CAPÍTULO 62.

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- ¿Te quieres centrar de una vez? Mañana tenemos que ir a una gala benéfica y no tenemos vestido.- me dijo Lola. 

Gabriela, que todavía seguía afectada por tener que cancelar el desfile con uno de los mejores vestidos de la historia, se había ofrecido a ayudarnos con los vestidos para la gala benéfica que había organizado Aaron con fines de dar educación a los niños pobres de una ciudad de África. 

En esta gala se rifaría un viaje a Grecia que yo había organizado para dos semanas como si fuera para mí, Aaron lo aprobó a la primera y Lola se lamentó por no tener el suficiente dinero para poder llevárselo... esa pena la sentí yo cuando me di cuenta que tampoco podría optar a ese viaje. Ni Maldivas ni Grecia... un golpe duro para mi. Al final eso de que el dinero da la felicidad va a tener su parte de razón.

Me llevó más de una semana planear todo el viaje. Vuelos, no muy caros pero tampoco muy baratos en una agencia local de la ciudad que se ofreció a hacernos una rebaja si salía una oferta baja en la gala para poder destinar más dinero a los niños. Hoteles de lujo que casi no me puedo permitir ni una sola noche en pensión como para hacerlo con todo incluido. También me encargué de todas las reuniones con la agencia para poder negociar los precios con las aerolíneas que la agencia suele contratar y con los gerentes de los hoteles elegidos, aunque los hoteles no rebajaron el precio si no que nos dieron excursiones gratis y algunos productos como masajes, sauna y spa que no estaban incluidos en el todo incluido lo han aceptado como gratis. Un viaje valorado en mucho dinero que, según Aaron, es digno para los amantes del viaje. 

Así que, aquí nos encontrábamos las tres Marías... en una tienda de todo lujo buscando vestidos porque según Lola no podía salir fea en la televisión ya que toda su familia la iba a ver. 

- ¿Sara?- estaba vez fue Gabriela la que llamó mi atención haciendo que conectara de una vez por todas con la realidad. 

- No has mirado ningún vestido. ¿Te gusta alguno o quieres que Gabriela busqué por ti?- dijo Lola con cara de pocos amigos pero con una voz angelical.

En las tiendas anteriores Lola había dejado que Gabriela buscará vestidos para ella pero yo los había buscado por mi cuenta, creo que tengo bastante buen gusto para la ropa aunque se me den mal otros aspectos de la apariencia física como es el maquillarme o que zapatos ponerme. 

- Busca algo por mi, no he tenido mucho éxito en las otras tiendas yo sola.- dije, sonriendo como un ángel mientras Gabriela se giraba sobre los talones y reclutó a una dependienta para que le ayudará a buscar para nosotras dos. 

La dependienta nos observo casi un minuto y se fue hacía la zona de vestidos elegantes. 

- ¿En que pensabas? ¿En tus vacaciones?- me preguntó Lola. 

- Mañana por la mañana son mis primeras vacaciones, me dio el día libre para prepararme para la gala... pero no voy a ver a mi madre como tenía planeado. 

- Quizá sea lo mejor... no creo que estando en la situación que estáis ahora mismo lo mejor es que vayas...

La fulminé con la mirada, ella no podía saber eso porque nadie sabía que me había peleado con mi madre. 

- Tu madre llamó a Víctor desolada, nos contó lo que había pasado pero no entendíamos nada de nada... algo de que Hunter te había absorbido y que Rodrigo no te quería y no se qué de que la familia Williams estaba destruyendo la gran familia que erais. 

Me reí con desanimo mientras la señora que teníamos al lado mirando una chaqueta casi se le cae del susto. Me disculpé con la mirada y me centré en Lola. 

- No me apetece hablar del tema.- vi como sus labios se separaban para decir algo.-  No, no voy a hablar de ello. Respétalo por una vez en tu vida. 

Siempre serás tuDonde viven las historias. Descúbrelo ahora