Una broma pesada

Sangre sucia

Las cosas nunca habían sido especialmente fáciles desde que descubrió que podía hacer magia. Antes de eso su vida era perfecta, era bonita en un sentido tradicional así que era popular en su antigua escuela, no la mas popular pero no es como que ella quisiera algo así. A pesar de haber una pequeña rivalidad inocente entre ella y su hermana se llevaban bien y eran muy unidas, por entonces ambas eran la persona favorita de la otra.

Los hombres lobo, las quimeras y las clases de aritmancia estaban muy lejos de sus pensamientos, entonces solo importaban cosas tontas y practicas como las matemáticas o quién era la primera de sus amigas en conseguir novio.

Entonces cosas raras comenzaron a pasar a su alrededor, por momentos era sostenida por el aire, luego la naturaleza se alteraba a su alrededor, los focos de la casa explotaban cuando se enfurecía... Sus padres mas que preocupados la miraron con miedo, Petunia sin embargo no se fue de su lado, aun después de que el resto de sus amigas le dieron la espalda al notar que había algo raro en ella y no pudieron soportarlo, de pronto se quedó sola con Petunia en el mundo.

Su padre se alejo de ellos por un tiempo concentrándose en trabajar todas las horas extra que pudiera tomar. Su madre que no podía darle la espalda solo se limitaba a ser seria y tomar una postura muy firme con Lily para que la niña controlara sus poderes y no le enseñara a nadie lo que podía hacer.

Petunia se había vuelto también muy protectora y gritaba a Lily regañándole cada vez que olvidaba esconder sus rarezas, claro, la niña no quería que alguien viera a Lily y sufriera mas por ello.

Entonces Lily conoció a Severus, fue una pésima primera impresión, se enojó mucho con él, pero por curiosidad la siguiente vez que se vieron hablaron largo y tendido, hicieron una especie de conexión muy profunda y muy rápido, Lily nunca había tenido un amigo que le importara tanto como si fuera familia.

Practicaron magia juntos y a escondidas de sus familias, se contaron todo sin omitir nada, se sumergían en un mundo dónde solo existían ellos dos. Sin darse cuenta que estaba dejando a su hermana de lado, y que prácticamente la estaba dejando sola después de que ella había ignorado a sus amigas por mucho tiempo para estar con Lily.

Petunia se volvió mezquina con Lily, la molestaba tanto que llegaron rápido a los golpes, la relación entre ambas estaba rota y Lily cada vez pasaba mas tiempo fuera de casa con Severus. Ambos estaban huyendo a su manera.

Él estaba enamorado de ella, y ella lo notó... Pero no quería perderlo, no sentía lo mismo y temía que si hablaban del tema el terminaría por sentirse incómodo y se alejaría de ella. A diario quería recordarse razones del porque Severus era simplemente la persona mas increíble que conocía, e intentaba forzarse a verlo diferente, pero no funcionaba, no se estaba enamorando de él, si, cada día le quería mas, pero no como debería en su opinión.

Finalmente llegó la profesora McGonagall desde Hogwarts y habló con sus padres, al quedar todo aclarado de pronto ellos se veían orgullosos de ella, de pronto tenía toda la atención y junto con todo eso pensó en todo lo que le deparaba el futuro, con Severus junto a ella y yendo a una escuela de magia nada podía salir mal, su vida parecía un sueño hecho realidad por primera vez en tanto todo se veía bien.

Solo que no fue así...

Nada mas pisar Hogwarts recibió una gran cantidad de acoso por el origen de su familia muggle, no era un acoso normal con sobrenombres y alguna zancadilla en el pasillo, la estaban intimidando de forma seria, amenazas de muerte incluso, ella tenía solo once años, no tenía cabeza para manejar todo eso. Pero afortunadamente tenía a Marlene, Amos, Alice, y por su puesto y mas importante tenía a Severus.

El también estaba siendo molestado pero no tanto como a ella. Severus recibía algunas bromas tontas por parte de Potter y sus amigos, nada muy grave honestamente y Severus con su poca paciencia hacía el conflicto mucho mas grande de lo que era respondiendo muy agresivamente, y aveces dejando que los mayores de Slytherin respondieran por él, los mismos que hacían sentir como mierda a Lily... Ella no sabía como reaccionar ante eso.