El locutor de radio

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El clima de marzo era perfecto, la brisa del viento era agradable y no sentías que te congelaba como aquel viento de diciembre; los rayos del sol brindaban una sensación cálida sin llegar a ser asfixiante como en agosto, simplemente, el equilibrio perfecto.

Pero llegaba una temporada que le gustaba bastante a Jimin, cuando las flores de cerezo comenzaban a adornar las calles de Japón y te hacía sentir que estabas en un mundo de algodón de azúcar. Debía aprovechar realmente aquella semana que duraba ese hermoso evento, ¿por qué todo lo hermoso debía durar tan poco? Las flores de cerezo se caían tan rápido como salían.

- Debía haber dejado mi cabello rosa - murmuró Jimin admirando la hermosura de aquel color - Ahora mismo seríamos iguales - dijo antes de dejar un cuenco con comida en el asfalto y caminar de regreso a casa.

Le gustaba aquella casa, era pequeña y linda, estaba en un barrio bastante calmado, con una vista hermosa por las ventanas... Justo como la que estaba viendo en ese momento, las flores de cerezo en un lado, y aquel grupo de gatitos callejeros que siempre aceptaban silenciosamente la comida que él les dejaba.

- El día está gris.

- ¿Hm?

- Va a llover.

- No creo, solamente es el aire haciendo su trabajo, mueve las nubes hacía acá y también se lleva las flores de cerezo - dijo ligeramente enojado con la naturaleza por llevarse algo tan lindo en tan poco tiempo.

Aunque ya estaba más acostumbrado que antes, nadie podía detener el reloj, nadie podía detener el ritmo natural de las cosas.

Todo lo más lindo se iba primero y duraba poco. Así es como todos lo sienten y cuando se dan cuenta se arrepienten por no haber disfrutado más.

- Va a llover.

- No, Tae, te lo prometo - dijo sonriendo - ¿Quieres comer?

- No - negó y abrazó sus piernas, se recargó en el respaldo del sillón y sorbió ligeramente la nariz, sus ojos lucían hinchados - ¿Hablaste con Yoongi?

- Oh, claro que si - dijo bufando - Le volví a proponer escaparnos a Perú para criar alpacas y se negó, ¿puedes creerlo?

Taehyung sonrió ligeramente - Si vas a proponerle que den el siguiente paso creo que deberías ser más directo.

- No lo creo, le encantan mis insinuaciones sin sentido, lo sé - afirmó sonriendo - Esta vez no pienso soltarle algo romántico en un Mc Donald's.

- Por mil escritorios, por favor no lo hagas - Taehyung rió.

- Deberíamos ir al acuario donde nos conocimos.

- Querrás decir, donde sabías que estaría y fuiste ahí "casualmente".

- En mi defensa, amo ver tiburones ballena.

- Claro - Taehyung se paró del sillón y estiró sus brazos - Iré a dormir un poco, no te preocupes por despertarme, disfruta el programa.

- Descansa, estaré aquí.

Jimin vio a Taehyung irse y suspiró, ¿cuánto tiempo planeaba dormir?

Su mirada se congeló en el techo de la sala, perdido completamente en sus pensamientos. Vio el reloj con forma de gatito que colgaba del techo, bufó dándose cuenta de que se había perdido media hora de programa.

Sacó su celular y buscó la aplicación de podcast, inmediatamente el sonido de una canción inundó sus oídos, cerró los ojos dejándose llevar por la melodía.

Second life pt. 2 || YOONMINDonde viven las historias. Descúbrelo ahora