Amor desde España | Justboggi

39. Iván

Pov Iván
*dos semanas antes*

Maria se acaba de ir y Bog no contesta su maldito celular. No tengo ni idea de a dónde pudo haber ido.

—Hola, si escuchas este mensaje es porque estoy ocupado, llámame luego. ¡Adiós!

Colgué rápidamente el buzón de voz. Ya era la décima vez que le llamaba y no me contestaba.

—¡Joder Bog coge el teléfono hombre!— Empecé a dar vueltas por la habitación mientras marcaba otra vez.

Después del quinto tono me contestó. —Heyy.

—Puta madre Bog, ¿Dónde estás?

—No...no see...— Pude escuchar como habían voces de fondo. Parecía que hablaba con una chica.

—Bog, ¿Estás con alguien?— Tardaba mucho en contestarme. —¡Bog contéstame!

—Ivi...gritas mucho...estoy con mi amiga...se llama...no se como se llama, me da igual...es muy bonita...— Ok. Claramente está tomado. Además está con una chica y estoy muy seguro de que no es Maria.

Esto no es nada bueno.

—Bog...voy por ti ¿ok? No te muevas de ahí. No hagas nada estúpido.

—¿Nada estú-? Yo nunca hago...cosas estúpidas....linda pásame el trago....

—Bog solo quédate ahí ¿ok? Espérame, no te vayas a ir a ningún lado.

Bog me colgó y salí de la habitación. Rastree su celular y cuando llegue el lugar parecía una especie de bar. Solo esperaba que Bog siguiera ahí.

Entre y pude ver a Bog con una chica. Se estaban riendo y los dos parecían estar bastante borrachos.

Bog me vio llegar y se paró y camino en mi dirección, se abalanzó sobre mi y me abrazó.

—¡Iván! Estás aquí...vente...siéntate aquí...ay!

Bog se tropezó con la nada y casi se cae al suelo. No podía ni caminar de lo borracho que estaba.

—Bog nos vamos de aquí.

—¿Pero qué dices? Nono...¿irnos? Acabas de llegar...— Volteó a ver al barista y le hizo una seña. —¡Amigo! ¡Más tragos!

Rápidamente me dirigí con el muchacho y le hice una seña de que no le hiciera caso. Pagué todo lo que la chica y Bog habían tomado y me dirigí hacia ellos.

—Nos vamos ya.— Voltee a ver a la chica. —Tu también te vienes venga.

Los jale y los metí en el carro como pude. Llegamos al hotel y los llevé a las habitaciones. Decidí que la chica se quedaría en mi cuarto, después veríamos que hacer con ella. Ahorita no estaba en condiciones para irse sola.

Arrastre a Bog al cuarto que compartía con Maria. Todo se veía tan...vacío. Era un ambiente apagado, triste.

Bog se tumbo en la cama y lo ayudé a quitarse los zapatos y los pantalones. Había caído rendido. Lo acomode en la cama y me senté a un lado de él.

Nunca lo había visto así. Se veía destrozado, nunca le había pasado esto con ninguna otra chica. Maria realmente era especial para el.