Narra Len:
Me senté en la cama pensando en todo lo que había ocurrido en el día, y de también de como iban las cosas aquí. Esto era realmente un gran reto para mi. El tener que aparentar no sentir nada no siempre terminaba bien, y a la larga las personas se iban a dar cuenta. Por hoy no me lo decidí cuestionar tanto. Lo único que no quería hacer es lastimar a Rin, o traicionar a mi mejor amigo. Me recosté bien en la cama y unos segundos después de eso Miku salió de el baño y se recostó en la cama. Quedamos frente a frente.
-Descanza -dije y justo antes de poder voltearme, ella me detuvo.
-Espera Len... Quiero hablar contigo.
-¿Sobre qué?
-Len... ¿Rin es la chica que te gusta?
Me quedé helado. Se suponía que nadie debía saberlo. ¿Era tan evidente?
-.... Si.... Rin me gusta.
-Pero...
-Nada de peros Miku, no tengo ánimos de ponerme a hablar ahora. Esto no es tu asunto.
-Si es mi asunto. Tu eres mi novio.
-Eres mi novia, no mi niñera. Son cosas que no te incumben. Mejor duérmete. Ten buena noche -dije un poco molesto y me giré al otro lado de la cama quedándome dormido rápidamente.
Miku era una chica muy bella, y no solo de apariencia, sino que también era una chica con un gran corazón. Sin embargo, no podía amarla. Mi corazón se inclinaba por alguien más. Miku lo había perdido todo hace unos cuantos años, se podría decir que su vida está marcada por la tragedia. Cuando tenía un año apenas, su hermano mayor, Mikuo, se murió por causas desconocidas. Cuando tenía doce años, su padre murió dejándola totalmente sola. Nunca conocí directamente a su padre, y aún así, siento que no era realmente un buen hombre. Algunas veces veía a Miku arrastrando discretamente a su padre ebrio por la calle, y eso hacía que sintiera mucha pena por ella. Por lo menos yo tenía a mi amigo y a mi hermana, pero ella estaba totalmente sola. Sospechaba que su padre la golpeaba debido a que siempre traía moretones en las manos y brazos, pero ella mentía diciendo que se tropezaba o cosas así. Por eso terminaron apodándola "la niña de cristal" por lo frágil que era. Cuando se quedó sola, estuvo trabajando casi sin descanso. Se veía bastante pálida y sus huesos comenzaban a notarse. Sin embargo, yo nunca hice nada fuera de mi alcance para ayudarla. Hace apenas dos años que logró conseguir trabajo en la pescadería donde trabajaba Lenka y se había logrado recuperar.Me entristecía mucho que se estuviera dañando tanto por culpa mía. Algunas veces le decía que terminaramos, porque ella se merecía a alguien mejor, pero se seguía negando. Me decía que tal vez si seguía esperando en un futuro yo aprendería a amarla, pero la realidad era diferente. Yo nunca la amaría enserio, nunca.
Narra Rin:
Me despertó un olor a quemado, no le di mucha importancia, de seguro Yukari había vuelto a quemar algo en la cocina, pero mis pensamientos tornaron un giro cuando el olor se empezó a intensificar y el humo comenzó a invadir mis fosas nasales. Abrí los ojos rápidamente y voltee a mi alrededor. Por la ventana se veía un mar de llamas y la habitación estaba llena de humo negro. No podía ver muy bien. Entonces alguien me tomó de los hombros, era Gakupo.
-¡Rin! Tenemos que salir de aquí -Gakupo mojó un trapo con agua y me lo puso en la nariz- ¡Vamos!
Salimos de la habitación rápidamente, y todo a nuestro alrededor estaba quemándose. En el pasillo nos topamos a Miku y Len quienes corrían junto con nosotros. Bajamos las escaleras, pero estas ardían en llamas, al ser de madera.
-¡Len! ¿Dónde están Los demás!
-Seguro salieron, no están en sus cuartos.
