STAY

El Mundo Es Pequeño

-¿por qué lloras?—preguntó Regis mirando el perfil perfecto de aquel niño que parecía un muñeco de porcelana.

-no lo se, solo sentí tristeza ya que nunca e atraído algún alfa o beta—hablo con dificultad ya que el nudo en su garganta se lo impedía—creo que es por que soy feo.

-claro que no! Tu eres precioso si no te movieras juraría que eres un muñeco de porcelana—rápidamente trato de convencerlo, por que era verdad el omega se veía hermoso—¿Quién te a dicho lo contrario? son mentirosos.

-mi padre, mi ex mejor amigo y todo el mundo.

-¿por qué lo hacían?.

-mi padre nunca me quiso por ser omega, yo era una vergüenza, por eso me obligaba a trabajar como jardinero en una mansión junto a él y mi madre—comenzó a recordar—mi ex mejor amigo cuando era pequeño el me empujó por el balcón de su habitación pero por suerte no caí, el era heredero así que se hacía lo que el quería, pero lo que no le puedo perdonar es lo que me hizo después—comenzó a llorar de nuevo al ser atormentado por ese recuerdo.

-ya tranquilo, dímelo te juro que te sentirás mejor—lo abrazo lo mas pegado que pudo ya que su vientre estorbaba un poco—yo no te juzgare, también alguien abuso de mi.

-esta bien.

El omega se levantó de golpe ya que su padre le había echado una cubeta de agua helada para que se levantara, eran las 5 am cuando salió dispuesto a comenzar su jornada del día.

Primero tendría que preparar el desayuno del joven heredero, a las 6 en punto lo despertaría y rezaria por qué el heredero no se propasara con el de nuevo, a su “amigo” le encantaba tocarle de manera poco amistosa y muy perversa.

Antes de las 7 debía estar listo en el jardín si no quería que su padre le golpeara de nuevo con él cinturón, de esa hora hasta las 5 estaría en el jardín, pero cuando la hora llegaba tenía que subir a la habitación del joven para hacerle compañía.

Era la peor hora de su día ya que el joven heredero siempre lo obligaba a masajearle sus partes privadas, a dormir desnudos, o posar desnudo para que el alfa para que lo  retratara y  el no podía negarse ya que el hombre le lo lastimaba hasta que lo hiciera.

Ese día transcurrió como de costumbre y  la 5 de la tarde  llegó, subió por las escaleras a paso veloz para llegar con su “amigo”, pero está vez tenía más miedo que de costumbre.

Y al estar en frente de la habitación tenía ganas de orinar de miedo ya que el aroma que poseía aquel alfa era tan fuerte que le aterro tanto  así que no se pudo mover.

Conocía la situación, el joven heredero entró en celo, su madre le había dicho que los alfa en celo son peligrosos, claramente lo eran ya que su madre lo experimentaba con su padre.

Lágrimas comenzaron a salir de sus preciosos ojos y un sollozo escapó de sus labios.

La puerta se abrió mostrando al alfa en celo; empapado en  sudor, agitado e intimidante. El niño lloro más cuando aquel alfa tomó su cabello y le obligó pasar a la habitación, arrojándolo bruscamente sobre la cama.

El pequeño lloraba mientras aquel alfa rompía sus humildes prendas dejándolas inservibles, Ángelo trataba de parar al alfa, pero era una lucha perdida ya que un niño de 11 años jamás le ganaría a un alfa de 17 años.

Y pasó lo inevitable…

El alfa lo sometió y le quito su virginidad de una manera grotesca, forzó tanto al pequeño Angeló que no pudo caminar en 1 mes.

Eran las 10 de la noche y era hora de marcharse, pero aquel alfa no lo soltaba, estaba sometido y con el nudo del alfa dentro de él, torturándolo; ya no sentía las piernas, ni sus caderas, entró a un temible estado de relajación, su voz estaba rota de tanto gritar, sus ojitos hinchados por llorar, totalmente acalorado y sediento.  Pero no soporto más así que cayó inconsciente sobre aquella cama.

Sus padres buscaban al pequeño niño, hasta que se toparon una sirvienta en el pasillo.

-Jisoo has visto a mi bebe—preguntó la madre de Ángelo.

-creo que si, la última vez que lo vi se dirigía a la habitación del joven—pero rápidamente se preocupo al recordar que el alfa entraría en celo— ¡CORRE! ¡EL JOVEN DEBIÓ ENTRAR EN CELO!.

La madre corrió hasta la dirección de la habitación del alfa, su esposo lo seguía atrás más tranquilo, al llegar abrió la puerta encontrándose la imagen más desastrosa, estaban violando a su hijo, con furia trató de que el alfa le soltara, el niño estaba inconsciente, pero no pudieron hacer mucho ya que el alfa arrogo al omega y alfa padres del niño fuera de la habitación.

Al día siguiente el alfa permitió que pasarán los padres del niño para que se lo llevarán, el omega madre de Ángelo tomó rápidamente a su pequeño hijo lo envolvió en mantas como si se tratara de un bebé, lo cargo y salió corriendo para llevarlo al médico.

El padre del infante se vio más relajado al respecto, tuvieron una corta platica los alfas.

-toma—le extendió un sobre el heredero—no quiero mas reclamos sobre este asunto.

El padre de Ángelo tomó el sobre con interés y lo abrió, una enorme sorpresa se llevó al ver tanto dinero, no le importaba su hijo, sólo quería el dinero y con esto vio una excelente oportunidad.
-joven si necesita a mi hijo una vez más solo dígame cuando y ahí estará—le hablo con una sonrisa carismática.

-estas prostituyendo a tu hijo?—habló burlón y él alfa contrario asintió—si es así lo quiero cuando se recupere.

-al parecer le gustó mucho mi hijo—habló en un tono pícaro.

-no lo hace mal—dijo restándole importancia.

-vaya salió igual de zorra que su madre—indagó un poco—no importa cuando se recupere estará aquí.

-tenemos un trato? —le extendió la mano.

-tenemos un trato joven Dong—afirmó el alfa.

Pero lo que no sabían es que la joven beta Jisoo escucho y vio todo, inmediatamente advirtió a la madre de Ángelo y cuando el infante estuvo sano escaparon sin mirar atrás.