The Heirs ⭐NCT⭐

33👑

- Buenos días. - Saludó a la chica. - ¿Está Taeyong? - Preguntó.

Seulgi tomó el teléfono y presionó uno de los botones. - Te buscan. - Fue lo único que dijo y luego volvió su atención al chico frente a ella. - Sígueme. - Le dijo de forma amable.

Caminaron por un pasillo hasta llegar al final donde se encontraba la oficina de Taeyong.

Ten entró con cuidado y sin hacer mucho ruido y ubicó a Taeyong en su escritorio.

-¿Te molesto? - Le preguntó y el mayor lo miró.

- No. Siéntate, en un momento estoy contigo. - Le dijo y Ten se sentó en uno de los sofás que había en la oficina.

Observó todo el interior y se sorprendió al ver que era muy diferente a lo que él pensó.

- Cuando tienes una hermana de cinco años a la que concientes demasiado, tu oficina termina así. - Escuchó decir a Taeyong.

- La verdad es que estaba pensando en eso, porque con todo respeto no te ves de esa clase de empresarios que tendrias una pared llena de colores en su oficina.

- No es una ofensa, tranquilo.

- Puedes seguir con lo que sea que hayas estado haciendo, olvida que estoy aquí. Me encuentro aquí solo porque mi madre está con la tuya y pues me enviaron aquí disque para conocernos mejor.

- Realmente no estaba haciendo mucho, solo trataba de encontrar un buen abogado. - Se sentó frente a él

- ¿No que todas las empresas tienen su departamento de abogados? - Preguntó curioso.

- Busco un abogado de familia. - Ten lo miró sin entender. - Quiero conseguir la custodia de mi hermana.

- Ya. - Dijo entendiendo. - Si me lo permites, puedo ayudarte con eso.

- ¿Cómo?

- Tengo un amigo que es abogado.

- Sé que a penas nos conocemos y tampoco es que nos hayamos conocido en las mejores circunstancias pero... ¿podrías ponerte en contracto con él? - La suplica que Ten vio en los ojos de Taeyong lo hizo entender que está desesperado.

- Dame un momento. - Ten se puso de pie y se alejó un poco.

Taeyong volvió a su escritorio para seguir leyendo unos archivos que le habían enviado esa mañana.

- Taeyong. - La suave voz de Ten lo llamó.

- Dime. - No levantó su mirada de su computadora.

- ¿Tienes tiempo ahora?

- ¿Por qué?

- El abogado quiere verte. - Dicho eso Taeyong al fin lo miró.

- ¿Ahora? - Ten asintió. Miró su reloj.

Tenía una reunión en una hora, pero podía pasarla para el día siguiente.

- Si, tengo tiempo. - Se puso de pie y camino hasta la puerta de su oficina, guiando también a Ten. - Seulgi cancela todo los pendiente que tengo para hoy, tengo algo más importante que hacer. - Ordenó. Su secretaria y amiga no preguntó nada y sólo obedeció.

Ambos se dirigían al elevador pero dos personas los detuvieron antes de llegar a este.

- ¿Van a salir? - Preguntó Sunghee.

-No es de tu incumbencia. - Fue la respuesta seca de Taeyong.

- Chittaphon. - El nombrado miró a su madre. - ¿Dónde van?