"El mensaje en la pared"
Harry pensaba que, en serio, nunca sería capaz de disfrutar de la fiesta de Halloween.
Ese día nunca se sentía de ánimos, y dudaba que realmente alguna vez lo hiciera, porque, por algún motivo, algo siempre pasaba en esa fecha.
En el mundo muggle no era la gran cosa... unos gritos, burlas.., nada fuera de rutina, pero en Hogwarts, bueno, con solo ser su segundo Halloween allí ya se dio cuenta de que las cosas allí tampoco serían normales. ¿Cómo serlo? Estaba en un castillo estudiando magia donde tenían clases con el único fantasma aburrido del colegio, donde un cerbero dormía con un peluche más grande que la mayoría de los niños de primer y segundo año, y las escaleras se movían los viernes.
En realidad, su plan inicial fue el de quedarse en las mazmorras nuevamente, esta vez, sin salir de ellas hasta que los demás volvieran... pero Sir Nicholas, mayormente conocido como Nick Casi Decapitado, el fantasma de Gryffindor, lo había invitado a su fiesta de cumpleaños de muerte, y Harry, al ver lo deprimido que lucía antes el fantasma, no fue capaz de negarse.
Como le dijo que podía llevar a sus amigos, él los invitó, no queriendo realmente estar solo ese día, y aunque le dijo a Nick que no se quedaría mucho tiempo, él parecía feliz con su sola presencia, aunque solo fueran cinco minutos.
Por la mañana tuvo clases normalmente, y aunque Malfoy parecía que iba a burlarse, volvió a amenazarlo a punta de varita cuando se acercó demasiado a él, impidiendo que diga algo sobre el hecho de que era huérfano.
Por la tarde, Fred y George lo animaron mostrándole una salamandra que habían "rescatado" de la clase de Cuidado de Criaturas Mágicas, aunque no sabía qué opinar cuando el precioso animalito se comió una bengala y comenzó a volar por la sala común de las serpientes, echando chispas por la boca.
A la noche, cuando llegaron las siete, Harry, Theo, Ron y Hermione fueron a las mazmorras donde se haría la fiesta.
Hacía un frío que parecía helar a los niños hasta los huesos, porque, si de por sí las mazmorras eran frías, con todos los fantasmas allí era peor.
Por demás, el ambiente era demasiado deprimente, cosa que no ayudaba mucho a Harry a dejar de pensar en sus padres, pero trataba de distraerse para no poner mal también a sus amigos, quienes fueran demasiado amables en acompañarlo en lugar de ir a la fiesta de Halloween en el Gran Comedor.
Se cruzaron con otros fantasmas que conocían, como el fantasma de Hufflepuff, el Fraile Gordo; también se encontraron con una niña fantasma llamada Myrtle, que, según Hermione, siempre estaba llorando en el baño de niñas clausurado del segundo piso.
También vieron a Peeves, lograron esquivarlo a duras penas; ninguno de ellos aguantaba realmente al poltergeist por culpa de sus pesadas bromas que de inocente tenían poco.
En algún punto se cruzaron con un fantasma al que Nick llamó "Patrick", que parecía gustar burlarse de Nick por no estar "bien decapitado". Harry frunció la nariz, dirigiéndose al fantasma maleducado.
—En realidad, encuentro más aterrador que la cabeza se le quede colgando que el que se la pueda quitar por completo... eso está muy visto— dijo con voz neutral, y en parte era cierto; la primera vez que vio que la cabeza del fantasma de Gryffindor se quedó colgado por una unión de piel le aterrorizó más de lo que hubiera esperado.
—En eso tiene razón, hay muchos fantasmas decapitados— asintió Theo, siguiéndole el juego a Harry.
Nick vio, con el rostro casi iluminado en alegría y algo de presteza, como Patrick dirigía una mirada incrédula a los niños de segundo año, antes de alejarse de allí para reunirse con otros fantasmas.

ESTÁS LEYENDO
Insecurity
Fanfiction[Primera parte - FINALIZADA] »Primer a cuarto curso de Hogwarts. _________________________________ Harry Potter llega a Hogwarts, pero el temor y la incertidumbre se volvieron una constancia en su vida y le impiden disfrutar su nuevo mundo como debe...