Cap.58 Toma mi mano

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23 de abril de XXXX

¡Hola mi querida Rin! Espero que te encuentres bien. Ojalá te vaya bien en tu trabajo como pintora. Vimos tus trabajos recientes y nos parecieron impecables. Nos gustó mucho el retrato que hiciste de Yuki jeje. No lo decimos nosotros, lo dicen los críticos. Pero hasta este punto creo que has ganado fama después de estos cinco años. Acá las cosas también están yendo bien. Mamá últimamente ha estado muy bien de salud y Rinto y Len se han llevado mejor. Y pues yo, empecé a trabajar como cocinera en la casa de una familia adinerada. El trabajo es divertido y la paga es bastante buena.  La señora Lucía vino a visitarnos recientemente y  la señora Amy también. Claro, después de su boda con el señor Aaron se ve muy contenta. Y sobre Len, bueno, él también lo ha llevado bien. Su trabajo es bueno y últimamente se toma el  tiempo de descansar un poco más. Eso si, dice que cada vez está más listo para verte . Bueno, eso es todo lo que quiero decirte, no pienso interrumpir más tu vida tan atareada por los viajes. Aunque supongo que ahora te estás quedando a vivir en Zen. Deberías ir a nuestra casa para ver como está, si es que puedes. Hasta entonces, deseamos verte pronto. ¡Hasta la próxima!

    Atte: Lenka tu amiga que te quiere mucho.

      Pd. (Haku me invitó a salir el otro día. Deséame suerte).

Me reí al leer esa carta. Me alegraba mucho que las cosas en su casa fueran tan bien. Cerré la carta nuevamente y la puse en mi bolsillo. Dirigí mi mirada al caballete que estaba enfrente mío y tomé el pincel que había dejado de lado. Me concentraba mucho en la pintura que tenía enfrente. En el bosque no había nadie y solo se escuchaba el sonido del viento atravesando los árboles y el canto de las aves. El lago estaba tranquilo y varios peces nadaban en el, listos para ser capturados por mi pintura.  Al acabar, dejé el pincel a mi lado y un pequeño pajarito amarillo se posó en mi hombro. Tenía una carta en su pico.

-Hola, parece que hoy has venido un poco tarde -le dije tomando la carta que tenía en su pico.

-Ni lo digas. Hubieron varias lluvias y por eso me tardé -Kiyouteru se transformó en humano nuevamente y se tiró al lado de el gran roble.

-Deberías quedarte a dormir aquí, ya casi se va a hacer de noche -le dije sacando de mi canasta  una botella con agua y dándosela.

-Me encantaría, pero ya sabes. Haku está esperando y luego con los difíciles preparativos de la boda de Kaito y Miku, pues es más difícil quedarme. 

-¿Ya tienen una fecha para la boda?

-Sep. Quieren hacerla el quince de mayo. 

-Entonces debería hacer espacio para poder ir.

-Eso mismo pienso. Bueno, será mejor que me vaya ya porque pronto se hará de noche.

-Ten cuidado.

-Si. Y tu también, cuídate. No es bueno que estés tan sola en el bosque.

-Ya estoy acostumbrada, aprendí a defenderme hace un tiempo. 

-De cualquier modo deberías irte ya a casa. 

-Si, no pensaba quedarme mucho más.

-Bien, entonces Kiyouteru dice adiós.

Kiyouteru se transformó en ave y se alejó aleteando.

-¡Adiós! -le grité y el desapareció de mi vista.

Con un trapo limpié mi pincel y empecé a guardar mis cosas. Al acabar abrí la carta que me enviaron con Kiyouteru y la empecé a leer.

22 de abril de XXXX

Dame Tu Mano (Rin X Len Kagamine) TERMINADADonde viven las historias. Descúbrelo ahora