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Empecé a caminar hacia nuestra habitación mientras me seguían como perros hambrientos preguntándome sobre los detalles. Adoraba esa sensación.

Pov _______

El día siguiente llegó. Sin más, me levanté y me fui directa a comer, nos in antes ponerme el uniforme de la legión. Ayer no cené, ya que con Jean comí mucho y por la noche no tenía hambre. Las demás todavía estaban durmiendo, pero decidí no despertarlas. Por el camino no me encontré con nadie.

Al llegar al comedor, di un vistazo rápido para ver a la gente que había. Todas las mesas estaban llenas de soldados desconocidos para mí. No se me daba bien hablar con la gente, y la mayoría eran grupos nombrosos. Mientras miraba disimuladamente las mesas fui a coger algo de comer. Al final me dirigí a la mesa que estaba mas cerca, la menos nombrada. En esta habían tres chicos acabando de comer, así que si me sentaba en esa, se irian antes y tendría la mesa para mí sola. Me acerqué tímidamente a ellos.

_______: Puedo sentarme?

Los tres me miraron a la vez, tragué saliva inconscientemente. Todos formaban parte de la legión. Sus caras me sonaban, pero tampoco sabía muy bien de qué les conocía. Antes de que uno de ellos contestara, unas manos me tocaron los hombros y me empujaron hacía un lado, llevándome a la mesa de los superiores.

Hange: _______, ten un poco mas de cuidado. Esos chicos no tienen muy buena reputación que digamos -dijo mientras no paraba de caminar procurando que no nos escucharan-

Entonces recordé quienes eran. Fueron los chicos que me molestaron mientras comía los primeros días que formaba parte de la 104, de los cuales Mikasa me salvó. Nunca los volví a ver desde entonces, y ni ganas tenía, pero soy tan tonta que fui hacia ellos. Llegamos a la mesa y Hange hizo que me sentara

_______: Perdón por las molestias.

Hange: Que molestias ni que molestias. -dijo sentándose a mi lado-

Fue entonces que me di cuenta que Hange también había venido con Erwin y Levi, y que ahora, sentada en la mesa de mis superiores, delante de Levi, el apetito se me había ido por completo. No pintaba nada allí, me sentía como una piedra normal y corriente entre perlas blancas y brillantes.

Hange: No vas a comer?

_______: S-si.

Hange estuvo todo el desayuno hablando. Por suerte, algunas veces, Erwin añadía algún comentario a lo que ella decía. Tanto Levi como yo, permanecíamos en silencio, yo escuchando, él no lo tengo muy claro. Podía escuchar los murmullos de la gente diciendo se todo: "Que hace ella en la mesa de los superiores?", "Que asco me da la niñata esta", "Seguro que les ha chantajeado", "La próxima vez nos sentamos con ella, a ver si se queda tan calladita como con ellos" este último provenía de la mesa de los chicos de antes.

Aunque quería, no podía montar un numerito delante de todos, así que me decanté por la huida, sí, una cobarde. Aceleré el ritmo para irme de aquí lo mas rápido posible. Pero no se callaban "Quiero ver la cara que pondría mientras toco todo su cuerpo-". Se escuchó un fuerte golpe haciendo que todos pararan. Era Levi, el cual golpeó la mesa haciendo que su taza (la que yo le regalé) se tumbara y cayera todo el líquido al suelo, ahora estaba de pie mirando a los chicos, que fueron los que dijeron el último comentario también. Salió disparado en dirección a su mesa.

Levi: A mi me gustaría la tuya cuando te estampe el puño en la cara. -dijo cogiendo al que dijo el comentario de la camiseta-

Se escuchó la risa de Hange, intentando aguantársela. En serio le parecía gracioso?

Erwin: Levi

Levi le escuchó y dejo el chico al suelo. Luego los tres se fueron corriendo y el capitán se dispuso a caminar hacia nosotros nuevamente. Los demás volvieron a hablar, rompiendo el silencio.

SNK x lectoraDonde viven las historias. Descúbrelo ahora