Cap.38 Nueva aventura

53 4 0
                                    

Narra Rin:

Caímos en el suelo agotados por haber corrido tanto. Me sentía muy asustada por todo, estaba temblando. Len me ayudó a levantarme, y me recargué en su hombro. El me abrazó tiernamente, y puso su mano en mi cabeza... Era la primera vez que tenía contacto físico con él.
-Ya pasó.... No llores más -me dijo él y acarició mi rostro con sus manos.
-Muchas gracias -dije secándome las lágrimas y suspirando de alivio.
-Rin... ¡Eres tú! Al fin puedo volver a verte -Haku habló y me abrazó fuertemente- ¡Mira como has crecido! Y pensar que hace no mucho eras un bebé.
-Señorita Haku... Mucho gusto en conocerla, o más bien verla de nuevo -dije sonriendo cálidamente.
-Que felicidad el verte de nuevo... ¡Ah, y a ti Len! También te extrañe demasiado.
-¿Me conoce? -Len se acercó a Haku y a mi.
-Oh, es cierto... Ya no lo recuerdas. Es que en ese entonces eras un bebé también.
-¿Len y yo nos conocíamos? -pregunté yo sorprendida.
-¡Claro que si! Eran inseparables aún siendo bebés. Jugaban todo el tiempo y hacían travesuras... Jajaja que buenos recuerdos.
-Oh...
Miré al cielo y pude ver a el pequeño canario amarillo.
-Un momento... ¡Vecky, eres tú!
El ave se posó en mi hombro.
-Vaya, veo que sabes quién es -dijo Haku- su verdadero nombre es Hiyama Kiyouteru, el en realidad es un humano.
-¿Todo este tiempo fue un humano?
-Eso mismo, pero no te preocupes, el se ofreció a hacer esa tarea.
Kiyouteru voló de mi hombro y se fue a un lugar desconocido. Luego el mismo chico de gafas con el que habíamos escapado.
-Supongo que ya sabes mi verdadera identidad, mucho gusto en volver a verte Rin -Kiyouteru se paró frente a mi y me tomó de las manos.
-Hola de nuevo, Vec... Kiyouteru, ¿es así?
-Si.
-Lamento haberte dado ese nombre -dije apenada y riendo de lado.
-No te preocupes, si hubieras sabido que era un humano, de seguro me hubieras puesto otro nombre.
-¿Pero si eres un ave por qué no pudiste escapar con Haku?
-Al igual que tú, Meiko me maldijo y me convirtió en animal, y después de eso me encerró junto a Haku.
-¿Por qué lo hizo?
-Dijo que era un traidor... Pero al menos me dio una ventaja, ahora me puedo convertir en canario a voluntad propia.
-Ah, ahora lo entiendo. Será mejor que vallamos a casa, Meiko de seguro nos mandará buscar.
-Mejor hay que huir de la ciudad, si es posible del país. Ella no descansará hasta encontrarnos.
-Entonces vámonos -Len nos tomó a mi y a Haku y nos jaló a la casa, mientras Kiyouteru nos seguía.
Llegamos a casa y abrí la puerta. Dentro estaban Rinto, Lenka y Kaito sentados en la mesa. Al notar nuestra presencia Kaito sonrió y se acercó a nosotros.
-¡Haku! Al fin puedo verte, después de tantos siglos -Kaito abrazó a Haku y esta le correspondió.
-También te extrañe demasiado... No debimos haber roto nuestra amistad.
-Eso quedó en el pasado, por cierto, ¿fue muy complicado?
-Solo un poco -dije sentándome en una silla agotada.
-Espero ese imbécil aprenda la lección -Len se sentó en otra silla y lo pude ver mejor. Tenía algo de sangre seca en el rostro y un par de rasguños.
-¡Hermano, ¿qué te han hecho? -Lenka exclamó acercándose a Len y poniendo su mano en su cara.
-No es nada, solo me caí -dijo Len tranquilamente.
-No es verdad -Lenka tocó la herida de Len y esté se sobresaltó.
-¡Auch!
-Ves, estás herido -dije tomando un trapo y curando sus heridas- gracias por habernos salvado.
-No tienes porque agradecer... ¡Auch!
