Siempre serás tu

CAPÍTULO 66.

Lola había venido a mi casa sobre las 4 de la tarde con una maleta. En esa maleta en vez de llevar ropa como las personas normales llevaba maquillaje y dos pares de tacones rojos, juraría que del mismo rojo que su vestido.

Gabriela nos avisó que no podría llegar antes de las 6 pero como siempre consiguió estar en mi casa a las 5:30.

- ¿Y Rodrigo?- preguntó Gabriela nada más llegar dejando las llaves del coche en la mesilla de la entrada.

- Pregúntale a Lola.- dije molesta.

Lola nada más entrar por la puerta y encontrarse con Rodrigo sentado, sin camiseta, en mi cocina acabando de comer...

- Llegue sobre las 5.

- Lola llegaste a las 4.- le corregí de mala leche mientras me sentaba en el sofá.

- Bueno eso, y estaba comiendo todavía y como no puede ver nuestros vestidos ni como nos preparamos pues le tuve que echar.

- Lola, estaba sin camiseta y...

Iba a decir que en su casa pero en verdad es mi casa, creo que ambas se dieron cuenta pero no dijeron nada.

- Bueno luego le sacaste ropa y las llaves del coche.- dijo está como si no hubiera pasado nada.- ¿Qué mas quiere?

- Quizá quiere que no se le eche de casa con la comida en la boca y medio desnudo a la calle.

- No hace frío, soportable. Además tiene cuerpo para lucirlo.

- Lola sigue sin ser normal.- dije resoplando.

- Estamos al lado de la playa.- dijo Lola justificándose otra vez.- Seguro que tienes alguna vecina cotilla que estaba mirando por la ventana y disfrutó de las vistas. Incluso se le subieron los calores al ver el morreo que os pegasteis en la puerta como adolescentes.

Puse los ojos en blancos antes de sentarme en el taburete.

- Bueno una vez solucionado pongamos manos a la obra.- dijo Lola dando un solo aplauso.

- Todavía queda tiempo, ¿no? ¿A qué hora vienen a recogeros?- preguntó Gabriela mientras se sentaba a mi lado.

- A las 8.- dijo Lola.

- A las 9, a las 8 sería si te hubieras preparado en tu casa porque serías la primera a la que recogería el chofer pero como todos sabíamos que para eso no ibas a estás lista le dijimos que se pasara a las 8:30 por tu casa. Como te cambias en mi casa a las 8:30 recoge a los chicos que se cambian en casa de Aaron.- expliqué porque yo misma había sido quien había encargado esta vez el chofer.

- Joder si ahora sois más controladores que mi jefa.- dijo Lola.

Le desafié con la mirada antes de girarme para hacerme un café, Teressa había pasado mala noche y Hunter no sabía que hacer. Acabamos en urgencias a las 3 de la mañana y no llegué a casa hasta las 9 de la mañana.

- No me miréis así.- dije notando sus miradas encima de mi.- Si hubiera podido dormir algo no estaría así.

- ¿Qué ha pasado? ¿Problemas de pareja?- preguntó Gabriela con cierto intriga.

- No, sino no se hubieran besado como lo hicieron antes de que Rodrigo se marchara.- apuntó Lola con una sonrisa pícara.

- Oh, entonces fue noche de...

- Tessa.- interrumpí a Gabriela rápidamente.- Ha pasado muy mala noche y Hunter ya no sabía que hacer así que después de llegar a su casa decidimos llamar a una ambulancia que la traslado al hospital y como Hunter estaba tan histérico no podía dejarlo que cogiera el coche en ese estado.