DERRIÈRE LES PORTES

CAPITULO 14

KARA'S POV

las pequeñas sospechas que tenía sobre la general y la reina fueron confirmadas por Alex

- ten cuidado y no digas nada – mencionó luego de que me pidiera acompañarla a la habitación de la general

- no diré nada –

Ambas entramos para encontrar al doctor aplicando el emplasto en la espalda de mi mentora, ella estaba profundamente dormida

- he dejado con la sirvienta las instrucciones a seguir – dijo el hombre

- gracias doctor –

Él se marchó

- Alex... Kara –

- Aria... ¿es verdad lo que están diciendo por ahí? – preguntó mi hermana

- que... -

- que el rey te azotó por irreverente –

- le dije sus verdades... - ella no podía mantener los ojos abiertos

- ¿estarás bien? – pregunté

- si pequeña Kara, el golpe que me diste dolía más... - se movió levemente – quiero levantarme – dijo

- no lo hagas – dijo Alex – estás delicada –

- no me estoy muriendo... por favor ayúdenme -

Entre Alex y yo nos encargamos de sentarla en la cama, tenía un rictus de dolor

- ¿segura que estás bien? – pregunté preocupada

- si Kara, no es la primera vez que me hieren... -

- ¿Qué pasó allí dentro? – Alex sentía curiosidad, y yo también

- el rey se atrevió a cuestionar mis funciones en el palacio, y bueno... no pude quedarme callada, la reina me envió a las mazmorras por tal acto de rebeldía, y durante la noche el nefasto hizo que los guardas me agarraran para poder desquitarse, ¡JAH! Es tan poco hombre que no se atreve a batirse en un duelo real conmigo... -

- lo harías papilla – mi hermana negó - ¿has visto sus bracitos?, me sorprende que haya podido causarte tales daños –

- usó el flagrum con espinas –

- eso tiene sentido... -

El sueño la atacó de nuevo y tuvimos que recostarla otra vez, quedó profundamente dormida, ambas salimos de la habitación y nos plantamos en cada esquina de la puerta

- esto va a traernos problemas – susurró Alex

- ¿el qué? –

- el rey no debió hacer eso... si la papisa se entera, arderá todo –

- ¿la papisa? ¿por qué? –

- porque esa mujer tiene en muy alta estima a Aria –

Pensé en todo lo que había pasado, Aria era una mujer que inspiraba muchas cosas, desde un profundo cariño hasta una pasión enardecida, y eso lo comprobé cuando la reina se atrevió a venir, podía notar su gesto de angustia, sus manos temblaban...

Ella estuvo con mi general un buen rato, en cuanto salió nos ordenó que no le permitiéramos la entrada a nadie, me sentía confundida por la contradicción de aquella mujer

- ¿por qué la envió a las mazmorras? – pregunté curiosa a mi hermana

- no lo sé, es la primera vez que ocurre, mi general siempre fue irreverente –