-¡¿Y ahora que hacemos?!
-Tengo una idea -Gakupo se aventó de las escaleras calléndose y pegándose en el suelo, pero rápidamente se levantó a pesar de la sangre que brotaba de su nariz- ¡Salten! ¡Los atraparé! ¡Len, lánzalas lo más alto que puedas!
-¡Si! -Len agarró rápidamente a Miku, la lanzó y ella calló en brazos de Gakupo.
-!Vamos, ahora tú Rin! ¡No tengas miedo y salta a mis brazos!
Len me miró por un instante y yo asentí con la cabeza. Para siempre. Len me lanzó y yo caí en los brazos de Gakupo.
Faltaba solo Len, quien sin pensarlo mucho saltó y calló desafortunadamente en el suelo torciéndose el tobillo. Ambas, Miku y yo tomamos a los chicos y salimos de ahí, pero la casa empezó a destruirse, lo cual me hizo dudar de la mano de obra. Corrimos lo más rápido que pudimos, sin embargo, un pedazo de madera me iba a caer en la cabeza, pero alguien lo impidió.Narra Gakupo:
Un pedazo de madera de el techo, bastante grande y puntiagudo, le iba a caer encima a Rin, y yo no podría permitirlo, no podría permitir jamás que algo le pasara. la empuje callendo sobre ella, y en eso, sentí que algo me atravesaba y un dolor agudo se hizo presente.
-¡Gaukupo!!!Narra Rin:
-No no no no ¡no! ¡No puede pasarte esto -me puse realmente histérica ¡el no debía estar así!
Sin importarme nada, lo puse en mis piernas. Mis guantes blancos se mancharon de la sangre que brotaba de su pecho, y de mis ojos brotaban lágrimas -¡No!!!! ¡Por favor no! No me dejes. Yo te amo. Por favor... No...
Me recargué en su pecho llorando y sintiendo los lentos y escasos latidos de su corazón.
-No llores Rin... Sal de aquí.
-¡No! No te puedo dejar aquí...
-Estarás bien... Ahora vete.
-No... No por favor. ¡No puedes morirte! Me lo prometiste! Dijiste que estaríamos juntos siempre.
-Y lo estuvimos... -de su boca comenzó a salir sangre -fue nuestro pequeño "para siempre".
Con las pocas fuerzas que le quedaban me tocó el rostro. Y por primera vez, sentí sus frías manos en mi piel. Me quité los guantes rápidamente y le toqué las manos y su rostro, hecha un mar de lágrimas.
-¡Te amo! ¡Nunca lo olvides! ¡Te amo! -Me acerqué al rostro de el, sintiendo su aliento.
-Yo también te amo... Adiós. Al menos pude tocar tus manos -Lo besé amargamente, por primera vez en mi vida. Me separé de ese beso, cerrándole sus ojos, para que ya nunca más los vuelva a abrir.Narra Len:
No lo podía creer. Gakupo había muerto, mi amigo de la infancia y de la vida, la persona en la que más confiaba, estaba ahora muerta. Al observar esa escena, no pude evitar brotar en llanto, Miku igual, estaba recargada en mi hombro. Era el final de su vida, era injusto. El era bueno, y merecía seguir viviendo. A nuestro alrededor la casa se iba derrumbando de a poco a poco, pero no me importaba esto. Gracias por todo Gakupo, gracias por poder haber sido tu amigo. Tomé fuerza realmente involuntaria y como pude me levanté de el suelo, y agarré a Rin de la cintura y junto con Miku, los tres salimos de esa casa, viendo como se derrumbaba poco a poco.
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Dame Tu Mano (Rin X Len Kagamine) TERMINADA
Fanfiction•~•~•~•~•~•~•~•~•~•~•~•~•~•~•~• Rin toda su vida ha vivido sola encerrada en una casa sin poder salir, ya que su madre la quiere "proteger". Sin embargo, un día, su madre muere y ella se entera de una terrible verdad y tendrá que enfrentar su realid...