La vida de Raoul cambia cuando decide dejar Montgat e intentar arreglar su matrimonio con Cristina y que su hijo Pablo no sufra una separación. Pero claro, no contaba con conocer a un canario llamado Agoney, al que Pablito coge cariño enseguida y le hace replantearse muchas cosas. Agoney lo tendrá más difícil, al encontrarse de repente con una familia que le muestra todo su apoyo y tener que tomar demasiadas decisiones arriesgadas.