigo a la de la derecha. Si encontraís algo o notaís cualquier cosa sospechosa llamad, poned todos el movil en vibración, no quiero que el sonido de un estúpido movil nos delate.

Todos están callados escuchando atentamente a Tom.

-En marcha!

Los chicos se separan y empieza la búsqueda.