-¿¡Cómo pudiste traicionarme luego de tantos años juntas?! ¡Se supone que me sirves a mi! ¡No a esa criatura del infierno! -gritó la mujer mientras apuntaba al elegante hombre que sonreía con burla frente a la vampiresa.-Por favor, no hagas de esto un escándalo -pidió la pelirroja viendo con tranquilidad a su ama -Debo irme y será con tú permiso o sin el, ya no puedes manejarme Acasia, el lazo que nos unía ya está roto -habló mientras tomaba las manos de la rubia, viéndola con tristeza.
Sin embargo Acasia estaba furiosa. No podía soportar que su más leal sirvienta y mejor amiga se fuera con ese ser de brillante sonrisa y oscuras intensiones ¿Cómo pudo ser tan ciega para no notar que su mejor amiga estaba enamorada? ¿Dónde tenía la cabeza últimamente?
-¡Pero claro que está roto! ¡Porque él lo cortó para alejarte de mi, Mónica! -chilló mientras trataba de aferrarse con uñas y dientes a la única persona que amó en su vida.
-Lo siento Acasia, pero ya no pertenezco a tú vida -susurró la pelirroja mientras se daba vuelta y caminaba tranquilamente hacia ese nuevo ser oscuro.
Acasia, en un último intento por no perderla, reunió todas las fuerzas que tenía para tirar del lazo, haciendo que la pelirroja fuera forzada a detenerse y se diera la vuelta, viéndola con miedo y horror.
-Tienes mi permiso para irte Mónica -aceptó avanzando hacia la mujer, desafiante -Pero a cambio me darás al primer hijo que tengas con ese mounstruo -ordenó y automáticamente la orden fue procesada y aceptada por el cuerpo de la sirvienta.
(((....)))
Apenas abrí los ojos fui recibida por los pálidos ojos de Acasia, que me miraban, preocupados.
-¡Oh querida! Me alegra que hayas despertado, me diste un buen susto ahí abajo -expresó tomando mi mano con delicadeza -¿Cómo te encuentras?
-Bien, un poco adolorida, pero bien -murmuré llevando la mano libre a la cabeza y ella torció los labios en una mueca.
-Lamento lo de Caley, pero no te preocupes, ya lo castigué y no te molestará en unos cuantos días -acarició mi frente con dulzura para luego dejar un beso sobre esta -Te dejaré para que te cambies y descanses -y sin más abandonó la habitación, cerrando la puerta a su espalda.
Me levanté, sintiendo todo mi cuerpo pesado y al bajar la vista pude notar que tenía toda la ropa mojada, gracias al empujón que me había dado el rubio. Me quité la ropa húmeda, colocándolo en el cesto de la ropa sucia y busqué ropa seca, me coloqué otro pijama, me até el cabello mojado y volví acostarme en la cama, tratando de volver a conciliar el sueño.
Claramente no pude, y no era solo por el miedo a mis pesadillas, sino que me costaba conciliar el sueño en un lugar desconocido para mi. Fue por eso que salí de la habitación en dirección a la piscina, recordando perfectamente la razón por la que había ido allí en primer lugar.
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Los malditos Peyman| #1|+18|Terminada ✓
FantasyWendy Bunner era una chica dulce, inteligente y tímida. Era buena hija y buena amiga. Su vida era normal. Hasta que los conoció a ellos: Fríos. Seductores. Agresivos. Maleducados. Cínicos. Malditamente hermosos. Perversos. Y lo más importante: Con...