-Jejeje cuéntenme todo -dijo Kaito con una pequeña sonrisa.
-Es una larga historia... -Haku se sentó en el lugar donde antes estaba Kaito y lanzó un suspiro.
Le contamos todo lo sucedido en el castillo, pero, no me atrevía a hablar lo que Meiko me había dicho. ¿Era verdad? ¿Yo en verdad era una de las tantas reencarnaciones de Emily? Toda esa información daba vueltas y vueltas en mi cabeza. Definitivamente hoy tenía que hablar con Kaito y Haku... Y en cuanto a el escape, de seguro teníamos que hacerlo, por seguridad. Mientras tanto, Haku nos ofreció un lugar para poder ocultarnos. Dijo que era una cabaña en el campo, pero que fácilmente podríamos usarlos como un hogar en lo que se calmaban las cosas.
-Algo que no les dije... Meiko mencionó que fue ella quien Mató a la reina Clara y que una anciana secuestró a su hija...
-Lo suponía de algún modo -Haku apoyó su mano en la barbilla y lanzó un suspiro.
-Pero me dijo que la hija de Clara la había encontrado una anciana obsesionada con las personas rubias...
-Espera... ¿No será...
-Si, creo que es de quién sospechas -dije interrumpiendo a Len- esa mujer, la que nos topamos cuando venimos por primera vez a Mitsaki, de seguro que era ella.
-¿Entonces Yuki es?...
-Si, es la sucesora de Clara.
-Es la princesa perdida...
-¡Tenemos que decir la verdad! Si no lo hacemos, Meiko la matará.
-Será muy difícil... -Kiyouteru habló- conocí a Meiko poco, pero lo suficiente para darme cuenta de que es muy poderosa. Nadie nos creerá.
-Pero si lo intentamos..
-De todos modos -Kiyouteru continuó hablando- si nos encuentra, de seguro nos mandará a la orca o a la guillotina, no podemos morir solo por eso...
-¿Tú la conoces mucho?
-Fui su aprendíz... Ella me enseñó todo lo que se de magia y brujería.
-¿Entonces debes saber algún secreto suyo, no?
-No, ella nunca permitió que yo supiera de su vida además de la que mostraba.
-Pero...
-¡Eh dicho que no, Rin! -gritó viéndome a la cara con un cierto enojo- Ah.... Perdón, pero no podemos sacrificarnos por la justicia...
-...
-En todo caso, ¿deberíamos dejarlo pasar? -Len habló.
-No nos incumbe...
-Si, porque Yuki es nuestra amiga, ¿si fuera alguien quien tu quieres no lo ayudarías? Yo pensé lo mismo cuando iba a ayudar a Rin a rescatar a Haku y a ti, y no lo entendía, pero ahora lo comprendo... Era el sentimiento del amor y la amistad. Perdí a un amigo hace un tiempo, y no podría soportar perder a dos. Cuenta conmigo Rin, te ayudaré.
Len se me quedó viendo y yo le sonreí haciendo que el se calmara un poco.
-En todo caso, yo también les ayudaré -Kaito habló y se unió a nuestra causa- Ustedes me ayudaron a rescatar a Haku, así que les debo un favor.
-Igual yo -ahora Haku era la que hablaba- ustedes me rescataron y gracias a eso yo pude ser libre de nuevo, así que cuenten conmigo.
-También nosotros -Lenka y Rinto hablaron al mismo tiempo.
-Rin, eres como nuestra familia, y Len, sabemos lo preciada que es Yuki para ti -dijo Rinto.
-¡Así que también cuenten con nosotros!- exclamó Lenka.
-.... -Kiyouteru se quedó pensando -lo haré, esta bien. Solo porque te quiero Rin, y porque ambos me ayudaron.
-Entonces, somos un equipo.
Y así comenzaría la verdadera aventura, protagonizada por dos hechiceros locos, un brujo intelectual y terco, un grupo de tres hermanos; el mayor intelectual y frío, la segunda alegre y optimista y el tercero tímido y arrogante, junto con una chica rubia, miedosa e inteligente.

Dame Tu Mano (Rin X Len Kagamine) TERMINADADonde viven las historias. Descúbrelo ahora