Insecurity

Capítulo 8

"La nueva escoba"

—Aún me parece sorprendente que te hayas hecho buscador, más en primer año.

—Y yo aún estoy tratando de procesarlo— admitió, un poco sonrojado.

Le sonrió tímidamente a Theo, caminando hacia el Gran Comedor. Estaba bastante encantado con la idea, luego de conseguir una escoba iniciaría su entrenamiento con el equipo, y aunque estaba sumamente nervioso, también estaba emocionado. Se sentía algo bipolar, la verdad.

Se sentaron en la mesa, Harry saludó a los gemelos, los cuales le guiñaron un ojo, era un secreto el que fuera el nuevo buscador del equipo. 

—Vaya, Potter, me sorprende que no te hayan expulsado ayer— espetó Malfoy.

—A mí también— le respondió, poniendo los ojos en blanco. Theo soltó una leve risa.

Comenzaron a desayunar, Harry tomó la poción que le dio madame Pomfrey, aún le quedaba para recuperarse, y la mujer se había puesto aún más estricta ahora que iba a jugar en el equipo. Realmente se había sentido mal cuando ella comenzó a quejarse de lo peligroso que era que un niño jugara ese deporte, pero aún así, fue capaz de notar algo de emoción en su voz. Harry pensó que la sanadora también era fan de ese deporte.

Solo tenía dos clases los viernes, Encantamientos y Pociones, ambas a la mañana, por lo que la tarde la tenía libre para hacer lo que quisiera.

Visitó a Hagrid, y por mucho que quisiera, no le dijo acerca de su nuevo puesto, algo le decía que el hombre no era muy bueno guardando secretos, y se suponía que eso era un secreto todavía.

Vio la práctica de vuelo de los Ravenclaw y Hufflepuff, reconoció la tupida cabellera de Hermione, e incluso desde lejos logró notar que se sujetaba con demasiada fuerza de la escoba; suspiró suavemente, la pobre estaba realmente aterrada con respecto al vuelo. 

Decidió ir a leer en la biblioteca un rato, así de paso dejaría algunos libros que había prestado de allí. No le sorprendió que Hermione entrara allí como buscando refugio luego de un rato, se parecía a Neville en el sentido de que, aún estando pálida, parecía encantada con volver a tener los pies sobre la tierra.

Ron también llegó, aunque mucho más fastidiado, con varios pergaminos enrollados saliendo de su mochila. El pelirrojo no le parecía el tipo de persona que hiciera las tareas teniendo todo el fin de semana por delante, por lo que le pareció curioso que estuviera allí.

—Perdí una apuesta con Dean, ahora yo debo hacer su ensayo de Astronomía— gruñó, Harry contuvo el fuerte impulso de reírse. 

—No pueden jugar con eso— le reprendió Hermione, Ron frunció el ceño.

—Eso no te incumbe.

—Están siendo muy irresponsables, su educación no es un juego.

Harry se sintió cohibido, no estaban gritando, pero no le gustaba cuando la gente se enojaba. ¿Por qué siempre se molestaban tan fácilmente cuando él estaba cerca?

—¿Harry?— le llamó Hermione, tratando de poner una mano sobre su hombro.

El niño alcanzó a evitar el contacto, parpadeando un par de veces.

—Lo siento, yo... estaba pensando— masculló. —Lo siento, debo irme; le dije a Theo que haríamos el ensayo de pociones juntos. Nos vemos.

Salió del lugar tras mostrarle a la bibliotecaria el libro que estaba sacando, además de indicarle los que devolvía; le gustaba eso, en su escuela solo podía sacar un libro a la vez, si quería usar más de uno, debía quedarse allí... bueno, tampoco es que le molestara eso, era un buen escondite de su primo, Dudley nunca entraba a la biblioteca.