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Cada paso que daban hacía eco en el interior del bosque, y Taehyung apretó sus labios al visualizar a lo lejos la silueta de los tres adultos ya arreglando los caballos.

— Oh, Ahí están — Habló la madre de Jungkook, mientras ponía su mano en el pecho aliviada.

Los dos en silencio se acercaron a sus familias, las cuales los recibieron con un leve regaño.

— ¿Dónde estaban? Ya iba a ir a buscarlos — Habló una voz masculina, la cual hizo encoger a de cabellos ondulados.

— E-El clima estaba agradable y nosotros... — Saemin chistó indicándole a su hijo que debía hacer silencio. 

— Suban al carruaje — Ordenó. 

Se sentó al lado izquierdo, dejando a Jungkook en la mitad, pues Somi se había elegido el lado derecho del carruaje, Mientras que las madres de ambos se sentaron al frente, dándoles la espalda.

Una vez en el carruaje, La madre de Taehyung notó a su hijo inquieto.

— Tae —Llamó, recibiendo la mirada de todos los que estaban dentro del carruaje— ¿Estas bien cariño? Te veo algo decaído.

Jungkook al oír eso no dudó en inspeccionar al mayor que estaba a su lado.

— Sí mamá — forzó una sonrisa — Estoy bien, s-solo recibí mucho sol y me duele la cabeza... 

—Cuando lleguemos te pondré unos pañitos con agua tibia ¿Bien? —Su hijo asintió. Le dio otra sonrisa a su madre e ignorando la mirada de un castaño a su lado, cerró los ojos y trató de pensar con calma.

¿Qué pasaría de ahora en adelante? Ahora que había confesado sus sentimientos y sabía los de Jungkook tenía miedo de lo que tendrían que enfrentar. Tenía miedo de nunca dejar de sentir esto por él, pero esto se le pasaría ¿Verdad?, Aún son muy jóvenes como para saber lo que querían ¿No es así?.

Suspiró y dejo que el aire que entraba por la ventana invadiera sus pulmones, pero ese aire se atascó en su garganta cuando sintió un nuevo peso en su hombro. Abrió sus ojos, y solo por instinto miró a  las dos mujeres que estaban hablando frente a ellos, verificó que Somi  tampoco los estuviera viendo. Cuando todo estuvo bien se dio la libertad de mirar la cabeza castaña que estaba sobre él, ¿Qué harían ahora?¿Que ganaron al confesar sus locos sentimientos? 

Apretó los labios y con un poco de duda recostó su cabeza sobre la del menor. Las mujeres seguían hablando y fuera del carruaje estaba su padre controlando los caballos, Se dejó caer en un corto sueño gracias a la calma que encontró por unos segundos, pero claro, La palabra calma nunca duraba en su vida, Cuando menos se dio cuenta un grito lo hizo despertar de tope. 

No fue el único que despertó tan agresivamente, a su lado Jungkook tenía sus ojos adormilados y su cabello despeinado a un lado. Saemin no entendía que estaba admirando.

— Ustedes ¿Por qué están de esa manera? — Somi y sus dos madres se giraron para verlos.

— Y-Yo me quede dormido en el hombro de Taehyung, fue mi error Señor Kim — Habló rápidamente, pero la cara del hombre solo se endureció más.

— Querido — Intervino la esposa del hombre — solo se quedaron dormidos, No hay nada de malo, Son amigos y-

— Son hombres — Interrumpió — Si tiene mucho sueño puede recostarse en el hombro de su hermana — Con su mano señaló a la hija de los Jeon.

— T-Tendré cuidado la próxima vez padre — Habló para que esa discusión innecesaria parara.

— ¡Tu cállate! — Alzó la voz con desespero alterando a los invitados. 

Para mi no eres Prohibido {KTH+JJK}. 𝐒𝐢𝐠𝐥𝐨 𝐗𝐈𝐗Donde viven las historias. Descúbrelo ahora